juliet & marieta — Restaurant in la Ràpita

AYER NOS SALIERON EN 2 PLATOS DE UN ARROZ CON VOGABANTE 2 TROCITOS DE NANAS (ESTROPAJO DE LANA DE ACERO) USADOS PARA LIMPIAR LA PAELLERA... Y UNA PIEDRA DE TAMAÑO MÁS GRANDE QUE LA YEMA DE UN PULGAR Y, ADEMÁS, LA REACCIÓN DEL RESTAURANTE FUE MUY DECEPCIONANTE FRENTE A ESTE ERROR DE ELLOS QUE PARA NOSOTROS FUE TAN DESAGRADABLE. NO HUBO NI UN "LO SENTIMOS", NI UN RECONOCIMIENTO DE SU ERROR, NI UN "GRACIAS POR INFORMARNOS NOS SERVIRÁ PARA ESTAR MÁS ATENTOS PARA QUE NO VUELVA A OCURRIR", NI NINGÚN TIPO DE PREOCUPACIÓN POR NOSOTROS... En vez de eso, NOS PREGUNTARON  SI NOS PONÍAN EL RESTO DEL ARROZ PARA LLEVAR SABIENDO QUE CABÍA EL RIESGO DE QUE HUBIESE MÁS TROCITOS DE FIBRA DE ACERO. Tanto los los trocitos de nanas como la piedra acabaron en nuestras bocas; afortunadamente no sucedió nada grave (atragantamiento, rotura de muela...) más allá de un raspado en la lengua, el asco que da haber chupado trocitos de fibra de nanas que han servido para limpiar suciedades, y la preocupación por si has podido tragarte un trocito de fibra de acero, sobre todo en mi caso que padezco de divertículos. Somos clientes desde hace más de 15 años y llegamos de la mano de unos muy buenos amigos nuestros que son a su vez amigos íntimos del restaurante. Por deferencia a nuestros  amigos decidimos comunicar lo sucedido sin más pretensiones que ayudar a que pudieran poner medios para evitarlo en adelante. Pero cuál fue nuestra sorpresa cuando, como si lo ocurrido fuera lo más normal del mundo, le restaron cualquier importancia: solo dijeron que los trocitos de nanas eran de fregar la paellera (pues claro) y que la piedra habría salido dentro de una almeja (a pesar de que la piedra era más grande que una almeja) y concluyeron diciendo que ya nos iban a invitar a unos chupitos que rechazamos y nos pareció fuera de lugar pues el incidente nos cortó la celebración y el apetito, nos generó bastante asco y preocupación, y nos provocó gran malestar tener que comunicarlo y encontrarnos con esta reacción por su parte. También nos dijeron que si nos hubiesen salido las nanas al empezar a comer el arroz nos hubieran hecho otro, como si se pudiera elegir el momento, o como si dependiendo de cuánto arroz lleves comido tal vez hubieras optado a algún tipo de resarcimiento o como si no se te cerrase el estómago independientemente de si las nanas te salen al principio o a la mitad de la comida (de hecho pensábamos repetir pues aún quedaba casi media paellera de arroz para cinco personas, pero ya no pudimos). Pensado en nuestros amigos, decidimos no pedir el libro de reclamaciones para que fuese un inspector de sanidad quien determinara la gravedad o no de lo ocurrido y pedir la cuenta e irnos para no volver más, no tanto por lo sucedido pues un error lo puede cometer cualquiera, sino por la actitud del restaurante y lo mal que nos sentimos tratados. En otros negocios, si te dan un producto en malas condiciones, te lo cambian por uno nuevo o te devuelven el dinero y ¿en un restaurante? Tras consultarlo nos han dicho que un restaurante con estos precios indica que tiene cierta categoría (pagamos 100€ del arroz, 17€ del vino, entre 11€ y 13€ de cada entrante, 7€ de 2 aguas y 3€ del pan. TOTAL: 184€), pero que la categoría y la profesionalidad se demuestran poniendo todos los medios para intentar que los clientes no se vayan insatisfechos tras sufrir un incidente del que el restaurante es el responsable y los clientes los damnificados, y que no deberían habernos cobrado nada o, al menos, no el arroz. Para mí hubiera estado muy bien que, en vez de poner la excusa por la cual no hacían un arroz nuevo, viendo que se nos había estropeado la comida por su culpa y no habíamos podido terminarla, hubieran dicho que volviésemos otro día y que al arroz invitarían ellos. Hubiéramos vuelto con más gente como siempre y hubiéramos pagado 2 botellas de vino y los entrantes y los postres y los cafés y las copas como siempre; no habrían perdido ningún cliente ni tendrían en Internet esta crítica negativa. Ahora ya ni les haremos buena propaganda ni les llevaremos...

Ya había estado en este restaurante. La impresión fue buena, por eso volvimos, sin embargo esta vez ha dejado mucho que desear. Teníamos mesas a las 15h. Nos ubicaron en una mesa donde tocaba parcialmente el sol, les pedimos de ubicarnos en otra y no hubo ningún problema. A las 15h30 nos traían la bebida y nos tomaban nota de la comida. Los entrantes fueron rápidos y buenos, y ya está!! Lo demás fue una espera de una hora para una paella que el plato iba a 20 euros. Así que se presupone que debía estar buena. Sin embargo estaba pasada, se podía hacer un buen mortero con ella. Nos la comimos, ya que era lo único que íbamos a comer, la hora eran casi las 17h. No pedimos postres, porque igual salíamos de allí por la noche. Así que les pedimos la nota y después de pagar, les indicamos el estado de su comida que fue decepcionante. Nos contestaron que lo lamentaban , palabras que no nos satisfacieron ya que no hubo otro detalle que enseñarnos la puerta. Lo que está claro, es que deben mejorar en muchos aspectos, ya que vas a gastarte dinero en una comida de calidad y fue pésima. Dudo mucho que volvamos, ya que hay muchos sitios en La Rapita y este ya no está entre...

Excellent service. Waiter was friendly and very helpful.

Food was delicious. Paella was really good. The steak was cooked to our requests, a bit fatty but the chips made up for it.

Perfect location looking out over the sea.

Definitely recommend this restaurant. It is more expensive. But it is a proper dinning experience, linen table cloths and...