ÖSS Kaffe — Restaurant in Autonomous City of Buenos Aires

Desilusión Confirmada en el Pasillo de Öss

Mayo 2024: Volví a "Öss Kaffe" con la esperanza de una mejor experiencia. Sin embargo, mi visita solo reafirmó mis críticas anteriores. El café sigue siendo mediocre y los bocadillos, decepcionantes.Lo más revelador ha sido la respuesta del dueño, cuya reacción desmesurada ante la crítica refleja su narcisismo y baja autoestima. En lugar de ver la crítica como una oportunidad para mejorar, su snobismo y sensibilidad exacerbada lo llevan a atacar personalmente a sus críticos. Esto no solo daña su reputación, sino que también impide cualquier posibilidad de progreso en su establecimiento."Öss Kaffe" sigue siendo un ejemplo de cómo la pretensión y el narcisismo pueden sabotear una verdadera oportunidad de excelencia.

Desilusión en el estrecho pasillo de Öss

En el límite de Belgrano y Nuñez, un establecimiento intenta erigirse como faro de la cultura cafetera de Buenos Aires: el café "Öss Kaffe". Con pretensiones de vanguardismo y exclusividad, este local promete una experiencia culinaria y sensorial única. Sin embargo, mi visita a este angosto espacio, apenas más amplio que un vetusto vagón de la línea A, dejó al descubierto la fachada de un establecimiento que juega a ser más de lo que realmente ofrece.

El café, esa bebida que debería ser la estrella y razón de ser de Öss, se revela como una profunda decepción. Al degustar su espresso, se evidencia una extracción incorrecta, caracterizada por una temperatura inadecuada y un tiempo de extracción que roza lo descuidado, lo que resulta en una bebida amarga, con notas a quemado, que evidencia un descuido fundamental en el manejo de la molienda y la presión. La falta de cuerpo y crema en su espresso habla de un grano sobre tostado, posiblemente de calidad inferior, utilizado para esconder defectos bajo el manto de una "selección exclusiva".

Avanzando hacia los bocadillos, los famosos "cubanitos con dulce de leche" se presentan como una parodia de la gastronomía porteña, con un dulce de leche que no solo dista mucho de la cremosidad y riqueza característica de este tesoro nacional, sino que su calidad es tan pobre que recuerda a las versiones más económicas disponibles en cualquier supermercado. El precio, sin embargo, sugiere una delicia artesanal, lo que constituye un engaño casi insultante para el consumidor.

El brownie, lejos de ser esa experiencia indulgente de chocolate, se presenta seco y carente de la profundidad de sabor que caracteriza a un verdadero brownie casero. Su textura sugiere una elaboración previa, quizás almacenada más tiempo del recomendable, lo que resulta en un producto que desmerece el concepto mismo de repostería artesanal.

En cuanto al "Affogatto", la interacción entre el helado y el café debería ser una danza delicada de texturas y temperaturas contrastantes, pero en Öss, esta se convierte en un duelo desequilibrado donde el café amargo y quemado socava la dulzura y suavidad del helado, presumiblemente de origen industrial por su falta de cremosidad y sabor auténtico.

El local, con su espacio confinado, intenta proyectar un aire de intimidad y exclusividad, pero en realidad solo consigue evocar una sensación de claustrofobia, exacerbada por un servicio que parece tan estrecho en cortesía como el propio local en espacio.

En conclusión, Öss representa una oportunidad perdida en la cultura cafetera de Buenos Aires. Con pretensiones de vanguardia y exclusividad, falla en proporcionar la calidad, tanto en producto como en experiencia, que justifique su fama. Es una lección amarga sobre la importancia de la sustancia sobre la apariencia, recordándonos que, en el arte del café, como en la vida, lo fundamental es la autenticidad y la calidad, no...

Hands down the best coffee and coffee experience we have had in Argentina! The owner is very friendly and enthusiastic and clearly has a passion for coffee, and the knowledge and experience to back it up! We also tried the beet hummus bread and the smoked salmon bread which were delicious. Beyond that, the place also appeared to be a very community oriented spot, lots of friends stopping in for a quick flat white on their way by. It makes for a very comfortable atmosphere. If you love coffee or want to learn about it and have a truly great coffee experience I highly recommend you to put Oss at the top...

Excelente lugar para pedirse un café y sentarse en la vereda. Hace mucho tiempo que tenia ganas de conocer este lugar y me encanto. Fui un Domingo a las 4:30 de la tarde y había bastante fila, pensé que tenia para rato y la verdad quede impresionada con la rapidez en la que atendían. El señor que atiende es super atento y amable. Apenas les decís la bebida que queres ya la están preparando, en menos de 1 minuto ya teníamos nuestros cafés en la mano. En este caso nos pedimos 1 latte ($250) y un macaccino almond ($350). Muy ricas ambas bebidas. El macaccino era super suave y se sentía perfectamente el chocolate y la almendra. Lo único que no estaba tan caliente como esperábamos pero estaba para tomar en el momento. Para comer no teníamos pensado pedir nada pero nos llamaron mucho la atención los budines. Pedimos 1 porción de budín de limón ($300) y 1 porción de budín de banana ($200). Los dos estaban muy ricos, pero el budín de banana estaba MUY bueno, la verdad que nunca comí un budín de banana tan rico. Estaba super esponjoso y tenia la cantidad justa de chocolate. Sin dudas lo mejor de la tarde. Cuenta con el sistema Take Away (al menos así es ahora, no se si será por la pandemia) Mucha gente va con la bici, estacionan, y se siente a tomar algo sobra la vereda. Cuenta como con dos mesitas sobre la calle para tomar algo parado si lo deseas. La verdad que me encantó y sin dudas volvería a probar algún café frio porque vi que tenían alta pinta. Super recomendable. Abajo adjunto foto del menú con los precios de...