Farigola & Menta — Restaurant in Torrent

Reserva para 2, viernes noche. Local muy bien climatizado y con una decoración a destacar. Al inicio servicio lento, aunque más tarde el turno recuperó su ritmo. Corta variedad en cervezas, pero servidas en copas de cristal fino. Nos decantamos por: pan de masa madre con aceite de tomate seco y alioli de mango. Delicioso en boca, sabor suave. croqueta líquida. Conjunción de sabores increíble. mollete de solomillo. Para repetir una y mil veces, tierno y sabroso tiradito de atún. Quizá el plato menos espectacular, excesiva maceración cítrica que impide valorar la calidad del producto. No lo repetiría. steak tartar. Presentación fuera de lo habitual, melosidad y equilibrio de sabores correcta, pero su precio algo elevado. Para probar al menos una vez pero no sería uno de mis principales -tiramisú. Cómo postre nos dejamos aconsejar por David, el dueño, y fue todo un acierto. Nada que ver con el tiramisú habitual. maridaje : sangría de cava. Podríamos decir que es un agua de valencia, solo que servida en un recipiente que llama la atención. Si bien es cierto que su precio es algo elevado, hay que tener en cuenta que se entiende como un cocktail y se sirve en formato de un litro, más que suficiente para toda la cena. Precio total 50€/pers. A tener en cuenta la elección de varios de los platos más caros de la carta. Se puede cenar por mucho menos y de manera satisfactoria. Repetiremos sin duda ya que nos quedaron platos pendientes como sus famosos huevos rotos o su ceviche de corvina. Recomendación: reservar en salón. Dispone de terraza externa e interna. Tienen el detalle de entregar toallitas húmedas al traer la cuenta. Tuvimos la ocasión de conocer al dueño y es un claro ejemplo de la voluntad por entregarse a...

Atención estupenda☺️ Local acogedor y muy bien decorado. Hay salón, terraza interior o mesas altas. Nosotros estuvimos en salón muy cómodos. Todo buenísimo y muy bien presentado. A mejorar: las cantidades son escasas para el precio que tiene. Deberían de tener en cuenta que cuando somos 4 en la mesa algunos de los platos deberían de tener cantidades pares. Por ejemplo: si somos 4 no pongas 5 rebanadas de pan. 🥖 O el plato de gyozas x ejemplo, también 5 unidades. Es incómodo cuando hay 4 personas. Sería buena idea que el camarero aconsejase completar plato con más unidades con el coste oportuno. (Es una 💡 idea para mejorar) A destacar: como entrantes, las alcachofas 😋 buenisimassssss No puedes irte sin probarlas! 👏 Los bocaditos de patatas. Estupendos!!!! Y con un sabor muy acertado 😍 ( se sirven x unidad) Las gyozas normales. No recomiendo la ensaladilla de mar. Parecía una conserva mezclada con salsa líquida. 😞 Las baby bravas son diferentes, pero no las volvería a pedir. Un poco saladas. En mi caso no me gustan con piel. 🥔 👉En cuanto a los tacos: podéis ver la foto. 🌮 estaba prácticamente vacío. (7€) poca cantidad. Lo pedimos como principal individual y la sensación es de cantidad pobre. 👎 Postres: muy buenos y originales ! Con lo que pedimos de cenar el postre era importante para no irnos con la sensación de vacío. Recomiendo la maceta 🪴de chocolate 🍫y café y también el melocotón 🍑

❌Imposible aparcar 🅿️ Ves con tiempo e intenta aparcar antes de llegar porque después la calle se estrecha y tienes q dar toda la vuelta. Local...

🍽️ Farigola & Menta – alta cocina con un toque de magia gastronómica

Cenar en Farigola & Menta no es solo comer, es una experiencia. Cada plato parece salido de un laboratorio de sabores donde la creatividad manda y el aburrimiento no tiene mesa reservada.

Empezamos con una ostra digna de pasarela gastronómica (foto 1), servida en su concha con perlas de bergamota y crema de aguacate. Un solo bocado, intenso y elegante, que se queda en la memoria como un buen poema corto.

Después llegó un plato blanco, delicado (foto 2) – probablemente el bacalao. Una crema suave, aireada, casi etérea. Sabor sutil, pero con carácter.

Luego, la estrella visual de la noche: arroz negro con tinta de sepia y carrilleras de bacalao (foto 3). Un contraste hermoso entre el arroz potente y los trozos tiernos de pescado, con una espuma que lo unía todo como un abrazo salado y cremoso. El equilibrio estaba ahí, en cada cucharada.

Y para cerrar, miré con cierta duda el magret de pato (foto 5)… pero no pude resistirme. Cocinado al punto perfecto, rosado y jugoso, con una salsa densa y frutos rojos colocados con precisión. Un final redondo para una cena memorable.

✔️ En resumen: no es un restaurante con estrella Michelin, pero definitivamente tiene estrellas en la imaginación. Creativo, sabroso y valiente. Los precios son razonables para el nivel de inventiva y detalle.

😄 Si quieres poner a prueba tus papilas gustativas y salir un poco de lo habitual sin arrepentirte de la cuenta, Farigola & Menta es una elección...