Restaurante Palote — Restaurant in Buenos Aires

El plan era simple: ir al centerplay, estar una horita y media, dos, y terminar en palote. Arrancamos los autos y salimos de la casa, con la moral altísima. Lo primero que nos llamó la atención fueron las luces titilantes en la entrada del centro de la ciudad. Parecía una sinfonía muda, un show espectacular. Nos reímos, "qué bárbaro, qué cosa". Después de estacionar y hacer un par de compras, nos tomamos el atrevimiento de ir a una atracción similar al samba (tazas voladoras, o naves, mejor dicho). Al terminar con ese desvío, nos dirigimos hacia el Centerplay. Dani compró algunas fichas y nos dispusimos a jugar. Arrancaron el Rubio y Agustín con el clásico del Parque Jurásico. Los demás vitoreábamos con vigor desde afuera. Mientras, Chamu estaba apartado, generando contenido liminal. Ahora, lo del contenido liminal es un tema aparte, muy complejo de explicar en este escueto espacio de reseña en el que me encuentro. Pero, básicamente, Chamu está obsesionado con generar cierta estética en fotos y subirla a las redes. Es casi algo mágico. En eso estaba Chamu, cuando nos acercamos a él, después del Parque Jurásico. Nos reíamos, y en eso estaba el grupo. Hasta que todo se volvió negro. Apagón total. Oscuridad. Prendimos las linternas casi instantáneamente. El ruido blanco de fondo de las voces de quienes estaban, segundos atrás, alegremente jugando en el Centerplay, se tornó en alaridos, llantos, voces al grito de "¡devuelvan la guita!". Ni nos miramos. Todos supimos qué hacer. Nos dispusimos a generar más contenido liminal del que jamás podrían imaginar. Los flashes, al igual que las luces del centro, se convirtieron en un show visual. No parábamos. Correteábamos de allá para acá. Subíamos, bajábamos escaleras. Tuvieron que echarnos. Fotos acá no, dijo el dueño. Pero ya teníamos todo lo que necesitábamos. Al salir, no podíamos creer lo que acababa de pasar. ¿Un apagón? ¿Acá, ahora? ¿Justo cuando más lo necesitábamos? Los planes originales se arruinaron en pos de concretar otros, unos nuevos y mejorados planes: generar contenido liminal a más no poder. Triunfantes, encaramos hacia Palote, silbando bajito, o más bien fuerte, muy fuerte, con júbilo, victoriosos, embriagados y muy, muy, muy liminales. Ah, comimos una pizza...

Great place for a quick meal. Pizza & pasta are recommended specialties here. Waiters are polite and pay detailed attention. We had really nice dinners here and we'll keep coming when we are around.

It is still an amazing place, and still checks properly following covid regulations, respectful and clean staff, air flow and vaccination check for...

En 2019 visite el lugar y me pareció excelente, de lo mejor de Pinamar. Quedé muy satisfecha con todo, y las pastas me encantaron. Este verano volví a ir con muchas ganas de repetir esa experiencia pero me llevé una decepción y me veo obligada a cambiar mi puntuaje respecto el año pasado. Tardaron mucho en atendernos, el pan parecía viejo. Luego tardaron en tomarnos el pedido. La verdad mi plato no estaba como esperé, me trajeron la comida casi fría y no tenía un sabor rico como el que esperaba volver a repetir, al punto que no pude terminar de comerlo. La masa del canelón estaba quemada y la salsa sin gusto. La verdad una lastima porque realmente esperaba volver a ese lugar pero me decepciono todo esa noche que ahora no...