Buscando aparcamiento con intención de comer en Utrera..... Estas cosas que pasan en la vida, aparcamos casualmente frente a este restaurante. Estaba a "reventar", no obstante con nuestro golpe de suerte probamos a pedir mesa. Nos atendieron rápidamente, y después de quince minutos tomando una cerveza en la barra, nos avisan que tenemos mesa. Pedimos unas tapitas de arroz y de papas aliñás para acompañar a las cervezas. Después tomamos unas tortillitas de camarones, y boquerones en adobo fritos. Todo muy bueno, presentación perfecta. Terminamos con los postres: una tarta galleta lotus, y un flan de coco, muy buenos también. El detalle del chupito a nosotros nos gana. Vamos a preparar una lista de los poco y escasos restaurantes que mantienen esta tradición tan nuestra que se está perdiendo. La atención por parte de Diego muy profesional. Por supuesto, volveremos...