Asador Rincón de Lalo — Restaurant in Montejo de la Sierra

Me sorprende la puntuación que tiene el restaurante porque para nada se ajusta a la realidad del restaurante. Carta escasa, limitada a unos pocos primeros y unos pocos segundos, 3 postres y una muy pequeña selección de vinos. De la carta, los asados son por encargo. La mesa que teníamos al lado preguntaron por el asado que habían reservado y el dueño del restaurante les dijo que se le había olvidado (alucinante), tuvieron que pedir chuletón, debido al despiste del restaurante. Nosotros pedimos croquetas, ensalada, unos judiones, unas chuletas de cordero y dos entrecotte. Las croquetas frías, escasas, pequeñas y dudo mucho que fueran caseras, precio de caseras si que tenían. La ensalada, bien, lechuga, tomate, espárragos, huevo y cebolla. Una ensalada, sin más, con precio elevado. Las chuletas de cordero nos llegaron carbonizadas y secas, los entrecotte, sin más, una carne normalita sin nada que destacar, nos dijeron que era carne de la zona, no lo voy a poner en duda, pero si es así, pensaba que la carne de la zona sería de mejor calidad. Los judiones tenían delito, salsa sin ligar, sin espesar, fuertes y 4 judiones con todo caldo (y malo), para el precio que tiene.... Alucinante. Para terminar, no queríamos meter la pata con los postres y pedimos unos cafés. También quería comentar que para ir a los baños tienes que salir a la calle y entrar por otra puerta, por lo que en días de frío como esta semana, tienes que salir con abrigo. A la hora de pagar, quisimos pagar con tarjeta y también nos hicieron salir y entrar en el otro local porque no les llegaba la señal del datafono o eso nos dijeron. Comimos mal, lo mejor la ensalada y el vino, a un precio muy elevado. Ni volveremos ni recomendamos ir hasta que no mejoren. Sentimos que existía una gran dejadez en la gestión del negocio y es algo que no puedo...

Desastre en la elección del restaurante lo hicimos porque según anuncian se puede recoger la comida y se la lleva uno a casa, pues como eran las fiestas del pueblo no había sitio donde aparcar. Con muy poca amabilidad nos dijo el jefe y dueño: NO PREPARAMOS COMIDA PARA LLEVAR. Decidimos quedarnos a comer allí a pesar de que nos aplicaron el precio del menú de fin de semana y era un jueves, 25 euros/persona. Antes de ni siquiera tomarnos la comanda nos dijo: NO ADMITIMOS TARJETAS DE CRÉDITO, SOLO EFECTIVO. Le dijimos sin problema. Como habíamos escuchado a los señores de la mesa de al lado que si podían pagar con Bizum y les dijeron que si, pensamos pues nosotros lo hacemos también y así no nos quedamos sin dinero. Eso fue nuestro pensamiento pero el resultado final fue el siguiente: A la camarera le pedimos la cuenta y cuando la trajo lo primero que nos dijo que no se podía pagar con tarjeta la dijimos que ya lo sabíamos y que lo íbamos a hacer por Bizum. Se fue a consultar al jefe que no le habíamos vuelto a ver la cara, y vuelve y nos dice que le ha dicho su jefe que tenía que ser efectivo. El susodicho como le habíamos dicho al principio que si a su propuesta de pagar en efectivo vio el cielo abierto de disponer de 125 euros que seguro que fueron los únicos a juzgar por el restaurante que lo tenía vacío. Esto es un poco rollo pero cada uno que juzgue el comportamiento de ese...

Fuimos hace un par de días, con reserva previa, a celebrar el cumpleaños de mi chico, y la experiencia fue fabulosa!!! 🤩

Íbamos con las ideas claras, previa consulta de las RRSS, de pedir de primero judiones y posteriormente cochinillo para dos.

De los judiones podemos decir que eran cremita, sabrosos pero a la vez nada pesados. Sobre el maravilloso asado de cochinillo, en su punto, corteza crujiente y por dentro jugoso, con un caldito para mojar pan que hizo de perfecto postre. Como se puede imaginar, ni lo pedimos de lo llenos que estábamos!!! Jajajja

Sobre la atención de Lalo, solo puede agradecer su profesionalidad, porq lamentablemente el día que fuimos estamos solo atendiendo dado que su compañera estaba malita, y aún así, lo tenía todo controlado, tanto en barra como en salón y como he comentado antes la comida fue maravillosa.

Volveremos sin dudarlo porque tanto el pueblo, sus lugareños, restaurantes y tiendas se portaron de 10 con nuestro hospedaje.

¡Por lo tanto, solo me queda despedirme con mucha alegría hasta la próxima vez...