La Nicoletta — Restaurant in Arroyo de la Encomienda

La comida, en general, no estaba mal. Pedimos risotto de setas y estaba muy bueno, el pan de ajo muy rico, y los menús infantiles correctos, pero de las opciones de postre (fruta, yogur y helado) solo pudimos escoger helado, ya que no había ni yogur, ni fruta). También pedimos un plato de saquitos de pasta pera con salsa de gambas y cuando nos lo trajeron a la mesa, eran raviolis (no se nos avisó de que no había saquitos y decidieron traer lo que tenían a mano). Eso es pasable, en un lugar con 300 personas comiendo en 4 horas, es hasta entendible. Teníamos reserva a las 14:00, llegamos a menos a las 13:50 y nos metieron a las 14:15, (también entendible con tanta gente). Comimos y el camarero de los ojos claros nos atendió estupendamente. El mayor problema vino cuando pedimos los cafés, después de 45 minutos de espera y de pedirlos 3 veces a 3 camareros distintos, no llegamos a recibir esos cafés. Cuando pedimos la cuenta mostrando nuestro descontento y pidiendo la hoja de reclamaciones (la cual al final decidimos no usar) una camarera, la cual supusimos que era la encargada por la forma de hablar y por que es la que nos cobró la cuenta, se acercó a pedir disculpas, pero unas disculpas muy poco correctas, puesto que utilizó varias veces las palabras “os pido disculpas” pero con continuas excusas “muy baratas” echando la culpa a los compañeros por que eran nuevos, por que había mucha gente, por que …. Excusas baratas por no reconocer que tenían una mala organización y falta de personal, ya que a mi parecer (con experiencia en hostelería) un sitio como es este restaurante, con la ubicación que tiene, y un día festivo como era hoy (día 7 de diciembre en mitad del puente de Diciembre), no estaba correctamente preparado. Aún así, agradecer al camarero de los ojos claros, el buen servicio que nos dio durante la comida. (Puesto que él dio aviso de que estábamos esperando los cafés, aunque no se le...

Visitar Niccoletta Río Shopping siempre es una apuesta segura, pero la comida de hoy ha superado todas las expectativas. Desde el primer bocado hasta el último detalle del postre, la experiencia ha sido un auténtico homenaje a la cocina italiana más tradicional, con un toque contemporáneo que eleva cada plato.

Comenzamos con un pan de forno recién hecho, de corteza dorada y textura ligera, perfecto para abrir el apetito y acompañar los primeros aromas que llegaban de la cocina.

A continuación, degustamos dos platos principales que reflejan el alma de la gastronomía italiana:

Unos macarrones a la carbonara elaborados al más puro estilo italiano, con una salsa cremosa y equilibrada, sin excesos, donde el sabor del guanciale y el queso pecorino se combinan a la perfección.

Y unos espaguetis a la carbonara servidos dentro de un queso redondo, una presentación espectacular que realza la intensidad del sabor y convierte el plato en toda una experiencia visual y sensorial.

El punto de cocción de la pasta fue impecable —al dente, como debe ser— y la cremosidad de las salsas dejaba claro el mimo y la técnica del equipo de cocina.

Para culminar, los postres fueron el broche de oro de una velada perfecta:

Una tarta de queso suave, con textura aterciopelada y un equilibrio justo entre dulzura y frescura.

Y un tiramisú que sencillamente estaba de vicio, con capas ligeras y un café perfectamente integrado, digno de los mejores locales italianos.

El ambiente del restaurante, acogedor y moderno, junto con un servicio atento y profesional, hicieron que la experiencia fuera redonda de principio a fin.

Sin duda, Niccoletta Río Shopping se consolida como uno de los referentes gastronómicos de la zona, ideal tanto para una comida informal como para disfrutar de una velada especial. Una experiencia culinaria que invita a...

El sitio en sí está muy bien y el trato fue agradable y amable. Sin embargo, tardaron muchísimo en atendernos; no exagero cuando digo que entre que acabamos de cenar y nos tomaron nota del postre pasaron 45 minutos (y tuvimos que ir a pedir que nos atendieran...)

En cuanto a la comida: yo soy celíaca. En la carta normal no aparecen señalados los platos aptos, pero cuando lo comuniqué me trajeron una carta con las opciones sin gluten las cuales era una lasaña y tres pizzas. Todas ellas precocinadas y congeladas. También me comunicaron que los tres risottos que tienen en carta eran aptos para celíacos por lo que me decanté por el "risotto tartufo e porcini" (porque para comer algo precocinado ya lo puedo hacer en casa...) He de decir que la ración del risotto era generosa y dentro de lo que cabe no estaba mal, aunque los he comido mucho mejores. Tenían opción de pan sin gluten y este sí me sorprendió gratamente, estaba muy rico. En la carta sin gluten no figuraba ningún postre, pero pregunté y me comunicaron que tenían coulant sin gluten. Menuda decepción, de coulant nada. Me pusieron un bizcocho con textura gomosa, de sabor dejaba muchísimo que desear, el chocolate derretido del interior era inexistente y no fueron capaces de acompañarlo ni con un poco de nata ni nada (cuando el coulant con gluten lo sirven acompañado de sirope y helado).

En fin, tengo sentimientos encontrados. Es cierto que en cuanto al control del tema de la celiaquía estaba bastante bien, pero las opciones son muy reducidas y dejaron mucho que desear... Cuando los celíacos salimos a comer fuera también queremos disfrutar de la experiencia y que como opciones solo haya comida precocinada y congelada... Se agradece que existan opciones, pero creo que no es tan difícil currárselo un poco y ofrecer...