He ido a comer y cenar a este restaurante en numerosas ocasiones, pero esta última vez se me quitaron las ganas de volver. Había reservado para dos en la terraza y al llegar nos pusieron en una mesa diminuta, en mitad de la calle. Pedimos dos entrantes y dos pizzas y nos trajeron todo a la vez, aparte del agobio de comida en la mesa no cabía nada. Después pedimos postres y cafés, llegaron antes los cafés que los postres. La comida estaba buena, como siempre, pero el servicio pésimo (nuestro camarero fue muy atento en todo momento, lo mejor de la cena). El encargado riñendo en público al camarero porque nos había cambiado de mesa a una mayor, ante lo cual, nos cambiamos voluntariamente a la diminuta asignada desde el principio. Yo entiendo que quieran "hacer el agosto", "doblar lo triplicar turnos", después del año vivido, pero si es a costa del servicio y la comodidad de los clientes, al final les saldrá caro. Con las concesiones a las terrazas, estas han dejado de ser, en muchos casos, acogedoras y agradables y se han convertido en mesas en mitad de las calles, como es el caso, donde es incómodo comer y no se está nada a gusto. Te sirven a tal velocidad que comer se convirtió en un agobio ( nos sentamos a las 21:30h y a las 22:20h habíamos terminado) y encima en una mesa tan pequeña. Fue una experiencia mala y desde luego no creo que nosotros volvamos, pero espero que tomen nota para que los clientes tengan una experiencia más agradable y disfruten más de la comida, que está rica, la verdad. Hemos vuelto un año y medio después porque ha sido el único restaurante que no tenía todo completo cuando llamamos . El servicio nefasto, 3 horas allí metidos, con una atención pésima. Si no puedes atender bien, no abarques tanto. Con el foie fresco, el pan era de bolsa y encima nos lo pusieron en el mismo plato, empapado en salsa. Lo nunca visto. La pizza barbacoa sabía a limón... Una pena, ya que el restaurante en Sanabria funciona mejor en todos los sentidos y aquí podía ser igual, pero las chapuzas lo relegan a la última opción ( para...
Read moreComenzamos mal la cena, al llegar al local y tras haber realizado una reserva telefónicamente, nos indican que no hay sitio. Al parecer en la agenda si aparecía tal reserva pero nuestra mesa estaba ocupada por otras personas que una de las camareras había sentado allí. La responsable del local nos indica que no hay sitio, que nuestra mesa está ocupada. Por suerte, una de las reservas que había para más personas no había llegado, por lo que el camarero, al haber pasado una hora desde esa reserva, según él ya la habían perdido y nos sentó en esa mesa. La cena estaba buena, y en especial la pizza familiar Texana que pedimos, pero de nuevo surge un “problema” cuando nos sobra pizza y al pedirle a la camarera que nos las pusiera para llevar, como otros productos que sobraron, se lo lleva a cocina y nos trae la comida en dos bolsas de papel, “tipo de churros”, que nada más dárnosla ya venía empapada en grasa, la verdad que fue muy desagradable. Cuál fue nuestra sorpresa cuando, en el momento que salíamos del restaurante, vemos como a una de las mesas cercanas les sacan una CAJA de pizza con los restos de su cena. No quisimos más que abandonar el local puesto que era ya justo cuando salíamos, pero nos pareció un...
Read moreHe venido en grupo varias veces, las dos últimas la experiencia ha sido bastante mala y por eso he decidido dejar reseña, porque ya son dos. En la primera ocasión pedí solomillo y me pusieron pavo, eramos cinco en la mesa, lo probamos cuatro y todos estabamos de acuerdo en que eso era pavo. Cuando me quejé la camarera me dijo que era imposible porque no dan pavo, volví una segunda vez y me cambiaron el plato. Luego cuando llegó la cuenta pretendían cobrarme el "solomillo" y el otro plato que pedí, tuve que discutir con el cocinero que juraba que era imposible, no sé si el problema era del proveedor o de quien pero eso era pavo y me trataron de loca. Hay mucha diferencia, yo y las otras personas de la mesa sabemos diferenciar pavo de solomillo. Esta última vez hicimos una reserva y cuando llegamos le habían dado la mesa a otros porque apuntaron mal la hora. Nos sentaron en la terraza, no se aclaraban sobre si las cosas llevaban gluten o no porque cada camarera decía algo distinto, por teléfono dieron que había pan de hamburguesa sin gluten y luego no era así. Conclusión: la comida está bien pero todo es un caos y el servicio al cliente es...
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