Monas Fun & Food Narvarte — Restaurant in Mexico City

Fuimos a conocer y probar un lugar pensado para niños. Nos encontramos con un lugar sucio y pensado más en hacer dinero, como prioridad. Nuestros niños de 2.9 y 1.5 años entraron felices. Y cuando la de 1.5 se subió un poquito más arriba de los juegos, su mamá se metió rápido para únicamente bajarla -ojo no para quedarse trepada en los juegos- saltó una chica para exigirle que se bajara, que ella no se podía subir. Al argumentar que únicamente subió a bajar a la niña y que de inmediato se bajaba también, la chica le insistió tajante que no. Cuando preguntamos entonces cómo hacer para bajar a la niña, respondió: yo la puedo bajar. Cobramos $100 pesos más propina, por cuidar a los niños. Nosotras dijimos no queremos que los cuides, nosotras venimos a estar con ellos, ella insistió que no, que había que pagar. El gerente vino a bajar a mi amiga nuevamente y se mostraron no solo cerrados e inflexibles, sino CERO empàticos y sin criterio, sobre la situación. Se entiende que no es para los papás y no era nuestra intención estar arriba de los juegos, pero era una excepción por emergencia y querían cobrarnos por ir por la niña. Nos hicieron pasar un rato muy desagradable, como la comida. Los chilaquiles horribles (tiras de tortilla) insípidos. El piso todo pegajoso, quién sabe cuándo fue la última vez que limpiaron, igual los baños, asquerosos. El área de bebés de 2-3 años una insignificante alberca de pelotas de 1x1. Ridículo. Y el resto de las chicas que “cuidan” a los niños por 100 pesos, bastante desangeladas para tratar con niños. Así que, es una propuesta que no vale la pena. Todo el servicio con chavitos desganados y que no tienen idea del servicio al cliente. Y un lugar más interesado en cobrar y exigir propinas además de todo, por un servicio que no todos los papás queremos pagar, porque sí nos gusta estar con nuestros hijos. Pésima experiencia, servicio y...

Un gran lugar para ir con niños!!!

El área de juegos es enorme (de hecho es un espacio de planta baja y primer piso y la mitad de la planta baja y tooodo el primer piso están destinados a los pequeños!) Tienen albercas (en plural) de pelotas, resbaladillas, juegos de equilibrio, un “super mercadito”, cocinita, área para manualidades (con costo extra) y hasta una sala de “cine” con asientos que asemejan los de un cine real. Realmente increíble!!! La comida es bastante decente, muy buen sazón, solo le puse 4 estrellas porque mi carne estaba un poco seca, pero salvo eso, todo estaba muy bueno. El súper plus es que tienen nanitas, que te permiten disfrutar tu comida, una conversación con amigos o con tu pareja, mientras los peques están cuidados por una nanita que los sigue paso a paso!! O sea, literalmente están atrás de tus hijos para que estén seguros. Hay “cover” para los peques ($100 pesos por peque para poder entrar a los juegos) y las nanitas también te cobran $100 pesos por niño(a); sí aumenta el costo, pero la verdad lo vale absolutamente!!! Hay un estacionamiento justo al lado, pero desafortunadamente no está incluido ni tienen acuerdo alguno ($27 pesos por hora), así que ese es otro gasto a considerar. Finalmente (para que hagas cuentas) gastamos $2,400 por 1 bebé de 11 meses, una peque de casi 3 años y 3 adultos , sin bebidas alcohólicas (uno comió solamente una ensalada cesar y un par de vasos de agua y para mis hijos pedimos un caldo de pollo y un paquete de comida con pizza individual...

Se nota que en este lugar jamás se tomaron la tarea (o si lo hicieron les vale) sobre estudio de mercado o psicología enfocada al tipo de público. Ya que desde la música. El personal. La atención etc hace que te desesperes y quieras salir corriendo. No se si sea el gerente el de la entrada pero su apariencia me recordó a las personas que te quieren llevar a los antros en Acapulco. El personal súper distraído y hechos bolas. Es un verdadero desorden no traen lo que pides, te traen órdenes de otras mesas. Por cierto las mesas bailan y todo se cae. Siento que el ambiente debería ser más tranquilo tanto para los niños como para los padres para no tener ganas de salir corriendo y estar atentos a las mesas que van llegando y no dejar a la gente esperando mucho tiempo a que lleguen mucho después a dejar una sola carta para 8 personas. El servicio deja mucho que desear aunque es lógico por la clara desorganización del lugar. Nos piden 3 veces la orden de las bebidas y hasta después de mil las traen e incompletas. En cuanto a la comida la verdad está muy buena. Las y los manitos cuidan muy bien a los niños y hacen amistad con ellos Este lugar dándole una buena capacitación al gerente para que sepa acomodar y exigir a su gente tendría mejores ganancias. Se ve que le pone ganas pero si le hace falta organización. Perdón fue en monas & fun Interlomas me puso...