Cómo siempre la comida espectacular, calidad, cantidad y presentación de 10. Pero en comparación a otras veces el servicio nos ha decepcionado.

Primero, pedimos picos o regañas en el servicio de pan y parece ser que han dejado de dar esa opción, pero cobran el servicio de pan al mismo precio.

Segundo, cuando nos traen la ensalada de burrata viene sin servicio, teniendo que cortar y repartir con los nuestros, claro al no tener cuchara todo se nos caía, un camarero se da cuenta y ya nos traen.

Tercero, pedimos unos mejillones de roca a la plancha espectaculares, igualmente sin servicio para repartir, sin cambiar platos (pues la burrata y mermelada de pimientos que lo acompañaba mancharon el plato y mezclarlo con el aceitito con ajo mal maridaje para mojar pan 😃), pedimos cambio y sin problema lo traen.

Cuarto, terminado este plato tan espectacular y de rechupete, se llevan los platos, cubiertos y servilletas (que eran minis, no las habitualmente moradas que son más grandes, y habían quedado bastante sucias); tenemos que solicitar toallitas húmedas para limpiarnos porque no sé si daban por hecho que nos relameríamos...

Quinto, traen el atún que ha sido una delicia, pero ya servilleta no, tal vez era un extra... viendo cómo ha ido el estar pidiendo y la poca atención, se nos ha quitado las ganas de postre.

Claro está que repetiremos, porque la comida es un espectáculo, y con ganas de volver a ver el servicio tan maravilloso que siempre han tenido.

Tal vez hoy ha sido un mal día, eso esperamos, porque es de nuestros restaurantes favoritos.