La Cuina de Martín — Restaurant in Lleida

Fuimos ayer toda mi familia a comer. Algunos de nosotros nos pedimos el menú de calçots, que la verdad estaban buenísimos. Además, el menú de calçots tiene un segundo plato de butifarra con alubias, que estaban también buenísimas. Otros se pidieron caracoles a la llauna, también bastante buenos. A mi hija pequeña de dos años le hicieron una tortilla francesa fuera de menú, todo un detalle. En definitiva, la comida muy buena, y para comer la típica de Lleida va genial. Pero lo mejor de todo fue el servicio, los camareros siempre están atentos a que lo tengas todo y la comida sale rápido. La verdad que ninguna queja, seguro que repetiremos. Por cierto, para ser un sábado al mediodía, el restaurante no estaba nada lleno. Debería ser más difícil comer en este lugar. Supongo que ya se irá conociendo y dentro de poco será más difícil ir...

Un lloc genial. Hem dinat super bé, totalment recomanable. Bona relació qualitat-preu. Racions generoses, atenció excel·lent, molt atents durant tot el dinar. Molt servicials. Restaurant amb una decoració molt bonica, molt cuidat i net. Ens han recomanat uns entrants per compartir i ha set tot un encert: xipironets arrebossats (molt finet i cruixent, genial!), musclos i caragols a la llauna. Després cadascú ha escollit un plat i tots hem quedat encantats, tot molt bo: pota de pop, bacallà amb bolets, cabrit, manetes de porc, pollastre a la brasa, llonganissa a la brasa, escamarlanets amb ceba… i els postres també ens han agradat moltíssim, la majoria son casolans, a destacar el braç de nata, crema catalana i el mousse de mango. Un lloc genial per dinar en parella o en grup, familiar i molt atents. Per repetir...

Todo malísimo, el servicio pésimo y el precio muy alto para lo malo que estaba todo. Un entrecot malísimo de veinte euros q parece de cuatro euros del supermercado, un arroz con colorante amarillo que en teoría es de conejo pero lleva pollo, lo mismo con el fideuá que también tiene el mismo colorante amarillo y está igual de malo, y por último los caracoles que no estaban mal pero tenían baba, no estaban limpiados. Un camarero muy borde que nos respondía mal y la comida ha tardado más de una hora en llegar. En resumen, el precio muy alto, la comida muy mala, y el camarero faltando al respeto,...