La Cervecera de Niza — Restaurant in Madrid

Llevo ya tres años viviendo en el barrio y he visitado bastantes veces este restaurante bar, hasta hoy. Pedimos el menu del día (18€ en fin de semana). En primer lugar, tenemos que pedir que nos limpien la mesa porque sino no había manera y luego esperar 15 minutos a que nos tomen nota para la bebida. El camarero que nos atendió inicialmente nos tomó nota de un agua del tiempo y un doble de cerveza. Al traernos la bebida, probamos el agua y nos damos cuenta que está muy fría, por lo que amablemente pedimos que nos la cambien porque habíamos pedido agua del tiempo ya que mi pareja está con placas en la garganta y por preinscripción médica obviamente no puede tomar nada frío. Nuestra sorpresa viene cuando el camarero nos dice que ya estaba abierta y que a ver quién pagaba esto, que teníamos que abonar el importe. Tras explicarle en numerosas ocasiones que para ver qué está fría hay que abrir obviamente la botella y probarla (cosa 100% lógica). Tras hablar con otro camarero, finalmente entienden la situación. Lamentable servicio por parte del camarero inicial que, por cierto, no se dignó ni a poner servilletas (sólo una para dos personas) y me dijo que las cogiese del servilletero jajaj En fin, que hay que ser sumamente cutre para querer cobrar un agua que te cuesta 20 céntimos cuando encima has traído una cosa que no te han pedido. Esos 20 céntimos ahora repercuten en que jamás volveré a un sitio donde hay un gesto tan lamentable hacia el cliente y, por supuesto, no lo recomendaré a ningún conocido ya que ante todo hay que ser profesional y no enfrentarse a un cliente cuando el error ha sido...

Qué desastre. Fuimos un grupo de 7 a tomar unas cervezas y almorzar algo. Que nos atendieron costó un rato y cuando llegó el momento de la comida fue todo a peor. Pedimos 6 platos: calamares, croquetas, lagrimitas de pollo, patatas bravas, nachos y cachopo. Las bravas llegan y no nos traen cubiertos, que además tuvimos que levantarnos a por ellos porque pese a reclamarlos no nos los trajeron, mientras: las patatas frías. Llegan los calamares (estaban buenos) , las lagrimitas y las croquetas; y al rato , sin avisar NOS TRAE LA CUENTA FALTANDO 2 PLATOS. Empieza lo bueno: nos dice que va a reclamarlos; trae los nachos (con más mala pinta...) Y de paso nos dice que cachopo no queda (mentira, en la cuenta ya no venía no anotado, supongo que no les convendría por la hora de partido) que la cerveza las pidamos dentro y nos las llevemos nosotros a la mesa: QUE HAY PARTIDO Y YA NO PUEDEN ATENDERNOS, que si queremos seguir comiendo que pidamos dentro de otra carta que tienen para cuando hay partido. Y al rato vuelve con la cuenta pero ahora modificada con 8 cervezas más. Nos dice que estamos equivocados, que eso es lo que hemos comido y bebido. Llamamos al responsable y eso lo arregla. En resumen: una experiencia ridícula, unos nachos con un "guacamole" oxidado y una atención deficiente. Llevábamos todo el fin de semana en Madrid y ha sido la peor...

El trato por parte del personal deja mucho que desear. Mala organización incluso habiendo reservado. No esperaba un nivel culinario excelente (no llega si quiera a suficiente), pero lo que no se puede pasar es la falta de modales por parte de algún camarero, además hacia personas mayores.

Tienen los platos del menú del día, dos hamburguesas y raciones, no hay más carta. De lo que había en el menú del día solo me atrajo el plato de costillas asadas así que es lo único que pedí. A los 5 minutos el camarero volvió a decir que no quedaban para los 4 que las habíamos pedido en la mesa (a las 14:30).

"Spaguetis boloñesa" para verlos. No puedo subir foto porque, menos mal, no los pedí. Pero los vi y creo que en cualquier piso de estudiantes encontraríamos un plato de pasta más elaborado. Ensalada mixta muy pobre, con las hojas de lechuga casi sin trocear.

Cosas buenas: oreja a la plancha, terraza cómoda para tomar unas cañas, costillas asadas aceptables.

3 menús del día + 2 medios menús + 4 cañas (ponían jarritas pero eran 200 mL) + mosto + 3...