La Jamonería — Restaurant in Oviedo

Fui a la Jamonería en junio de 2013 después de pasar muchas veces al lado suyo y de no haber entrado nunca. Lo cierto es que el sitio es bastante pequeño y no excesivamente llamativo por fuera, por lo que supongo que para un restaurante así lo que funcione realmente sea el boca a boca. Y así debe de ser, ya que al comentar a todos mis conocidos las excelencias del local, resultó que la mayoría ya habían estado en él y además compartían mi opinión.

Lo primero indicar que comimos dos personas, rondando los 40 años. Quiero resaltar esto ya que cada vez me percato más de la diferente percepción de la comida que se tiene dependiendo de la edad del comensal (sin ir mas lejos, hace años yo mismo hablaba de las excelencias de algún cachopo de esos que son grandes como sábanas y a día de hoy me doy cuenta de que la mayoría de esos macro-cachopos que se venden por ahí son incomestibles. Pero ya se sabe, de joven ves un cachopo de 1 Kg y piensas que es la leche!!!!. En fin, pecados de juventud que se curan con el paso del tiempo).

De entrante pedimos una ración de croquetas de jamón (10 unidades / 8 euros) y media de matachana (2.5 euros). Ambas excelentes. A continuación yo pedí una ración de carrilleras de ternera (12.50 euros), que posiblemente sean de las mejores que comí nunca, y el otro comensal un solomillo de ternera (14.50 euros), tierno, jugoso y en su punto. Todo ello acompañado de patatas.

Finalmente de postre pedimos una tarta de queso y requesón con nueces (3.00 euros cada postre). Deliciosos.

Con un par de cervezas y el pan, al final pagamos 48.50 euros.

Vamos, que no es el típico sitio en el que vas a cenar por 12 euros/cabeza, pero teniendo en cuenta lo que comimos me pareció baratísimo. En otros sitios (y de los normales, no hace falta ir a Casa Fermín) por el solomillo te clavan 18-22 euros, por las carrilleras 15-18 y por los postres 4.50-5.00 (el subidón que están pegando los postres últimamente es de aúpa, el otro día en una sidrería nos cobraban 5,00 euros por un arroz con leche, y el postre más barato de su carta estaba a 4.50!!!).

El camarero que nos atendió, correctísimo, y los platos salieron con la rapidez adecuada. El local elegante, pero sin pasarse. Evidentemente repetiré. Eso sí, tendré la precaución de reservar, ya que el sitio no es...

Este restaurante ubicado en Oviedo es realmente asombroso y se destaca por su calidad culinaria excepcional. El trato que recibes en este lugar es más que fabuloso, lo que contribuye a crear un ambiente excepcionalmente agradable. De hecho, es raro que pase un mes sin que visitemos la jamonería, ¡al menos unas 2 o 3 veces al mes! Esto demuestra la atracción continua que ejerce este lugar sobre nosotros.

Una de las características más notables es la calidad de los productos que ofrecen, y su cocina es indudablemente una de las mejores de Oviedo, considerada entre los 4 mejores restaurantes de la ciudad.

El ambiente en este restaurante es verdaderamente formidable. La bodega en sí misma es una experiencia extraordinaria, y el trato que recibes del personal es sencillamente espectacular. No deberías perder la oportunidad de probar este restaurante si visitas Oviedo, ya que es una experiencia culinaria única.

Hablemos un poco de los platos: el Salmón en salsa holandesa es una delicia, al igual que los Langostinos con patatas. Además, el Bonito en salsa de ibéricos es una elección exquisita, independientemente de cómo lo preparen.

Los postres, como las natillas de maracuyá, son caseros y simplemente deliciosos. Incluso si no tienes una foto de los postres, puedo imaginar lo deliciosos que deben ser.

En resumen, este restaurante en Oviedo es un lugar que combina calidad culinaria, un trato excepcional y un ambiente encantador. Es una experiencia culinaria que no querrás perderte si te...

Lugar espectacular. Casa de comidas con mayúscula. Pasión y dedicación en casa detalle reinan en esta taberna. Carta bastante extensa y con fueraa de carta para pedir todos. Fuimos 4 personas previa reserva, casi obligatorio. Cercano a plaza america, parabir caminando, próximo al Calatrava y con escaso aparcamiento cerca. Barra, cañero y unas 6-7 mesas. Pedimos tomate con sardinas anchoadas, pimientos asados con bonito en temporada (los pimientos estaban riquísimos), salteado de setas con salsa y un huevo (la salsa para bebersela y el huevo de gallina feliz no falla), tortilla de bacalao (espectacular, lo dicho, huevos de gallinas felices y buen bacalao, riquísima). Pedimos varias cañas vinos y aguas, las cañas perfectamente tiradas, digno de mención. Y los postres, viene lo fuerte, de las mejores tartas de queso de oviedo y una especie de helado de frutos rojos te quemados riquisimos. Servicio encantador, muy atento, sirven rápido. Además fue un placer volver a verles, por circunstancias ya les conocía y fue una alegría, volveré a verles más seguro, me quedan por probar las carnes! Baños muy limpios. Totalmente recomendable, ir a cenar o de tapeo a la barra, podría ser uno de los...