Restaurante La Pista — Restaurant in Arnedillo

Comimos yo y mi mujer el menú de fin de semana de 29 euros. El menú delicioso y buena relación calidad precio. Producto excelente. Si pongo una sola estrella en la atención es para dar un tirón de orejas al camarero que nos atendió. No sé comó se llama, era el que llevaba la voz cantante, alto, moreno, simpático y de mucho carácter y jocoso, aunque estaba nervioso por que la terraza estaba llena y quería atender correctamente.

La cuestión es que todo se torció cuando al traernos la cuenta le pedimos que por favor la rectificase y nos aplicara el descuento nos aplicó el descuento de estar alojados en "Las Pedrolas", cuyo gerente es Javi, el mismo que el restaurante. Esto le contrario de tal manera que desde ese momento perdió las formas con nosotros y con ironía y agresividad ironizaba a viva voz sobre que si no estaba para perder el tiempo, que si se iba a romper la caja registradora, etc etc. bajo la estupefacta mirada de las mesas de alrededor. Cuando por fín trajo la nueva cuenta prácticamente me la arrojó a la cara balbuceando improperios ininteligibles y en ningún momento se disculpó. Entiendo la situación, por supuesto, había estrés y muchas mesas que atender, pero bajo ningún concepto se puede tratar así a ningún cliente, y menos sin pedir disculpas. Lo que le pedimos entraba perfectamente en el cumplimiento de sus funciones. Una mancha que deslució la última parte de la experiencia de la comida, que, repito, fué deliciosa y recomiendo desde aquí.

Gracias Javi por ese trabajo que se nota que lo haces con...

Sinceramente no me parece ningún restaurante del otro mundo. Cuando llegamos estaba lleno y pedimos menú para un grupo grande de gente. El caldo era un vasito pequeño de chato de vino con un poco de caldo que bien podía ser el agua de fregar (aquello nos sabía a nada), después una ensalada con queso de cabra (una rodaja de un rulo de queso de cabra para compartir junto con un picatoste de pan enorme y empapado en aceite), unos gambones sosos y poco echos que tenían de todo menos calidad, unas croquetas bastante buenas y unos chuletones que llegaron a la mesa mal, tarde y templados en vez de calientes. En cuanto al tema de la limpieza dejaba que desear pero especialmente en el baño de mujeres que salieron dos de nuestro grupo corriendo con ganas de vomitar (un fallo de limpieza del local y alguna clienta bastante sucia). En los postres más de lo mismo: desilusión y más desilusión a causa de una tarta de queso que no sabía ni a queso ni a nada donde habían usado una crema que compartía con otros postres como la mousse de chocolate. A la hora de pagar ya nos cansamos de esperar y tuvimos que ir nosotros a la barra a pagar. En cuanto al servicio de camareros bastante pésimo por parte de todos incluido el dueño o encargado. Uno de ellos se llegó a molestar por pedirle un plato caliente para poder calentar los trozos de carne de los chuletones. Se salva del servicio un chiquito joven que fue super amable y servicial en todo momento que nos atendió en la mesa nuestra. La verdad que no me esperaba esta...

Paré hace tres días para comer, había gente pero unas cuantas mesas vacías. Eran las 14,45h. Pregunté al sr que estaba en cocina/parrilla si podía quedarme. Me dijo que sí porque servían comidas hasta las 15,30h. Me puse a esperar que alguien me llevara a una mesa. Ni caso. Pregunto a uno que pasa por mi lado varias veces sin mirarme a la cara. Resultó ser el dueño. Me contesta que "NO, YA VES CÓMO ESTAMOS". Una pareja sentada que lo oyó me dijo que se iban enseguida y me dejaban la mesa. Otra sra con su pareja me dijeron lo mismo, que se iban en breve y me dejaban su mesa. Vuelvo a preguntar a un camarero. Me dice que sí puedo porque hay mesas vacías. Vuelvo a preguntar al tal dueño, me vuelve a decir que no en un par o tres más de ocasiones porque si no comía allí ya no me daba tiempo a ir o buscar otro sitio pues me iba de viaje. Yo esperaba que se "apiadase" de mi. Antipático, desagradable, nada dispuesto. No sé cómo será la comida, pero el dueño fue conmigo un impresentable, odioso y vagazo. Recomiendo en su lugar el Restaurante Parras, donde aparte de que la comida es deliciosa y el precio estupendo, el servicio y los dueños es estupendo igualmente. No pude ir porque para cuando podía haber vuelto ya habrían cerrado el restaurante y además que me iba de viaje. Ésta ha sido mi...