Esta única estrella tiene demasiada luz para este antro. Es evidente que no volverán a vernos. Llegamos dos personas, habiendo reservado antes. Pedimos tres platos. Tras veinte minutos trajeron el vino. Había unos 27 ° C en la terraza. Y el vino a la misma temperatura... A los 45 minutos mi amigo le hizo un comentario irónico preguntando a qué hora llegaría nuestra cena... eran las tres menos cuarto de la tarde cuando llegamos... No debió de pillarlo. ¿La comida? Pues la ensalada cualquiera que no haya cocinado la hará mejor y seguramente no tardará casi una hora en servirla . ¿El atún? Creo que aún están en alta mar para ver si lo pescan. No llegamos a conocerle. ¿Y la carne? Pues espero que sea tan fresca como el gerente de este garito, porque tan poco la vimos ni en fotografía. Y no es que el local estuviera abarrotado. Al final pedimos la cuenta de la ensalada y el vino y nos fuimos sin comer. Casi 15€ por no comer. Gracias a que mi amigo agotó su paciencia; si no seguramente seguiríamos allí desde hace tres días. Ni una disculpa por su parte. La mesa de al lado, con cuatro personas, también se marchó sin comer. Si me invitaran a comer allí, no podría aceptar. No quiero robarles su tiempo para que lo sigan empleando en lo que quiera que hagan. Miedo me da pensar cómo es esa cocina "por dentro". Deberían añadir otro símbolo para las reseñas. Esa estrella les sobra. Quizá, ⛔ Contestando a su comentario, siento decirle que no conozco ningún restaurante en el que el servicio sea tan nefasto como en su negocio. Lo de "servicio" es un eufemismo, el su caso. Parece que está molesto con mis comentarios y no con la atención que reciben sus usuarios en su local. Si a usted le parece normal que tuviéramos que irnos tras esperar más de una hora y que no llegara la comida, habiendo reservado, seguramente le va a ir muy bien en su "restaurante"... Al menos su comida no engorda. Muy indicada para quienes practican el ayuno. Yo no le he faltado al respeto y he sido bastante educado, teniendo en cuenta la cara dura que tienen, cobrando por no comer. Hoy no me pasaría lo mismo. Llamaría a la policía y les pediría que registraran una denuncia por cobrar un servicio no prestado. A la espera del primer plato, reciba mi enhorabuena, por seguir aún abierto al público. Lo siento por sus futuros clientes, eso sí.