Bar La Diligencia — Restaurant in Conil de la Frontera

He comido bien en este local, la comida estaba correcta y el ambiente agradable, pero la experiencia como cliente dejó mucho que desear por dos aspectos fundamentales:

1️⃣ Restricción de acceso a la mesa No me permitieron sentarme con mi grupo hasta que no estuviera presente la totalidad de los comensales. Esta práctica, más allá de poder justificarse por organización interna, resulta una limitación injustificada al consumidor. El artículo 47 de la Ley de Consumidores establece que las prácticas comerciales no deben suponer “trabas o inconvenientes desproporcionados al consumidor” en el acceso al servicio. El cliente tiene derecho a ocupar la mesa reservada o libre, siempre que exista disponibilidad, sin que se le imponga una condición que no responde a una causa objetiva ni está informada previamente.

2️⃣ Negativa a servir un vaso de agua en mesa. Tampoco me sirvieron un simple vaso de agua en la mesa, tuve que levantarme a la barra para ello porque la respuesta que me dieron fue "que el camarero no está aquí para poner 1 vaso de agua" después de pedir 3 tapas y una ración con bebidas. Conviene recordar que el artículo 18 de la Ley 7/2022, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, obliga a los establecimientos de hostelería a ofrecer de manera gratuita agua del grifo apta para el consumo humano para reducir el uso de envases de un solo uso. Negarse a ello en mesa no solo perjudica al consumidor, sino que incumple una obligación legal vigente en todo el territorio nacional.

Conclusión Aunque la comida fue buena, la atención hacia los derechos básicos del consumidor dejó bastante que desear. Un buen servicio no solo se mide en la cocina, sino en el respeto a la normativa que protege a los clientes. Cumplir con la ley no debería ser opcional, sino parte esencial de la...

Llevo años siendo clienta fija y asidua de este establecimiento hasta hoy. Llegamos a las 14h dos personas y cogimos número como siempre. Eli, la nueva encargada de asignar las mesas , nos preguntó que cuantos eramos y le dijimos que eramos 4. Esperabamos a dos familiares, nos dijo que hasta que no estuvieran todos no nos podiamos sentar, norma que pone el local con motivo del Covid. Lo cual me parece una injusticia y no tiene ningun tipo de relacion con las medidas anticovid, se trata de una politica para rentabilizar las mesas. Nosotros ibamos a pedir la bebida y comida de los 4 puesto que ya nos sabemos la carta y asi hemos hecho siempre. Cuando nos tocaba sentarnos segun el número que teniamos, el 61, dejo el contador parado asignado mesas hasta la numero 74 en lugar de darnos mesa sentó a 13 mesas delante nuestra. Esto no hay derecho, la atención fue pésima. Mi suegra es diabetica y alli nos tuvo mas de una hora teniendo que esperar a que llegaran las otras 2 personas de mi familia. Yo indignada me senté en una mesa ya limpia y me hizo levantarme de la mesa diciendo que la mesa se la daba a un grupo de 7 personas que acababa de llegar ... tras esto llegaron los 2 que nos faltaban y habiendo dos mesas vacías tuve que volver a rogar que nos preparara por fin la mesa, haciendonos esperar en total hora y media. Lo recomendaba mucho pero después del trato poco profesional y nada empático recibido no volveré nunca más. Funcionaba mucho...

Locals told me it is a cool spot, with good food at reasonable prices so we visited. On a busy (Friday) night you'd say they're warming up for the summer season ahead (because it seemed they're not exactly on pace) Simply noting this for those of us visiting in the coming weeks/months, in order to keep a cool head. The staff is magnificent, smiling and friendly. Check them out when you get a chance. Pro tip: while around there, explore the cool surroundings also (the park &...