Nuestra experiencia en este local fue un poco agridulce. Para empezar realizamos la reserva la noche anterior a nuestra visita, pretendíamos comer a las 15h a lo que nuestra interlocutora al teléfono nos respondió que esa hora era hora punta y que no nos podía garantizar la reserva. Algo bastante ilógico ya que si te llamo con antelación para reservar lo normal es que, si tienes mesas disponibles, me garantices mi reserva. Aclaro que no nos dio a entender que no las tuviera disponibles si no que simplemente no nos garantizaba la reserva y tuvimos que cambiar la hora. Al llegar nos sentaron bastante rápido y nos explicaron bastante bien la carta y el tiempo de maduración y la calidad de sus carnes. Decidimos pedir en primer lugar para beber a lo que la camarera nos indicó que no, que debía tomar la comanda junta, comida y bebida. Elegimos nuestra comida de ración al centro unos calamares de la Ría, muy buenos. En cambio a la hora de elegir el segundo es donde nos sentimos algo engañados. Mi pareja quería comer chuletón de vaca gallega cuyo precio era de 38€/kg. La camarera sencillamente se limitó a decirnos que nos ponía mejor el de vaca rubia gallega 60€/kg, mi pareja dijo que no, que quería el otro y entonces ella respondió que no le quedaba, aquí sinceramente creemos que nos engañó ya que en ningún momento había mencionado que no tuviera ningún plato y que sólo lo dijo cuando mi pareja dijo que no quería cambiar el plato, hay que añadir que era domingo primeros de agosto y que la verdad nos resulta muy extraño que no tengan platos sobre todo a la hora de comer. Cuando me tomó nota a mi prácticamente hizo lo mismo, yo quería pedir churrasco de ternera 16€ y volvió a "vendernos" churrasco de vaca rubia 18€ que según comentó tenía más carne y menos hueso. A continuación nos dijo que el chuletón llevaba patatas de acompañamiento pero el churrasco no que si queríamos añadirlas o añadir ensalada, dijimos que vale en ningún momento nos informo tampoco del tamaño de la ración de patatas ni de su precio. Lo cierto es que nos sentimos bastante engañados a pesar de que la comida estaba muy buena y sinceramente cuando uno va a comer fuera no espera tener sensaciones negativas por muy buena que...
Read moreSomos del pueblo y vamos a la quinta a menudo, nunca con malas experiencias, hasta el día de hoy. Pedimos unos entrantes que bastante bien, el problema fue con el cachopo que pedimos para tres personas (con recomendación de que era suficiente). Para cualquier persona de la zona, al lado de asturias además, presentar esto como un cachopo... Por no hablar del tamaño del "cachopo" por el que cobran 26€, este en particular hecho con carne vieja, con mal sabor, solo hay que verle el color. En fin, educadamente le pedimos a la camarera que lo retirara porque no nos lo íbamos a comer (después de probarlo) y pedimos otro entrante porque ya era muy tarde para pedir algo más elaborado. Cuando fuimos a pagar, la sorpresa fue que nos incluyeron el cachopo en la cuenta. Cuando reclamamos, vino la que suponemos que será la encargada, a preguntarnos qué había pasado, y le comentamos que estaba malo y que no lo habíamos querido comer. Nos dijo que "es que no estaba entero", hombre, los tres pedazos en que lo partimos (que era para lo que daba) se quedaron en los platos. Le pareció fatal, solo se dio la vuelta con mala cara y nos lo sacó del ticket, para después tirarlo literalmente encima de la barra e irse diciéndole a su compañera que nos cobrase, sin pedir una disculpa o mirarnos a la cara. Creo que fuimos lo más educadas que pudimos, simplemente no veo justo pagar por un plato que no te has comido y que no está en condiciones de comerse. Podría haber sido un infortunio puntual, pero el mal trato recibido ha hecho que se ganen una mala reseña y que probablemente no volvamos. Las camareras muy educadas y profesionales, eso sí, y siento si pasaron algún tipo...
Read moreDe 5* ha bajado al baldosín. Ayer estuve llamando a la Quinta de Ribadeo ( El conocido asador) la friolera de 25 veces en estas últimas me cogieron la reserva, les dije que iba con mascota y me dijeron que me pondrían en la terraza, con la reserva en espera por llevar mascota. Hoy hemos ido, y han tenido la poca vergüenza de sentarnos en la acera de la calle, han juntado dos mesas, ha salido un camarero y ha sacudido toda la harina encima de nosotros, diciendo vamos a ver aquí les dejo la carta y van eligiendo. Me he levantado y he ido a la responsable y le he dicho que si era normal después de haberme desplazado 42 kms, ponernos en la acera de la calle cuando me han dicho que era la terraza, que me lo hubiese dicho por teléfono y no me hubiese desplazado, que ...a vergüenza Sres, desde que se jubilo el dueño que lo llevaba toda la vida, ese Sr., si que era un profesional nato y con clase. Se acabó este restaurante ya no es el mismo, y después te dicen que se les ha terminado toda la carne, este restaurante que se dedica exclusivamente a este menester, hoy por hoy no merece la pena ni llamar porque pierdes muchísimo tiempo y luego te ponen en la acera de la calle, que ellos consideran la terraza, que no te lo dicen hasta que estás allí, Sres si no tienen terraza no pongan Vds a los clientes en la acera de la calle donde pasan todos los transeúntes, y mascotas habidos y por haber. Que ya no se asoman a la profesionalidad, sino a la mediocridad, es totalmente nefasto y de más gusto. SE ACABO QUE SIGAN HACIENDO ESO QUE ELLOS PRESUMEN COMO...
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