Abrasador Canela y Limón del Pesca — Restaurant in Consuegra

Tenía muchas expectativas creadas en torno a este restaurante. Estuvimos comiendo mi mujer, mi hijo (18), mi hija (8) y yo el 18 de abril, Viernes Santo. Como no había mesa en el turno de las 15,30 h., reservamos para el turno de las 13,30 h. Y allí que estuvimos, puntuales como los clavos!!!.

Al poco de entrar y acomodarnos, viene el dueño del restaurante a tomarnos nota de lo que íbamos a pedir. Le pedimos un poco más de tiempo pues estábamos indecisos y nos contesta: "Si, si... claro, no hay problema. Lo único que a las 14,45 h se tienen que levantar ustedes para preparar el turno de las 15,30. Creo que eso ya se lo había explicado.". Efectivamente sabía que había dos turnos, pero jamás me informaron que a las 14,45 h. tendríamos que levantarnos de la mesa". La comida que comimos la verdad es que estaba toda muy rica, tienen buena cocina si señor. Mientras comíamos y en otra ocasión está persona nos hizo mención al tema del turno de las 15,30 h. Dios mío, que agobio!!!. Se repente se produjo un momento caos: un padre acude desde un comedor contiguo a la barra nervioso y pidiendo hielo pq su hija se había quemado con una infusion y de forma simultánea dos inspectoras de trabajo se presentan en el bar solicitando los datos de filiación de todos los empleados del restaurante. Fue un momento un poco rocambolesco y desagradable por lo vivido, y afectó bastante a la calidad del servicio, aunque algunos camareros salieron de la situación de forma airosa. Mala suerte desde luego. Los inspectores tras cumplir su trabajo abandonaron el restaurante cuando apenas quedaban dos o tres mesas del primer turno. Ya empezaban a agolparse las personas que iban a entrar para el segundo turno cuando la persona que tomaba nota de las comandas de la mesa se nos acerca y nos dice: "Bueno, todavía nos quedan 5 minutos para pedir el postre antes de que empiece el segundo turno. Os traigo la carta de postres.*. Me entró la risa, ahora parecía que ya no había tanta prisa.

He de decir que dejando de un lado a esta persona el servicio del resto del personal fue muy bueno y profesional.

En mi opinión, y aunque se informe de la existencia de dos turnos de comida, no sé puede agobiar a la gente con la hora. Se pueden hacer las cosas con más sutileza. No obstante, no creo que vaya a reservar un restaurante en estas condiciones. Me niego. Me niego a pensar que nos tratan como borregos intentando cubrir a doble turno los comedores de un restaurante. Entiendo y se que es un negocio, que están para hacer dinero y hacer el negocio próspero, pero sinceramente creo que baja la calidad del servicio y baja la calidad del trato personal y sosegado que debe recibir un comensal que acude a tu establecimiento a disfrutar de la comida que tú preparas.

Como he dicho la comida estaba rica, con productos de calidad. Como excepecion, las croquetas de ciervo que venían frías por dentro pues, aún siendo caseras, las fríen congeladas. En cuanto a la cantidad, bueno...un poco justa. Y en cuanto al precio, bien ajustado aunque quizás un pelín subido de precio en algunos artículos, como la copa de vino blanco o tinto (4 €...¡No estamos en Madrid!), la botella de agua (3,80 €) y la tarta de kit kat (8 €). El importe total fue de 106,20 €.

Por lo relatado, calificó el servicio con un 3 y el ambiente con un 4. Es un sitio para...

Mi experiencia en este restaurante es agridulce... Creo que los precios son desorbitados en algunos platos , pedimos una ensalada , croquetas de jamón ibérico para compartir y tallarines de calabacín. Empiezo por lo malo: las croquetas no sabían a jamón ibérico, eran enanas y la masa solo sabía a bechamel. Los tallarines de calabacín a la carbonara era una sopa con cuatro trozos mal cortados de calabacín que no era ni de lejos tallarín y la carbonara era de nata súper líquida y salada que me tuve que comer con cuchara. La carbonara es con huevo solo , no es con nata. Sí que tenía un huevo para mezclarlo con la nata pero , como era tan líquida no quedaba bien y el huevo se disolvió en la sopa de nata . Lo único bueno, y muy bueno , eran los torreznos que acompañaban el plato. Un 10 para los torreznos. Ahora lo bueno : La ensalada estaba espectacular , con un sabor muy bueno y con muchas texturas a saborear . La salsa muy buena y deliciosa . El trato por parte de la camarera impecable , aunque estaba sola , tanto en cocina como ella no nos hicieron esperar casi nada . La camarera muy simpática , agradable y muy rápida en el servicio. Si vuelvo a este restaurante creo que haré otra selección de platos , porque la carne y las ensaladas tenían muy buena pinta y la gente salía con muy buena impresión de lo que habían comido. Así que creo que parte del error fué mío al elegir un plato que no se ejecutó bien y debí decantarme por su especialidad en carnes. Igualmente, solo por como salía la gente de contenta de comer allí y viendo los platos de otros comensales , lo recomendaría a todo el mundo. Otra cosa que no es culpa del restaurante es que , si comes en la terraza, hay un bar al lado con la música excesivamente alta y molesta hasta para hablar. Lo recomiendo 100% pero hay que elegir los platos tan variados que tienen de carnes y ensaladas y no el de Tallarines de...

Realmente no conocemos ni la comida ni el servicio, ya que hoy no nos han dado la oportunidad de comprobarlo. Ayer reservamos una mesa en éste restaurante, para hoy a las 13.30h aprox. Nuestra idea era visitar el Castillo, molinos y museo de Consuegra y comer en este restaurante debido a su valoración, pues bien, a las 13.40 cuando estábamos bajajando de los molinos, en coche con dos niños pequelos después de visitar todo y a escasos 5 min de restsurante recibimos un email, como que nos anulan la reserva por llegar tarde, les llamamos inmediatamente y tratándonos de forma mezquina y como si hubieramos matado a Kenedy, nos dicen, después de explicarles, la causística, esperas en las visitas, viajamos con niños pequeños.. etc etc...que ellos están obligados a cancelar la reserva si no asistimos 15 min después de la misma, quizas deberiamos haber avisado si,pero hemos llamado con el afan de disculparnos y poder comer.....el trato por teléfono faltálico, no me quiero ni imaginar si ese señor te atiende en las mesas para comer, realmente la comida no la conocemos ni siquiera el sitio....mi experiencia me dice que es bastante más efectivo hacer una llamada, que mandar un email, y que una vez que te llaman para disculparse, aceptarlas....... no es un lugar al que recomendaría ir... sobre todo por la falta de mano izquierda....nos encontramos a las 13.45h a mas de 1h de casa, con dos niños pequeños sin sitio para comer....espero y deseo que tomen nota los gerentes del restaurante y que identifiquen a la persona que nos atendió por teléfono y tomen medidas contra ella, ya que le hace un flaco favor al negocio, que entiendo que un miércoles santo tendrán clientela de sobra, cosa de la que me alegro, pero mi pregunta es....habrian hecho lo mismo un martes 13 de noviembre...... .......haganselo ver...por favor. Hasta...