Restaurante Capitolina — Restaurant in Majadahonda

I had the worst risotto of my life in this so-called Italian restaurant. The dish - which at first sight, looked like a bowl of wet, undercooked rice - lacked both creaminess and flavor. Even though I asked our waiter to keep pouring on the parmesan, the risotto did not improve.

The 4 cheese gnocchi was bland, the lasagna only so-so, and my profiteroles were completely covered in a flavorless chocolate sauce that obliterated any possible enjoyment of the dessert.

Good things my party enjoyed on the menu: the bowls of ice cream (chocolate and vanilla), the troika (lemon vodka milkshake), and the provoletta with orégano and olive oil.

I will...

This restaurant offers a delightful blend of Italian cuisine with a hint of Spanish flavors. Every dish we ordered was a treat. My friend is a regular here, so the staff were particularly friendly and respectful, though I'm confident they extend the same warm hospitality to all their guests. We chose to sit outside, savoring the food while basking in the late summer sun and enjoying the gentle breeze. The experience was fantastic, especially considering the great value for money. With a history spanning nearly 40 years, it's clear that this place has earned its reputation for a reason. Oh, you must try their fragolatte,...

La Capitolina es un restaurante que me evoca los mejores recuerdos de cuando era un niño porque nunca se me olvidará lo rico que estaba este lugar desde que se inaguró como Gofredo, y cada vez que acudo ahora de mayor, me recuerda esos momentos, que unidos al presente, quedan incorporados como si el tiempo no hubiera pasado, pero con unos platos deliciosos desde entonces, que inventaron la napolitana que otros reinventaron hace poco como Cachopo, pero esa era la original, la más rica, con ese jamón y queso que se deshace en la boca, para los amantes de los sabores y de las delicias, porque todo estaba delicioso, desde eso hasta el pollo, y sobre todo, su especialidad, la pasta, que tiene desde ñoquis hasta spaghettis, macarrones, y ese toque picante si pides guindilla o todo al diabolo, porque entonces te sacan todo su arsenal escondido, con ese toque picaresco que si tocas más de la cuenta te sacan a bailar encima de una mesa como en un tablao flamenco, porque humor tienen, menos cuando trabajan, que son muy profesionales, y caminan para servirte como si fuera una pasarela en la que desfilan los mejores modelos, que son ellos, a los que miras como si estuvieras en una película, porque todo en la Capitolina es como una película, a mi, que no me pase como en Memento, que quiero acordarme de todo, de cada instante que pasé en este lugar fantástico, excepcional, sin igual, muchas gracias Capitolina por ser el lugar de mis sueños y de...