Restaurante Monte Vélez — Restaurant in Huétor Vega

Mi experiencia en el Restaurante Monte Vélez fue sumamente agradable. Desde el momento en que entré, me sentí acogido por la cálida atmósfera y el atento servicio del personal. La comida, sin duda, fue la estrella del show. Cada plato que probamos estaba lleno de sabor y frescura, con ingredientes de primera calidad y una elaboración tradicional que se notaba en cada bocado.

Las especialidades de la casa, como las carnes a la brasa y las recetas caseras, son un verdadero deleite para los sentidos. Las porciones son generosas, perfectas para compartir y disfrutar en compañía. Además, la carta ofrece una variedad de opciones para todos los gustos, incluyendo platos vegetarianos y opciones para niños.

Sin embargo, hay un aspecto que podría mejorar: la presentación de los platos. Aunque la comida es deliciosa, la forma en que se presenta en el plato podría ser más elaborada y atractiva. Un toque de creatividad en la disposición de los alimentos y una vajilla más elegante contribuirían a elevar aún más la experiencia gastronómica.

En definitiva, recomiendo encarecidamente el Restaurante Monte Vélez a todo aquel que busque una comida deliciosa y abundante en un ambiente acogedor y familiar. Con una pequeña mejora en la presentación de los platos, este restaurante se convertiría en una referencia culinaria de la zona.

Puntos fuertes:

Comida deliciosa y fresca Ingredientes de primera calidad Elaboración tradicional Personal atento y amable Amplia variedad de platos Porciones generosas Ambiente acogedor y familiar

Puntos a mejorar:

Presentación de los platos

Recomendación:

Recomiendo encarecidamente el Restaurante Monte Vélez a todo aquel que busque una comida deliciosa y abundante en un ambiente...

Hemos ido a este restaurante en numerosas ocasiones desde hace años, siempre el servicio y la comida correctos, un sitio sin grandes pretensiones pero con el que siempre aciertas. El día de reyes fuimos con la familia y una mascota pues teníamos una reserva en la terraza (no en el interior), resulta que nos atienden las camareras y nos comentan que no se permite la entrada de perros pero que igual podemos dejarlo debajo de la mesa si no molesta, le decimos que ok, cuando nos vamos a sentar viene otro camarero y nos dice que no nos deja pasar con el perro, que el dueño no admite mascotas desde hace años y, de hecho, nos enseña un cartel que hay en la puerta (descolorido, que no se ve) donde se intuye la prohibición a mascotas, le decimos que ok, lo entendemos y respetamos el derecho de admisión del dueño, pero que nosotros nos vamos porque venimos desde Granada y no podemos dejar el perro solo en el coche durante el tiempo que estemos comiendo. Resulta que hace justo un año estuvimos comiendo en este mismo sitio con un yorkshire que pesa 2 kilos y sin problema. Este año fuimos con un perro de aguas, y claro al pesar más, supone un problema. Respetamos el derecho de admisión, pero os recordamos que la normativa andaluza permite el acceso a terrazas de mascotas en las condiciones adecuadas. Decir, además, que la forma de decirnos las cosas fue altiva y poco empática, por eso os doy una estrella, por la actitud y por tener las normas de acceso muy anticuadas. Las mascotas son parte de nuestra sociedad y nuestras familias, si no os actualizáis perderéis clientes de toda la vida como nosotros. No...

He venido en otras ocasiones a este restaurante y siempre he salido muy contenta, pero esta no ha sido una de esas ocasiones.

Al principio nos han atendido bien y bastante rápido, pero una vez que han tomado nota de la comanda y han traído las tapas y el plato para compartir al centro de la mesa, unas croquetas que no estaban recién sacadas porque estaban templadas, se han olvidado de nosotros. Una hora y poco ha pasado hasta que nos han servido la comida, entre tanto no nos han rellenado bebida y tampoco se han pasado por la mesa para ver nuestra situación, HEMOS SIDO IGNORADOS, lo que convierte el servicio en PÉSIMO. Porque además hay que añadir que cuando nos han traído la comida estaba mal, hemos pedido tres solomillos con salsa roquefort, la alternativa era salsa pimienta, y habíamos indicado que la salsa la queríamos a parte, pues bien, han decidido poner en el plato salsa alioli. Los acompañamientos eran erróneos, han traído otra salsa a parte que habíamos pedido para que no la echaran en un principio sobre la carne, pero han echado la salsa sobre el solomillo a la pimienta, además de traer la salsa en el tarro.

La situación es que hay una comida de empresa, pero la cuestión es, si no son capaces de gestionar más mesas al tener este evento, ¿Por qué admiten reservas? Hasta para que nos traigan la cuenta la hemos tenido que pedir tres veces. Una decepción enorme y desesperante. Dos horas y media para un plato de croquetas y cinco solomillos me parece desmesurado.

No voy a volver más y desde luego no voy a...