Evidentemente, NO recomendaría este restaurante para una celebración, a pesar de que la comida estuvo bien. Había estado en dos ocasiones como invitado, y me pareció bien, pero desde el otro lado no resulta en absoluto aconsejable (las dos parejas que se casaron anteriormente tampoco acabaron nada contentos, lástima que nos enteramos tarde). Lo reservamos, abonamos los 600 €, y hasta ahí todo bien. Hicimos la prueba del menú (con los platos que el restaurante eligió con sus “platos estrella” y no nos gustó nada. Era un fin de semana y no había nadie más en el restaurante (¿por qué será?), así que se podían haber esmerado un poco más. Materias primas de baja calidad (rape y vieiras, camufladas con salsas), platos mal cocinados (tosta de bacalao con pimientos con bacalao totalmente seco,…). A partir de ahí, nos asustamos, e hicimos una segunda prueba sólo los novios, que fue mejor (aunque no del todo satisfactoria). Debimos sospechar algo cuando nos cruzamos allí con unos “amigos” del restaurante, y nos saludaron con un “Si os casáis aquí, no os separaréis jamás, con la hostia que os va a soltar Fabián con la factura”. Nos costó mucho elaborar el menú, porque las opciones eran limitadas, y tampoco nos daban muchas alternativas. Si queríamos cambiar un acompañamiento de un plato, nos decían que no combinaba más que con lo que ellos habían propuesto, que les asesoraba un restaurante navarro con estrella Michelín (parece que si no hay estrella, no se puede proponer una combinación adecuada, como si no nos fueran a cobrar por el plato). Nos insistieron hasta la extenuación con algunos platos (como el maracuyá de postre, nos lo propusieron al menos 10 veces, como si ya la primera no hubiéramos dejado claro que no lo queríamos). Según se acercaban las fechas, el tono de los correos del restaurante fue tornándose desagradable, cuando no maleducado. Ya unos días antes de la boda fuimos con la planificación de las mesas. Cuando reservamos nos dijeron que cabíamos 210 personas sin problemas. Resulta que éramos 159 – contando niños y bebés - y ¡no cabíamos! Tuvimos que cambiar algunas mesas y colocar mesas alargadas, para poder entrar. ¿Qué habría pasado de ser 190? Habríamos montado mesas alargadas tipo sidrería, supongo. Por fin llegó el día de la boda. Empezó bien, pero nos sentamos y vi que mis tías estaban al fondo, alejadas del resto de la familia, detrás de grupos de amigos, en otra ubicación de la dispuesta. Los centros de flores que habíamos encargado a la floristería estaban incompletos porque no dejaron a los floristas ponerlos (ya que no era la floristería con la que habitualmente trabajan). En algunas mesas no colocaron las narices de regalo (lo cual no pasa nada), pero al comentarles para que las pusieran (pues sobraban) nos respondieron que las habían puesto ya. La comida estuvo bien, hay que reconocer que fue correcta, a pesar del miedo totalmente fundado después de las pruebas. Llegó el momento de la barra libre. Habíamos convenido (venía incluso en contrato) que habría 3 botellas de Matusalén 15, que vale aproximadamente 24 € en el supermercado. Pues cuando fuimos a la barra libre nos dijeron que no había. Hablamos con el encargado, y me dio dentro del restaurante una botella en mano para que yo, el novio, la llevara a la barra. Otro detalle de calidad. De las otras dos botellas, ya ni pensarlo. Al día siguiente fuimos para recoger las cosas, lo hablamos con ellos y resultó muy desagradable. Todo fueron excusas absurdas y balones fuera, ninguna disculpa o asunción de culpa. Ciertamente, no merece la pena preparar un día tan bonito con gente tan poco...
Read moreHa sido nuestra primera y última vez. En cuanto a la comida, muy buena, nada malo que decir. Sin embargo, el servicio dejó mucho que desear. No sé cuántas veces tuvimos que pedir una botella de agua, ni cuántas veces tuvimos que rogar por un poco de pan. Estuvimos a punto de levantarnos para que nos atendieran de una vez por todas. Cuando finalmente nos trajeron el pan, eran solo los sobrantes, los curruscos, prometiendo que traerían más, lo cual nunca ocurrió.
Al tomar nuestra orden,pedimos gambas de Huelva, pero nos informaron que no había. ¿Entonces por qué están en la carta? Lo mismo ocurrió con el chuletón, que al solicitarlo nos dijeron que no, que era demasiado grande. Nada de lo que queríamos estaba disponible. Cansados de la falta de atención, decidimos no pedir postre, pagar y marcharnos.
Pero las sorpresas no terminaron ahí. Al salir, el dueño nos preguntó, con actitud altanera, si no nos había gustado la comida. Respondimos que sí, pero que debíamos irnos porque teníamos otras cosas que hacer. Sin embargo, el dueño insistió, en un tono desagradable, que si nos íbamos tan pronto era porque no nos había gustado. Había un niño presente y no quisimos discutir, pero de lo contrario, le habríamos expuesto nuestro descontento.
En definitiva, la comida es buena, pero se ve ensombrecida por el pobre servicio de los camareros y la actitud del dueño....
Read moreSituato appena fuori dal centro, il Restaurante Andere mi ha colpito per l’ambiente straordinario: colorato, ma elegante, rustico, ma al passo coi tempi e con un cortile coperto meraviglioso.
Il servizio è molto attento, discreto e veloce. Questo ristorante è stellato Michelin, eppure mi ha un attimo sorpreso il fatto che, in un sabato sera di luglio, ci fossero solo quattro tavoli da due coperti occupati, incluso il nostro. L’orario d’apertura era alle 21:30, ma sul sito indicava alle 21. Per un italiano trapiantato in Svizzera come me, la cosa è davvero insolita, ma penso che qui in Spagna sia del tutto normale.
In due abbiamo optato per un piatto a testa, più contorno. I piatti erano saporiti, impiantati in modo davvero creativo e professionale, il vino ordinato era eccellente.
Perché solo 4 stelle quindi? perché gli orari sul sito vanno aggiornati: 30 minuti di differenza fanno molto. perché il tonno scottato che ho mangiato era buono, particolare, ma secondo me estremamente salato. Sono le 9:49 del giorno seguente e lo sto ancora digerendo 😅 perché mi fa strano che un ristorante stellato Michelin abbia una così...
Read more