Restaurante Montmartre en Coyoacán — Restaurant in Mexico City

Llegamos a las 9:30 a desayunar. Eramos tres y la mesa que elegimos es la del centro por lo que los meseros nos pasaban por atrás todo el tiempo y también los clientes que llegaban. Muy molesto. Nuestro mesero nos negó sentarnos en una mesa al lado argumentando que era para cuatro personas. Nos mandó al área de clientela con perros y la vista era verse rascar a un perro (las pulgas?) Nos regresamos al área principal. Los desayunos tardaron más de la cuenta y los llevaron tibios. Te cobran $25 adicionales si pides tortillas para los huevos revueltos. A estos les dejaron una tortilla aguada debajo. Tuvimos que insistir en que nos trajeran el pan dulce porque los meseros no hacen caso. Aunque como cliente le notifiquemos a la recepcionista todas las faltas de atención y mal servicio le importa un reverendo cacahuate. El propietario justifica la mala atención y servicio. Es la primera vez que después de hacer una queja a un negocio respondan justifiáncdosáe! Qué...

Mi familia tuvo el placer de comer en Montmartre Coyoacan, como empresarios y propietarios de diversos Restaurantes catalogamos este lugar como uno de los mejores de Mexico. a lo largo de nuestros viajes en Dubai y el mundo probamos Tikkamasala Chicken y fue único al igual que nos hizo recordar esta ves que Chef Alex Gonzalez nos sorprendio con lo mas exquisito de este mismo platillo, compartios pulpo a la parrilla con esa salsa huncaina y sus brotes ejemplares frescos el sabor único ahumado del pulpo, y la sopa de nuez con calabaza sin palabras. sus postres con oro comestible lo cual hizo un cierre espectacular, que orgullo tener un Chef de este nivel. degustamos un poco de todo, felicidades a los dueños de este magnífico Restaurante, me gustaria provar algun caviar o foie gras con el toque del Chef Alex acompañado de un Champagne sin faltar mis amigos y familiares exitos miles y Bendiciones...

Mi esposa lo escogió porque era un lugar donde solía ir con su abuela, y por un buen recuerdo del pan que hornean. Ella pidió un rollo de nuez y yo un croissant, ambos con la masa poco trabajada, apelmazada y sin sabor. Siguieron unos sopes para compartir y chilaquiles para ella y huevos a la veracruzana yo. Los sopes los prepararon con lechuga escarola en exceso en lugar de usar lechuga iceberg, lo que es un inadmisible para cualquier antojito mexicano bien preparado. El huevo que rellenaba las tortillas de los veracruzanos preparados como tortilla en lugar de revueltos, y coronados con unas finas rajas de jalapeños picosísimas, tanto que casi hacen incomible el platillo. Los chilaquiles de ella bien a secas. Y el café tibio e insípido. Fue una mala...