Ramses — Restaurant in Piloña

Un día como cualquier otro que paré en el Ramsés,mi perrina vomitó y bueno uno de sus camareros se enfadó pero cuando le dije que me trajera la fregona y qué lo limpiaba yo, me dijo que con la fregona que no valía que ya lo hacía él,y bueno se puso David a darme voces delante de todo el bar que valla como era,que ni siquiera me moví para limpiarlo,no me pareció ni medio normal que delante de todo el bar me de esas voces evidentemente,para hablar en un sitio en el que hay más de 20 personas hay que levantar la voz,en vez de acercarse a decirme lo que viera conveniente me lo dice a voces delante de todas las personas cuándo minutos antes le dije a su camarero que yo mismo lo limpiaba si me traía los utensilios(fregona,escoba) debería de haberse acercado Ami para decirme lo que tuviera que decir,pero sobre todo preguntar si el animal está bn,lejos de vociferar de una forma negativa hacia mí sin razón. Después de la que me marchaba me puse a esplicarle a David que estuvo fuera de lugar que me dijera eso a voces delante de todas las personas,a pesar de que se lo dije al lado de él y totalmente con el tono bajo ya él volvió a vociferar diciendo que lo podría haber recogido de cualquier forma, cuando no es así,con servilletas de esas que no valen ni pa sonarse los mocos nose puede limpiar una potada de un perro. No es nada agradable que alguien sin razón algúna en público te levante la voz entonces por eso y encima criticar sin razón le dije que era un bocazas,el tío empezó a insultarme incluso cuándo me iba me dijo que me tomara la pastilla en público, dejándome de loco, solamente por tener más sangre que el,en el dedo gordo del pie que , David en todo el cuerpo ya que nunca e tenido ningun problema mental ni me e tomado ningún tipo de medicación,y David pretendió hacer burla de mi hiperactividad, solamente dejar claro que no me parecen buena gente y el lomo parece que lo pillan en temu,me puse malo varias veces. Ni tubo empatía hacia el animal ni respeto hacia mí, aparte de ser un bocazas y decir lo que no debía encima a voces delante de más de 20 personas...

Entramos a pedir algo para cenar en hora de servicio pero no solo no nos quisieron atender si no que nos trataron extremadamente mal y se negaron incluso a darnos una explicación o una hoja de reclamaciones. Había ido muchas veces con anterioridad pero, desde luego, no voy a volver a un lugar donde al cliente se le trate de este modo.

Edito el mensaje dada la reacción del dueño a nuestros comentarios: entramos al local a las 23:35. Sí, muy tarde, pero en su negocio tienen puesto un cartel que indica: “horario de cocina hasta las 12”. Entiendo que los trabajadores/as del local estuvieran muy cansados a esa hora, que ya no entraran más pedidos a cocina o lo que fuera pero considero que al cliente se le comunica esto con tranquilidad y listo: lo hubiéramos entendido PERFECTAMENTE . Lo que NO tiene justificación alguna es que a una persona que, de buenas maneras, va a preguntar si puede comer algo se le GRITE y HUMILLE delante del resto de los clientes del lugar. No me parece propio de alguien que trabaje cara al público insultar a un cliente. El dueño pide empatía para los trabajadores/as y estamos muy de acuerdo como trabajadores que también somos. Lo que quiero dejar bien claro es que, personalmente, me sentí avergonzada porque un señor (dueño del lugar) empezó a gritarme,a reírse y a hacerme burla sin motivo…a una cliente no se le puede decir: “porque si la señorita quiere comer…tengo que darle de comer? ñiñiñi”. ESO NO SE HACE. Suerte con su el negocio, caballero,...

Visité este lugar recientemente y la experiencia fue muy positiva de principio a fin. El ambiente es muy agradable y el local está muy bien decorado, con un estilo acogedor y cuidado al detalle que hace que uno se sienta cómodo nada más entrar. Es un sitio en el que apetece quedarse, ya sea para comer tranquilamente o simplemente disfrutar de un buen café.

Algo que me alegró especialmente es que son de la peña del Real Madrid. Como madridista, me pareció un detalle que aporta mucha personalidad y un sentimiento de cercanía, lo que hace que el lugar tenga todavía más encanto.

El servicio es excelente: el personal es atento, rápido y siempre dispuesto a ayudar, transmitiendo profesionalidad y a la vez cercanía. Esa combinación hace que uno se sienta muy bien atendido, como en casa.

La comida destaca por su gran calidad. Los platos están preparados con esmero y buenos ingredientes, algo que se nota en el sabor. Además, la relación calidad-precio es espectacular: se disfruta de una experiencia gastronómica muy buena sin gastar demasiado, lo cual es un gran punto a favor.

Un detalle que quiero resaltar son los cafés. Aquí no sirven cafés pequeños, sino muy grandes, ideales para disfrutar sin prisas, charlar o relajarse.

En definitiva, es un lugar que combina un ambiente agradable, buena comida, precios ajustados y un servicio impecable. Lo recomiendo totalmente a todo el mundo y sin...