La Cata — Restaurant in Majadahonda

Hoy, a las 00:20, llegué al establecimiento y me encontré con varias mesas en ambas terrazas, tanto la cerrada como la exterior, con clientes desatendidos. Al ingresar, observé que el personal del local estaba sentado en una mesa, riéndose y mirando un teléfono móvil, sin nadie atendiendo la barra ni la cocina, que era visible a través de una ventana.

Al solicitar una bebida, dado que nuestra estancia sería breve (aproximadamente 10 minutos), la persona que parecía estar a cargo nos respondió de manera poco profesional y con una expresión poco cordial, mencionando que estaban cerrando, sin mayor explicación ni amabilidad. Acto seguido, continuaron riendo y prestando atención a su dispositivo, ignorando nuestra presencia.

Más allá de la mala impresión que esta actitud genera, considero que es un trato poco respetuoso hacia los clientes, especialmente para quienes, como mi familia y yo, éramos habituales del establecimiento. Lamentablemente, después de esta experiencia, no volveremos. Por cierto, hemos comido en un par de ocasiones, no más pues no merece la pena, como mucho algún que otro aperitivo. Como consejo, cambiad el horario de apertura del establecimiento, pues figura la 1:00 de la mañana como hora de cierre, gracias por su amable...

Fuimos con ganas de pasar un buen rato, pero la experiencia fue un desastre. El trato del personal fue pésimo desde el primer momento. En especial Paco, uno de los camareros, que además de ser maleducado, trató a la gente con una soberbia increíble.

Tardaron más de media hora en servirnos algo sencillísimo, sin dar ninguna explicación ni mostrar el más mínimo interés. Da la impresión de que les da igual todo y que estás molestando por estar ahí. El servicio es lento, desorganizado y con cero ganas de trabajar.

Para colmo, vimos cómo Paco le gritaba a una clienta porque, según él, había metido billetes en la máquina de tabaco. La mujer se disculpó varias veces, pero a él no le bastó: la dejó en ridículo delante de todo el mundo, con muy malos modos y sin ningún motivo real. Fue vergonzoso.

La comida, además, era claramente precocinada y sin gracia. Nada fresco, nada cuidado.

No volvemos ni aunque nos inviten. Y si quieres evitar que te atiendan mal y comer cosas recalentadas,...

Fuimos el viernes por la noche coincidiendo con un concierto que organizó el Ayuntamiento al aire libre. Eran las 23h y después de varias veces dos camareras ponernos mala cara (por ser la hora que era y tener que limpiarnos mesa) para sentarnos 6 personas, nos sentamos en una mesa de dentro. Pedimos la bebida y cuando fuimos a pedir la comida (ya las 23:20) nos dice la camarera que no nos pueden atender porque la cocina estaba cerrando. Realmente cierra a las 24h pero que antes tienen que limpiar. Nos enfadados un poco porque es algo que tienen que avisar sobre todo cuando previamente se lo habíamos dicho a la camarera de la terraza, la que no paró de refunfuñar y despotricar según se sentaba la gente. Al final nos sacaron dos raciones, frías, escasas y caras. Ese fue el resumen. Desde luego cada uno de los detalles hacen que queramos repetir. Ah! Por no hablar de la limpieza que deja bastante que desear (por lo menos...