Casa Martiniana — Restaurant in Guanajuato

Desde nuestra llegada al establecimiento, lamentablemente la experiencia fue decepcionante. Cabe mencionar que el estacionamiento se encontraba prácticamente vacío y la distancia desde la entrada era muy corta, por lo que resultaba más práctico estacionarnos directamente que entregar las llaves al valet. Al optar por hacerlo por nuestra cuenta, el personal mostró evidente molestia y, en respuesta, nos indicó que no podíamos utilizar ninguno de los cajones disponibles, ya que estaban “reservados para la dueña del restaurante”, y nos pidió estacionarnos fuera del restaurante, en la parte trasera que da hacia una calle empedrada.

Aunque la fachada del lugar resulta agradable, tanto el servicio como la calidad de los alimentos dejaron mucho que desear. El mesero mostró una total falta de atención durante toda la visita. Uno de los platillos tenía una salsa con un sabor inusualmente agrio, y el jugo verde presentaba un sabor desagradable, como si algún ingrediente estuviera en mal estado.

Al finalizar los alimentos, esperamos un tiempo considerable para solicitar la cuenta, pero al no aparecer el mesero, tuvimos que levantarnos personalmente para pedirla. Incluso en ese momento, la espera fue prolongada.

Al retirarnos, el valet nuevamente mostró falta de disposición con mis acompañantes, limitándose a entregarnos las llaves sin acercar el vehículo, a pesar de que es parte del servicio ofrecido. Para algunos de los acompañantes, la comida ocasionó molestias estomacales, y durante nuestra estancia notamos la presencia de insectos muertos sobre la mesa, lo cual resulta preocupante.

Por los precios que maneja el lugar, se esperaría un nivel mucho más alto de atención,...

Reseña de desayuno

Me encantó la ubicación, las instalaciones y el ambiente, la recepción es buena, cuenta con valet parking.

La variedad de pan es bastante buena, y el sabor también. Las porción de huevos era demasiado pequeña (adjunto video), deben estandarizar las raciones. Nos cobraron un café americano de más (revisen su cuenta antes de pagar).

La atención es buena, pero el sabor de los platillos es promedio, incluso peor que almuerzos del moral, creo que deben revisar el sabor y sazón de algunos alimentos (en equilibrio de sal sobre todo), sobre todo de los frijoles.

La temperatura de los alimentos no es la adecuada, cuando llega a la mesa ya está bastante fría, tiempo de espera de los platillos promedio.

Recomiendo ampliamente revisar la oferta de platillos (que realmente sea un diferencial entre los conceptos de almuerzos del moral y panoteca), las porciones, el sazón de alimentos, registro de comandas, temperatura (rapidez del emplatado y traslado a comedor). Si no revisan estos parámetros, no lograrán hacer un diferencial en su proyecto y oferta gastronómica...

Hemos ido un par de veces y tiene muy buenas cosas por resaltar.

La comida es de calidad y tiene un toque casero sin perder el toque de un restaurante. El plato con cecina fue muy bueno ya que estaba frita en su punto y su espesor. El pan y el café son buenos. También pedimos un plato de chilaquiles con carnitas pero aquí si tengo qué decir que las carnitas necesitaban un mejor sazón, aunque no estaban mal pero necesitan un toque más a ese sabor del caso tradicional. Lo que les acompaña es excelente y hacen tortilla a mano 👌.

El personal es muy atento y amable, es de esos lugares donde la propina la dejas con gusto ya que siempre te atienden con cortesía.

El lugar es simplemente muy agradable, ordenado y limpio. Además tienen un área para niños qué esta al alcance de tu vista por si tienes niños

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