Ginos — Restaurant in Las Palmas de Gran Canaria

Ginos: Un Viaje Cómodo a la Cocina Italiana Clásica en Formato Franquicia

Ginos es una de esas cadenas de restaurantes italianos que forman parte del paisaje culinario de España desde hace décadas. Se ha consolidado como una opción accesible y fiable para quienes buscan disfrutar de platos italianos en un ambiente informal y familiar.

Lo primero que destaca de Ginos es su ambiente estandarizado y acogedor. Cada local, independientemente de su ubicación, mantiene una estética similar, con toques rústicos y cálidos que evocan una trattoria italiana moderna. Es un lugar ideal para comidas o cenas con amigos, familiares o en pareja** que no buscan una experiencia gastronómica de alta cocina, sino una velada agradable y sin sorpresas.

La propuesta culinaria se centra en los clásicos italianos que todos conocemos y amamos: una amplia variedad de pastas (con múltiples salsas a elegir), pizzas de masa fina y crujiente o napolitana, ensaladas frescas y algunos antipasti para compartir. Su fuerza reside en ofrecer platos que satisfacen un gusto generalizado, con raciones generosas y sabores reconocibles.

Si bien la innovación culinaria no es su fuerte, Ginos cumple con lo que promete: comida italiana de calidad media-alta dentro de un modelo de franquicia. Se aprecian los esfuerzos por mantener una cierta autenticidad en sus ingredientes, y la posibilidad de personalizar muchos de sus platos es un punto a favor.

El servicio suele ser ágil y eficiente, adaptado al volumen de clientes que manejan, lo cual es de agradecer en horas punta. La relación calidad-precio es uno de sus pilares, haciendo de Ginos una alternativa atractiva para salir a comer o cenar sin grandes pretensiones económicas.

En resumen, Ginos es una apuesta segura para quienes buscan un restaurante italiano que combine comodidad, un ambiente relajado y una oferta clásica y bien ejecutada. Es el lugar perfecto para saciar el antojo de pasta o pizza en un entorno familiar y sin complicaciones. Un clásico que, pese a ser una cadena, sigue siendo una opción popular en el panorama...

Mala experiencia ante la expectativa de coger dos packs "decentes" por To good to go. Cada uno valorado supuestamente en 13 euros.Ni por asomo esa cajita con ese poco contenido tiene ese valor (al menos no debería).Nos reímos y dijimos que ni en broma se puede valorar ni al peso (aún sin saber lo que contenía) por ese precio. Me atrevo a decir que ni por 4 euros cada "pack".Que cuando apostamos en broma que capaz que uno sería de espaguetis, me atreví a decir que capaz que los dos lo serían. Y así fue. Un auténtico palo. Encima, tenía unos deliciosos espaguetis preparados ya en casa, que superan a estos con creces. Una cajita: espaguetis al "diente" (porque más al dente no podían estar) con una gran albóndiga. Segunda cajita: mismos espaguetis duritos con un poco de carne molida (supongo misma albóndiga pero desmenuzada).A pesar de haber sido un pedido hecho por esta aplicación y pack "sorpresa" para salvar comida, se podían haber lucido un poco más y, al menos, poner una mini cajita con otro "plato" distinto. Es la carta de presentación del lugar. Es un medio para conocer el sitio y saber si repito. Incluso, sentándome otro día a comer en familia o con amigos en el propio local.El recibimiento también lo noté regular. Lo positivo es que entregaron las dos mini cajas de espaguetis con espaguetis con su bolsa y ofrecieron entregar cubiertos. Al menos, pedí un chupachups de los que tienen como obsequio en el local y me dijeron que por supuesto...

No me gusta realizar reseñas NO positivas pero creo que es justo de vez en cuando comunicar situaciones poco agradables. El pasado fin de semana estaba de compras en en centro comercial y pasadas un poco las tres decidimos comer y elegimos este sitio. Nos pusimos en el mostrador de entrada a la espera de que nos atendieran y nos diesen mesa. Tras unos 10/15 minutos decidimos cambiar de sitio. El motivo: durante ese tiempo nadie se acercó a atendernos, habían varias mesas libres y los camareros pasaban de un lado a otro, nadie se paró a decirnos absolutamente nada, ni alzaban la vista para mirarnos. Vi en ese momento que el horario era hasta las 4 así que pensé que ya era tarde para comer ahí pero, ¿de verdad ninguno de los camareros o responsables del local se pensaba acercar a la entrada y decirnos nada a los que estábamos haciendo cola? El colmo fue cuando apenas a 10 metros en frente de nosotros dos camareros se pusieron a conversar entre ellos en un momento de relax mientras llevábamos cerca de un cuarto de hora esperando que alguien nos atendiera, los miré detenidamente a ver si eran conscientes de esa penosa situación pero nos ignoraron de una manera demasiado descarada así que nos dimos media vuelta y entramos en el McDonald's, no era la misma comida pero la atención fue...