Manos Piuranas (sucursal de los Incas) — Restaurant in La Victoria

Es mi primera visita y es muy probable que sea la última.

Hoy visite Manos Piuranas que se encuentra en la avenida Chinchaisuyo, no había almorzado y realmente se me antojo cerdo y cordero al palo, tenía muchas ganas de probarlo, pedí un Mixto para dos personas de 55 soles y realmente me lleve tremenda desagradable sorpresa, terrible, un plato lleno de papas, camotes y platanos sanchochados ( ESTOS ULTIMOS NI SIQUIERA ESTABAN SUFICIENTEMENTE MADUROS) y 4 miserables trozos de carne, pequeños de puro hueso, llenos de aceite , sobrecocidos, la carne dura , y realmente miserables porciones para ser un plato que lo venden para dos personas, sentí vergüenza haber llevaro a alguien a comer en este lugar. Pésima experiencia, realmente irrisorio lo minúsculo de sus porciones de carne, considerando que dos de ellas eran costillas puras sin carne, solo un pellejo duro, y lo peor aún es que salado. Tuve que ir a otro lugar, para comer enserio.

Si desean solo probar un par de bocados de está bien, pero para comer agradable y razonable NO

NO...

Restaurante de comida piurana cerca de la avenida Santa Victoria y el paseo Yortuque. Amplio en Chiclayo. Limpio y de rápida atención. La comida es sabrosa y el jugo se maracuyá es una delicia :) También hay chicha morada y gaseosas. RICAS Humitas a 2×7 soles con su buena sarza, papa a la huancaína, chancho al palo, carnero al palo, parrillas y comida criolla para elegir.. etc. Recomiendo este lugar, es acogedor y tranquilo para pasar un agradable almuerzo en compañía de tu familia, amigos o pareja. Cuenta con dos televisores grandes donde puedes entretenerte también mientras disfrutas de tu sabrosa comida. Anímate...

Es un lugar no tan pequeño. De fácil acceso y ubicación, pero no tiene estacionamiento, lo que hace algo complicado ir con movilidad. Los platillos tienen un buen tamaño y agradable sabor. Pueden ir solos, en pareja, en grupo con amigos o en familia con niños. Se puede pagar con tarjeta de Débito o crédito. Y los precios...