BiraBola Restaurante — Restaurant in Zaragoza

Local en una avenida principal que llama mucho la atención con decoración cuidada y desenfadada (“muy instagrameable). Entrada amplia y que da acceso a un salón muy grande distribuido en “L” con distintas opciones de mesa en función del volumen del grupo de comensales.

La atención por parte de los camareros fue rápida y muy correcta, era un día entre semana donde no había mucho volumen de clientes para cenar. UN DETALLE MUY INTERESANTE, es que al tomarnos nota nos consultaron si alguno de los comensales tenía alguna intolerancia alimentaria. Y nos dieron recomendaciones en cuanto a la cantidad de comida que habíamos pedido, si era suficiente o no. Los tiempos de cocina estaban bien medidos. Comenzamos con platos más sencillos y en frío y fuimos evolucionando hacia platos calientes y de mayor tiempo de preparación.

Nuestras elecciones fueron para compartir entre las personas de la mesa. Picanha ultramadurada (16€) - Para mi gusto le faltaba algo de sabor a sus 45 días de maduración, pero la combinación con el queso patamulo y el AOVE junto a las tostas de pan con las que viene servido, es un buen plato. Croissant de carrilleras (6€/un, mínimo 2) - Se está convirtiendo en un plato recurrente de muchos restaurantes y en este caso pasa la prueba. La carne estaba bien cocinada, combinaba muy bien con el croissant y el toque fresco de la cebolla encurtida. Raviolis (13€) - El mejor plato de los probados. La cantidad era buena, el relleno de rabo de toro muy sabroso y la salsa de quesos y nueces sensacional, invitando a disfrutar cada bocado. Huevos Birabola (13€) - Huevos rotos con un giro distinto en sus patatas, que tampoco mejoraban el plato, más bien era un plato más y en cantidad casi se hace pequeño. Great ball dorada (7€) - Postre vistoso y diferente, que no defrauda en su relleno lleno de contrastes entre el frescor de la fruta, la densidad del brownie y el dulzor del dulce de leche. Tarta de queso (7€) - Muy sorprendente y no es la típica tarta de queso, ya que su sabor es más “salado” que dulce, debido al queso idiazabal ahumado que utilizan y le da ese sabor característico. Por lo que no es apta para todos los gustos. La textura destacaba por cremosidad en cada cucharada y no se sentía pesada, pero si con sabor intenso.

Como conclusión es un local vistoso, que invita a conocerlo, pero donde hay que saber ser un poco selectivo en las elecciones de los platos (por supuesto, la opinión es de lo probado). Repetiría para probar otras opciones. La calidad/precio está en la media de precio de la mayoría de los locales con ofertas similares, donde destacaría sus postres por encima de...

Empezaré diciendo que ha sido ha sido una buena experiencia y que me gustará volver a probar el arroz y la carne...los vi salir y me apetecieron. Sin embrago, y espero que les moleste, porque voy a ser contundente con ello, pero nada más entrar hay algo me molestó constantemente en la cena y que creo que se podría valorar cambiar. EL AMBIENTADOR. Es fortísimo. Es del que hay en ciertos bares. Os prometo que me fastidió toda la noche. En un restaurante, debería oler al propio restaurante y no a ambientador de bar o incluso, recuerda a uno que había en la tienda de ropa...(hasta mis hijas me lo dijeron). Respecto a la comida. -El brioche estaba rico pero el pan estaba algo seco. Imagino que será así como quieren sacarlo, pero creo que, precisamente, la gracia de un brioche es que sea esponjoso. -Las empanadillas. La Argentina sabía muy bien. Muy rica. La de pollo barbacoa, se lo dijimos a la camarera), una empanadilla de pollo barbacoa debe saber a pollo y a barbacoa... y os aseguro que no sabía más que a verduras. Poco pollo había dentro y el sabor, falto de carácter de bbq. -Pan Bao. Coincidimos los 4 en que el de ternasco es un ESPECTÁCULO , pero el de carrillera...es seco al gusto. Seguro que si más gente pide dos de cada uno para probarlas, les pasará lo mismo que a nosotros, y es que una vez que pruebas la de ternasco, el otro es seco al paladar. Creo que se podría aderezar con alguna salsa. -Tataki. Calidad del producto, BUENÍSIMO. Sin embargo (y he comido muchos) debería presentarse algo menos hecho. Estaba algo hecho para cómo se suele presentar... -Steak tratar. Lo había leído en las críticas. Os FELICITO. BRAVO!!!. Mucha calidad y un sabor y jugosidad como pocos he probado. La mayo de ajo negro, una delicia. UN SI O SI. -Tarta de queso. Se han puesto tan de moda que he probado muchas, muchas y tb las hago en casa. Debo decir que estaba rica, pero a mi mujer y a mi, nos pareció que podía estar mejor de sabor para llevar Idiazabal. No se si habréis probado la del Rest. Sofia... ahí sí que queda claro el sabor del idiazabal. Decoración nueva y algo kitsch... nos gustó. Servicio maravilloso... cuidadlo y mantenedlo, es oro...

Local del grupo laminero bastante grande y con muy buena decoración con diversos entrantes fríos y calientes y opciones tanto de arroces como de carnes y pescados Los precios son moderados-altos, las raciones por lo general no son muy grandes pero la calidad de los ingredientes es muy buena. En nuestro caso nos atendió Pedro que fue muy amable durante toda la cena, se le notaba la profesionalidad y todo el rato con una sonrisa sincera y preocupándose de que todo fuera bien. En nuestro caso optamos: -2 pan bao rellenos de ternasco de Aragón con salsa de oporto, pera y nueces caramelizadas (4,5€/unidad=9€): no son muy grandes, los sirven calientes y tiernos y tanto por textura como por sabor muy buenos, solo los puedes pedir o de ternasco o de carrillera, no se pueden mezclar. Por poner un pero, como el ternasco es más seco y no lo sirven con jugo, se queda un poco más seco una vez que das los primeros bocados, por lo que le pondría algo más de salsa en el interior o lo serviría con algo más de jugo -Arroz de carrilleras al vino tinto, pimientos de padrón y ali Oli de ajo negro (16€/persona=32€): raciones contundentes, sabor y ternura de las carrilleras muy buenos, se deshacía. Como único pero, estaba un poco salado por la combinación de ingredientes, le rebajaría un poco el punto de sal aunque de sabor espectacular -Tarta de queso Idiazabal (7€): con una base de galleta final con galleta por encima, la altura de la tarta mayor de lo habitual, tiene un interior con una textura que no se llega a ser semilíquida, nos hubiera gustado un poco más cremosa o con un centro más líquido. El sabor es muy equilibrado entre el queso y el dulzor, pero nos esperábamos que el queso idiazabal que es un queso potente con un sabor característico estuviera más presente En general, muy buena opción de cena, volveremos para probar el resto...