La Parrilla — Restaurant in La Alberca

¡Nos libramos por los pelos! Entramos al local dispuestos a tomar una parrillada de carne pero el aspecto desangelado del lugar ya nos extrañó. La "carta" (un papel amarillo grasiento con las "condiciones" del menú y parrillada) echa para atrás. La parrillada de 10€ POR PERSONA no incluye ni agua. En el menú la bebida sí va incluida, pero fuera del menú cualquier bebida (agua, refrescos, cerveza, vino...) son 3€. Pan 1€. ¿Quién come chorizo, lomo, panceta... sin pan?

Tardaron en tomarnos nota y eso que sólo había una mesa ocupada y estaba con los postres. Empecé a buscar opiniones. Casi sin cobertura... sólo pude ver que la media de reseñas era de 1,8. Mosqueante...

Éramos tres personas y pedimos parrillada para dos y un menú. Si compartíamos la parrillada nos cobraban otros 3€ por "ponernos vaso, cubiertos, atención y servicio". Así, literal, dicho por el camarero/dueño. Pedimos vino y casera, y nos dice "les pongo un botella entera. Si se la terminan, les cobro 12€". Pero si el menú lo lleva incluido (=0€) y fuera de menú son 3€ por persona y somos dos 'no menú', ¿no serían 6€ ó 9€ con la casera?????

Fue tan mala la contestación que nos levantamos y nos fuimos. Según salíamos por la puerta nos mandó a paseo diciendo: "ale, así podéis ir ahorrando para el crucero". Llamarle maleducado es quedarse corto.

Después, viendo las opiniones, me he acordado que a esos clientes que estaban con el postre les dijo que se les había estropeado la máquina de café, pero, por las reseñas, se debió estropear hace años y no la han vuelto a arreglar.

¡Huid de aquí, insensatos!

Edito: Qué pena leer que, dos años después, este lugar sigue abierto...

Más bien diré que es un buen lugar para no comer. Y me refiero a que después de esperar mas de tres cuartos de hora por una mesa, estuvimos esperando otra media hora por el primer plato, y otros tres cuartos de hora entre el primero y el segundo, y por desesperación marchamos sin tomar ni el postre. Eso por no hablar de lo que pidieron dos de mis acompañantes, que desafortunadamente pidieron chuletillas de lechazo, y debo decir que técnicamente eran chuletillas, ya que eran dos, yo que soy de buen comer me pedí el chuletón, que tiene un sobrecoste del menú de 2€, pero mi sorpresa fue que me pusieron un chuletín del tamaño de una chuleta de cerdo. Eso sí, os desaconsejo pedir la ensalada, ya que la traen de serie todos los platos para rellenar, las patatas fritas de la guarnición calculé que tendrían una semana de solera al menos. De meter miedo también son los baños, que se resumen a sendos inodoros metidos en un armario cada uno, y un lavabín en medio para compartir, donde la higiene brilla.... Pero por su ausencia. Algunos pensaréis que estoy exagerando, pero creedme que todo esto es cierto, yo creo que se dieron cuenta de la pésima calidad de su servicio, cuando al servirnos los segundos platos, nos oyeron quejarnos entre nosotros, y nos regalaron para compensar la tardanza dijeron, un platillo con seis lonchas de lomo y salchichón. Ciertamente me arrepentí mucho de llevar a ese antro a mi familia. Si queréis un buen trato y mejor servicio, caminad 100 m. hacia la plaza y en cualquier sitio quedareis contentos con el trato y la comida. Un...

Respecto a este restaurante ,primero nos extraño que estuviera vacío en una hora punta y el resto de la calle con restaurantes concurridos. como teníamos hambre entramos nos choco mucho la hoja de menú que te ponen sin plastificar ni nada en una cuartilla de color amarillo ,por cierto lleno de grasa ,que la retiran y se la dan a los siguientes comensales , podrían tener más de una hoja para que esto no se vea, pedimos parrillada, que fue abundante, de hecho sobró, pero la calidad muy dispar y la preparación mala, se nota que está hecha previamente y recalentada a la plancha , luego no es una parrillada, es una planchada; también pedimos un menú combinado, con pasta, evidentemente recalentada al microondas, los macarrones blandengues. y el pan lo cobran aparte, un postre también cobrado aparte no va incluido en el menú . El que creo sea el dueño, estaba poco más que criticando el trabajo de uno de los empleados y lo hacía en voz alta y a la vista y oído de la clientela. Lo único que he de resaltar es que en la parrillada venía incluido un cuenco con patatas pateadas abundante junto a una ensalada, pero vamos yo no lo recomendaría. Tampoco da buena impresión poner la vajilla desparejada y con desconchones. Espero que esta nota permita mejorar el servicio de cara a...