Raviolo — Restaurant in Mexico City

En el rincón de una de las calles aledañas al centro de Tlalpan se encuentra este lugar de corte casual, íntimo y relajado. Su menú está basado principalmente en la cocina italiana como pastas de diferentes presentaciones y pizza. Tienen un número discreto de opciones de vinos, aunque también hay otras bebidas como cerveza. En cuanto a la comida las porciones son regulares (ni poco ni excesivo), pudiera cuestionarse la cantidad de ingredientes (por ejemplo la pasta de la persona con la que fui, tenía muy poco jamón aunque era uno de los ingredientes principales de su platillo). La sazón es buena sin llegar a ser destacada. El servicio es bueno y las instalaciones, así como la limpieza tienen el nivel suficiente de calidad para pasar un rato agradable. El motivo por el cual bajé una estrella es porque tienen poco o mejor dicho nulo control sobre los vendedores que entran a vender un sinfín de artículos. En la hora y media que estuve, entraron tres cantantes, un vendedor de obleas y una vendedora de galletas... si bien no es grave, rompe con la atmósfera íntima que...

He frecuentado el lugar desde hace 6 años y me parecía increíble, comida deliciosa a precios muy accesibles (de 5 estrellas), pero esta última vez no fue como siempre (a lo mucho 2 estrellas), tuve que entrar hasta el área de caja/cocina a pedir que alguien me atendiera, porque llevaba más de 10 minutos sentada y nadie se había percatado, la comida fue buena, mi acompañante pidió una cerveza con limón y era de ese limón de jarabe que sabía terrible. Como postre decidimos pedir un café… yo quería un capuchino tradicional, el cual pedí con leche deslactosada y me dijeron que solo manejan entera, por lo que termine por no pedirlo; mi pareja pidió un capuchino de sabor que resulta que de sus 3 sabores que tienen en la carta, solo contaban con cajeta. En fin… espero que esta haya sido una experiencia aislada y ojalá sirvan mis comentarios para que no dejen caer el buen...

Después de algunos meses, regresé para darle otra oportunidad (la visita anterior no fue agradable) Debo decir que no estaba en mis planes, porque mi primera opción (Dolce Amore) estaba ocupado y ya hacía hambre. Servicio: no estuvo mal, pero es esencial dar el saludo a los comensales; aquí eso no sucede, tal como la ocasión anterior. El mesero se limita a preguntar si ya vas a ordenar. Alimentos: pedí spagueti a la boloñesa, y el sabor es común y corriente, nada del otro mundo. El precio no es alto, pero se esperaría un sabor de más calidad, sobre todo si se vende como restaurante italiano. En otros lugares, en la mesa colocan balsámico y aceite de oliva, y hasta mantequilla, para que pruebes el pan, previo a que te lleven los alimentos. Eso tampoco aplica aquí. Casi ya al terminar me llevaron una especie de palitos de pan,...