Oronda es uno de esos cenadores/taberna que hace honor a su nombre. Está preñada por todos los contornos de detalles de la redonda esplendidez del dueño, del arquitecto/diseñador, del chef, del encargado de sala, etc. He disfrutado de varias veladas y almuerzos a lo largo de varios años; creo que puedo dar una opinión equilibrada. Empecemos por el último: a los mandos del personal de sala se encuentra Jose, un maître almeriense que tiene una de esas caras impagables para este oficio... que reflejan buen hacer, honestidad y servicio dedicado a la vez que genuino, natural. Es comedido, habla con pausa, pero su atención, explicaciones y consejos siempre tienen determinación y peso. Merece también mención la camarera en jefe, una luso-española (nacida en Portugal, pero ya con media vida en España) de nombre Rita, un torbellino de simpatía con cara de Pocahontas. En la cocina disfrutamos del buen hacer de tres chefs distintos, cada uno especializado en su parcela, pero que aportan un singular toque LatAm (platos con acentos peruanos, con su toque chifa y nikkei, ecuatorianos y mexicanos) fusionando platillos creativos y salsas de chuparse los dedos con la comida sana de toda la vida, la de madres y abuelas, tanto en el menú de mediodía como en la carta. Curioso el empeño de Oronda en mezclar cocina de mercado en pescados, legumbres y verduras con técnicas y sabores más vanguardistas. Conseguido en buena lid. No hay que perderse algunos de los especiales fuera de carta. A destacar, por ejemplo, la lecha o pez limón en tiradito con una excelente salsa de leche de tigre. Impresionante. O el tataki de atún toro, tierno, delicioso, también acompañado de una salsa estilo tiradito/ceviche peruano para morirse. El aceite de oliva virgen extra gratuito para los clientes es de nota, un detallazo: de los mejores, sino el mejor, que he probado en mi vida; en la mima liga, pero liderándola, que los Dauro, Arbossar, Finca La Torre, el mítico Oleum Viride, etc. Su nombre es Casas de Hualdo y es un aceite de ¡¡¡arbequina de Toledo!!! La cerveza es Mahou. Bien tirada con los nuevos grifos. Y con ediciones limitadas de la nueva hornada de cervezas artesanales dedicadas a Casimiro Mahou. Buenos tintos y blancos, con especial atención a la garnacha, en una combinación de precios populares y no tanto, para el más exquisito. Recomiendo probar el Alquez, garnacha de Calatayud. Diseño de sala y arquitectónico siempre han corrido a cargo del dueño, el celebérrimo Juan Mengíbar que más bien, para proseguir con las caras, parece un Ross (de Friends) español. Dicharachero y siempre dispuesto, se agradece que el dueño esté con asiduidad velando por su local y por sus clientes. Desenfadada propuesta en interior con colores grises y topos y fotos de mercados matritenses con su género en paredes. El exterior es la verdadera punta de lanza de este restaurante, que por su disposición recuerda muy mucho a los preciosos merenderos de antaño. Salimos por la puerta y tenemos un espacio con barriles y toneles invertidos a modo de mesa alta para beber y picotear de pie o sentado en banqueta. Tras esta zona, una carpa mediana pero amplia: protección, eso sí, para todas las estaciones, con aire natural o acondicionado en verano, con calefacción de las buenas y potentes en invierno. Rematan con la zona más alejada, mesas dispuestas bajo falsos plátanos, robles y chopos. Una delicia que disfrutan por igual grupos de amigos, parejas y familias con niños, otro de los puntos fuertes de Oronda, ya que los enanos pueden merodear por la zona del Zoco y jardines aledaños alejados del tráfico pero siempre a la vista de padres o familiares. Aparcamiento generoso, con zonas de parking gratuito a un lado,...
Read moreUn desastre a la hora de comer Ofrecen un menú del dia con tres primeros, tres segundos y tres postres
En una mesa de siete personas nos pones tres trozos de pan
Del menú del día, a las 14:00, nos dicen que solo queda una ración de un primero y tres raciones de otro primero , de los segundos platos tampoco tenían existencias de lo que queríamos pedir y no nos ofrecen nada para sustituir, por lo tanto tuvimos que elegir el tercer plato que aparecía en el menú ofrecido
En el postre nos traen lo que les parece, que no se parece en nada a lo que habíamos pedido
Por lo tanto nuestra opinión es de un desastre, es una pena que para escribir la reseña tengamos que poner una estrella
No se puede responder a la respuesta del restaurante La respuesta que ha dado el restaurante a mi reseña está llena de falsedades *La última comensal que se sentó a la mesa lo hizo a las 14:13 En ningún momento se nos ofreció bacalao como sustituto del rape Es verdad que nos ofrecieron la presa como sustituto del pollo a la parrilla cuando le dijimos a la camarera que solo nos quedaba la opción de los nuggets como segundo plato Todos entendemos que se trabaje con productos frescos y que en un momento dado las previsiones se queden cortas, pero cuando no hay rape, no hay pollo, no hay helado de yogur, se tarda demasiado tiempo en servir la comanda, el problema no son las previsiones, el problema es falta de organización La mesa estaba reservada con bastante antelación Nos pusieron tres trozos de pan para las siete personas, no tocábamos ni a medio trozo por persona Lo del postre fue la gota que colmó el vaso cuando nos trajeron lo que quisieron, ya que previamente preguntamos si tenían existencias de lo que habíamos pedido Es verdad que hablando se entiende la gente, pero con unas disculpas habría sido suficiente y no la respuesta que ha dado el restaurante ante...
Read moreDestacó la atención del personal que está al frente de los clientes. Son muy amables, y atentos, y hasta me atrevo a decir que son rápidos. La ubicación de restaurante es excelente, está en un punto muy céntrico de la población de Majadahonda, y esto hace que siempre este a tope de gente, les salva que tienen terraza grande que usan durante los meses del verano, ahora en invierno no sé cómo se apañaran. En cuanto a la carta es variada dentro de los estándares habituales. Me llama la atención los fish and chips, tostas.... Los precios en relación a la calidad de los platos por desgracia NO es proporcional. Y, es aquí donde quiero dejar mi denuncia. Entre los platos que pedimos nos llamó la atención que eran muy pobres, pedimos fish and chips de bacalao para 5 comensales ( dos niñas menos 5 años y 3 adultos), y no nos llego para todos. Eran 4 tiras contadas de bacalao muy finas acompañado de 8 patatas adornados con una vajilla espectacular. Increíble, verdad? Pues bien el siguiente plato fueron unos chipirones por importe de 17€ que apuntaba a ser una tapa y no ración. Según la camarera que nos atendió se trataba de una ración y que esa cantidad era la habitual y sin más nos cobro y continuó con su trabajo. Me frustra encontrarme con restaurantes que por tener una clientela habitual hagan este tipo de abusos en los platos. Y, lo peor de todo es que lo tienen normalizado. Os ha pasado esto alguna vez?. Finalmente no puedo despedirme sin mencionar la vajilla, muy pero que muy bonita. Espero haberos...
Read more