Reina Bistro Bar — Restaurant in Olula del Río

Fuimos hace un par de semanas con mi pareja durante una escapada de fin de semana. Íbamos a cenar a otro sitio, pero al pasar por la puerta nos llamó la atención el ambiente y decidimos quedarnos, ¡y qué buena decisión!

El personal fue muy atento, y aunque no recuerdo la marca de la cerveza, sí agradecimos que la sirvieran tan fresquita y bien tirada. Pedimos recomendaciones al camarero y nos sugirió probar las tapas, todas con muy buena pinta.

Probamos el pan bao, las quesadillas, los tacos y la estrella de la noche: un pan brioche relleno de chipirones (creo)… ¡una auténtica delicia! Solo por ese brioche, merece la pena repetir.

Como único punto a mejorar, tardaron más de media hora en traernos las tapas. Es verdad que era sábado y la terraza estaba llena, pero nos pareció un poco excesivo para ese tipo de platos. Aun así, si volvemos a Olula del Río, sin duda repetiríamos. De precio también muy bien: unos 33 € entre dos personas con dos rondas de cerveza. Eso sí… si hubiesen sido más rápidos, habríamos pedido otro brioche sin pensarlo, pero dijimos: “como tarden otra...

Le pongo una estrella porque no le puedo poner menos, me parece vergonzoso que venir a tomarte una cerveza con una "tapa" ( tienes que pedir algo porque no te la dan, es respetable) y tarden, literalmente una hora en servirte 4 cañas y las 4 tapas que han venido a distintos tiempos. No sólo eso, hemos pedido las primeras 4 cañas, nos han dejado el código QR, tras acabarnos dos comensales las cañas... Hemos tenido que llamarlos para preguntarles si nos tomaban notas, porque por ellos... hubiéramos seguido igual. Tras tomarnos nota y traer las dos cañas restantes, hemos seguido esperando hasta que han llegado las croquetas (estaban ricas), más tarde el taco de cochinita pibill (estaba FRÍO) y después de esperar otros 15 minutos largos, hemos tenido que pedir la cuenta y quejarnos otra vez para que nos llegaran los pan baos... y otra vez, los panecillos congelados. Entre otras, nos hemos encontrado malas caras, uno de los baños sin funcionar y qué decir del precio de 27€ por 6 cañas y cuatro tapas...

Me parece un sitio súper lento, aunque la comida esté buena. Nos pedimos unas racciones de pluma al centro de la mesa y se las recordamos varias veces porque pensabamos que se les habían olvidado al tardar demasiado y siempre decía lo mismo en dos minutos están listas. A la hora de pedir el postre viendo que no venían, le decimos que si no han puesto la pluma en las brasas que no la traigan, pues viene y dice en dos minutos está lista (como siempre), pues la trajo a las 12 de la noche después del postre (si no la tienes no pasa nada pero dilo y no nos metas la pluma para inflar la cuenta). No sólo fue por la pluma sino el resto de tapas, si vas no hagas planes porque no sabes a qué hora saldrás, no...