No tuvimos una buena experiencia. Es cierto que la recepción fue muy buena y que nos ofrecieron alternativas ya que empezó a llover y estábamos en la terraza, hasta aquí todo genial. Nos atendió una camarera sin muchas ganas, no pasa nada, un mal día lo tiene todo el mundo. Apuntó nuestro pedido pero no estábamos seguros de que la cosa hubiese ido bien...10 minutos para apuntar en la tablet y un poco lioso todo.. Apuntar que estábamos bajo un toldo pero cuando los platos salían de la cocina se exponían al aguacero...No pasa nada...Son tres pasos hasta el toldo y nuestra mesa.Pedimos dos entrantes, ceviche y mejillones. Empezamos a pensar que era una cámara oculta cuando nuestra camarera estaba bajos la lluvia con nuestros platos...No sabía a qué mesa iban...No pasa nada...Un fallo lo tiene cualquiera. Uno de de nosotros pidió un entrecot de medio Kg. El comensal era argentino (Esto lo digo porque algo versado está en carnes, cortes y pesos). El entrecot no llegaba ni a 400 gramos. Hablamos con un camarero (Súper amable) para quejarnos sobre esto, no era barato. Vino una responsable y nos aseguró que los entrecots venían con el peso y ... Bueno...No es verdad, pero bueno.
Y ahora empieza lo surrealista!! Yo pedí calamar a la plancha...De repente veo a la camarera súper despistada, con mi plato de calamar en la mano, en medio de las lluvias torrenciales..
A QUÉ MESA VA ESTO?? Le pongo voz...Podiamos leer sus pensamientos (Modo ironía). Mi calamar llegó
..Sí, llegó pero flotando en agua de lluvia que si lo piensas es sano pero a lo mejor calentito de la plancha estaba más bueno. El calamar estaba sobre su tinta, genial si no cae un torrente sobre él, la verdad es que nos divertimos un rato viendo mis dientes negros, mis manos...Incluso pensé en dibujarme un bigote falso con la tinta diluida..No lo hice y me arrepiento. Otra de las comensales había pedido un Tataki de salmón (15€, recordad esto). Jamás llegó...Ya eran casi las 16h. Reclamamos y le trajeron un plato de atún. Ya no queríamos llamar más la atención y se lo comió.
Cuando vino la persona responsable (Ehhhh...Para hablar del entrecot) Le comentamos sobre el atún. Respuesta..
Y por qué se lo ha comido? Reclame y con gusto cambiamos el plato..Respuesta de mi amiga..Es que tenía hambre...
Final de fiesta: Vienen con la cuenta y nos dicen: Disculpen por los fallos les hemos descontado 3.95€ por el entrecot...Perdona? Entonces reconocéis que no era el peso?
Lo peor, ellos se equivocan con el plato de mi amiga y le cobran 21€ por el atún cuando el plato original valía 15€.
A ver...No somos "Tiquismiquis" Pero todo fue un despropósito... y la cuenta sin postre, ni cafés, una botella de vino y agua 160€.
Nos fuimos sin mirar atrás (Toque dramático).
Una vergüenza el servicio, la situación y la resolución. No volveremos.