Mi última visita al restaurante fue una grata sorpresa, ya que pude notar mejoras importantes que hicieron que la experiencia fuera mucho más placentera. Desde que entras, el ambiente sigue siendo encantador: una combinación moderna y rústica que invita a relajarse y disfrutar.
Esta vez, el servicio fue mucho más eficiente. Las hamburguesas llegaron en el tiempo esperado, calientes y en perfecto estado, algo que definitivamente marcó la diferencia. Probé la Trufada (180 g de carne de vacuno madurada, queso cheddar, bacon crujiente, huevo, mayonesa trufada y pan potato roll de Juanito Baker), ¡y qué delicia! La trufa es la protagonista absoluta, y cada bocado es una explosión de sabor. También me animé con la hamburguesa del mes, la Rosco Burger (carne de vacuno madurada, queso cheddar, bacon ahumado, crema de turrón Jijona y una berlina glaseada). Admito que al principio no sabía qué esperar, pero su mezcla de sabores dulces y salados me sorprendió muchísimo. Fue una experiencia única y original que vale la pena probar.
El momento dulce de la noche fue la tarta de queso al horno, que superó todas mis expectativas. Su textura cremosa y su equilibrio perfecto entre dulzura y suavidad hicieron que cada cucharada fuera un pequeño placer.
El único detalle que me gustaría mencionar es que la temperatura del local estaba algo baja, lo que en algunos momentos resultó un poco incómodo. Sin embargo, no fue algo que opacara la experiencia general.
En definitiva, fue una visita muy agradable donde pude disfrutar de sabores increíbles y notar el esfuerzo del equipo por mejorar. Me voy con ganas de volver y seguir descubriendo las delicias que tienen para ofrecer. ¡Un lugar al que vale la...
Read moreAnte todo, quiero dejar claro, que esta reseña no es con ningún tipo de maldad ni ofensa hacia el establecimiento o hacia los trabajadores. Tenía muchas ganas de probar esta hamburguesería. Hacia tiempo que la seguia en redes sociales y me lo recomendaron varias personas. No soy una experta en hamburguesas, pero puedo decir sin equivocarme lo mas minimo, que los productos dejan bastante que desear. Pedimos, como entrante, unos nachos (con el queso aparte), 4 hamburguesas (1 de ellas sin queso) y de postre, la tarta de queso y un helado. Los nachos vinieron con el queso aparte. El queso era rallado y en un cuenco aparte completamente crudo. Se pidio amablemente al camarero que si lo podian calentar. Me informo que era algo que no solian hacer y que lo intentaria. Asi lo hizo, nos lo trajeron "derretido", cual mazacote, imposible de comer. Los nachos de bolsa. Llego el turno de las hamburguesas, una smash (adjunto fotos para que veais lo que tiene de smash), carne seca y dura. La johny cash, carne de vacuno madurada (con un sabor tremendamente raro, y si, he comido mas veces ese tipo de carne). La famosa burger sin queso y muy hecha que llego con queso. La devolvieron a cocina, y al cabo de 10-15 minutos, cuando el resto de comensales ya habíamos empezado a comer nuestros platos, llego. Llego con el pan brioche de la hamburguesa completamente mojado en la sangre de la hamburguesa. La cuarta hamburguesa, una de pollo completamente normal, y todo bien. Lo mejor de la cena fue la tarta de queso, estaba rica, cremosa y muy suave. Nose si hemos tenido mala suerte o realmente la calidad de los productos y la forma de hacerlos es asi. Desde luego probamos, no nos gusto. Y tengo claro que...
Read moreEs la primera vez que pedimos aquí y no creo que volvamos a pedir, Hemos pedido los aros de cebolla, las alitas de pollo, las patatas trufadas y dos hamburguesas. Y en general ha sido una decepción bastante grande, porque de lo que ves en Glovo en mi caso a lo que llega no tiene nada que ver. Los aros de cebolla congelados de supermercado todos amontonados y blandos, la ración cuesta 7,50€ y a mi parecer la ración es escasa. Las alitas de pollo más de lo mismo cuesta 10€, blandas, insipida, el toping de kikos en vez de ser bueno es molesto y en vez de fritas u horneadas parece que estén cocidas. Las patatas son de lo poco que se ha salvado y con peros muchos peros, patata frita genérica, dura y poco crujiente y si fuera una ración asequible se puede llegar a entender pero 7,50€ por una ración me parece más que suficiente para poner una patata natural y más cuidada en general. Las hamburguesas bueno estaban buenas porque no es lo común pero como en el resto de cosas no es razonable el precio con la calidad del producto, un pan brioche mal tostado, un pollo seco y una salsa casi inexistente. En la de carne lo único bueno es que puedes elegir al punto de cocción. A destacar que solo sabe a cebolla caramelizada y queso de cabra. Aparte de todo lo anterior el pedido a llegado pronto pero ha llegado todo frío, las salsas por una tarrina más bien pequeña cobran 1€ y no merece la pena porque menos su salsa nieto, son todo salsas hellmann. En general no volveremos a repetir de no ser que mejoren mucho la calidad para el precio que tienen. Y no se puede pedir con referencias a las fotos porque no tienen nada que ver lo que ves a lo...
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