Bueno, pues por donde empezar. Faltan estrellas para poder calificar este restaurante. Llamamos temprano para reservar y el entusiasmo de Enrique al cogernos la reserva nos hizo presagiar que todo iría bien. Nos equivocamos, fue mejor aún de lo esperado. Al llegar Enrique nos saludó, se presenta y se queda con nuestros nombres. La comida no tiene descripción, las croquetas geniales(que se lo preguntan a nuestra hija julia), la hamburguesa de buey gourmet una maravilla, y tuvieron el detalle de traerla ya partida para compartir, y el lagarto ibérico... Impresionante, con el punto justo, se deshacía en la boca. Pero lo bueno no termino ahí, los postres no tienen comparación, son un manjar para la boca. Quizás no sea un 3 estrellas michelín, pero es un 100 estrellas en calidad y actitud de su personal. Me duele el no haberme quedado con el nombre del chico que nos atendió en terraza, por que fue mucho más que amable y agradable. Enrique, continúa así, por que te espera algo muy grande. Nosotros repetiremos seguro, y recomendaremos a la gente este sitio tan peculiar, donde te sirven la carne directa de su propia carnicería.
Muchas gracias por hacernos ver que aún queda gente que se desvive por sus clientes, y que da todo por su negocio.
P. D. El detalle de los embutidos ibericos de cortesía de la casa fue un puntazo.
Actualizo:
Como dije, volvimos y quiero repetir que todo fue incluso mejor que las veces anteriores. Enrique sigue igual de amable, simpático y atento que siempre. Para mí el restaurante ha subido un punto con respecto a la vez anterior, añadir tarta de queso casera 100% a la carta es un acierto. Hemos probado muchas tartas de queso y puedo decir que en nuestro ranking entra en el top 3. Adjunto foto como prueba del delito.
Volveremos otra vez, por qué no es sólo lo bien que te tratan en el restaurante, es que bajar a su carniceria y entablar conversación con ese padre y ese hijo tan buena gente es un placer, mientras te preparan esa carne y ese embutidos de 10.
Seguir así familia, por qué siendo así, solo pueden pasaros...
Read moreSiento esta puntuación, pero tengo que contar mi experiencia. Soy bastante exquisito con el punto de la carne, me gusta que esté muy muy cruda por dentro, como en España es difícil hacérselo ver a la gente(lo del punto bleu no lo entienden en todos lados), insisto mucho en este detalle cuando pido un chuletón, insisto de manera histriónica incluso para hacerlo ver con claridad y que no haya equívocos, y siempre digo que si el cocinero tiene dudas que peque de crudo, que siempre hay tiempo de pasarlo un poco más si hace falta, pero de la otra manera no hay vuelta atrás. Pues bien, pedimos un chuletón mi mujer y yo para los dos, estábamos solos en el restaurante, y después de mi larga explicación de unos cuantos minutos acerca del punto, la camarera me dice "entonces punto menos, no?", y yo "nooooooooo", eso es muy hecho para mi, crudo, lo quiero crudo, vuelta y vuelta, quiero ver todo rojo por dentro. Pues cual no es mi sorpresa, cuando me traen el chuletón y de crudo nada, pero es que ni punto menos, eso estaba al punto, me quedé petrificado. Aquí cometí un error al no devolverlo, pero es que me da mucha vergüenza devolver comida, no todos podemos hacerlo tan fácilmente, pero es cierto que lo tenía que haber devuelto. Al final nos lo comimos, a ver, no se termina el mundo por tomar una carne al punto, pero destrozo mi experiencia de la cena de ese día, y es una pena, porque la carne prometía un sabor espectacular(quizás por eso me dio mucha más rabia). Cuando llegó la chica a retirar los platos, le expliqué todo, y me dijo que lo tenía que haber devuelto(repito que tiene toda la razón) y me pidió disculpas, y ya, sin más y me trajo la cuenta. Yo en ese punto ya tenía mi TOC activado al máximo y estaba dándole vueltas sin parar a lo que podía haber pasado y dando la tabarra a mi mujer, porque estás situaciones me desagradan mucho.
Resumiendo, no digo que el restaurante sea malo, ni el trato, ni el producto, pero aquí tengo que contar mi experiencia y a ver si la leen y con suerte no se repite para otro amante de la...
Read moreHabía leído en las redes sus buenas críticas y decidí apostar por este Restaurante y tengo que reconocer que acerté de pleno. Ya desde la llamada para reservar mesa, Enrique el gerente y dueño del negocio, marca la diferencia con un trato muy cercano y amable. Nos presentamos a la hora de la reserva, el trato tanto de Enrique, Albert y Mendes el Chef, para nota. Después de aclarar alguna duda respecto a algún plato del menú, nos decidimos por el menú núm. 3, es el de precio más elevado, pero merece la pena por que la carne que incluye es espectacular. Tuvieron el detalle de ofrecernos una cata a modo de aperitivo de jamón, chorizo, lomo y salchichón, a cuál mejor Alubias con costillas y chorizo y patatas revolconas/meneas con torreznos fueron los primeros, muy ricos y bien cocinados ambos. El segundo “tacos de solomillo ibérico” (punto +) para mi pareja y “Solomillo Ibérico” (punto) para mí. El punto de la carne perfecto, además como tienen la carnicería en la planta de abajo, te cortan la pieza en el momento y te la muestran antes de pasarla a cocina. La carne sencillamente espectacular, no recuerdo haber disfrutado tanto comiendo un solomillo como ayer en la casa de Enrique, todos los adjetivos que pueda escribir seguro que se quedan cortos, hay que probarlo y punto. Y para rematar necesitaba un postre casero, le comenté a Albert que mi pasión es el chocolate y lo dejé a su elección, al rato salió Mendes con un postre que consistía en una copa sobre un plato con una esmerada presentación y me explicó los ingredientes y su elaboración, pero yo no podía dejar de mirar el contenido de la copa impaciente por probarlo. ¡¡¡Para repetir 3 veces, madre mía!!! Nos invitaron a un chupito y nos despedimos como si nos conociéramos de toda la vida, gracias a Enrique, Albert, Mendes y el resto del personal, por hacernos sentir como en nuestra propia casa. Conclusión: Si vas a La Alberca, cometerás un grave error si no acabas comiendo en este restaurante,...
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