Sidreria Antolin — Restaurant in Navia

Acudi a comer pidiendo una reserva de mesa y hacer un encargo el mismo día (porque asi ponia en la carta) de una comida en este caso una paella de marisco, me dieron el ok y hasta ahí todo bien, 20 minutos de la reserva me llama el local para indicarme que les faltaba ingredientes para hacer dicha paella y que para hacer algo incompleto pues preferían no hacerlo y hasta ahí todo de acuerdo y logico y me recomendaron un caldo de marisco que es algo muy similar a la paella (esto me lo dijeron ellos mismos), aunque podían haberlo revisado antes los ingredientes de darme el ok horas antes y no justo hasta el último momento pero bueno... luego llegando ahí sentándonos en la mesa nos dice uno de los camareros que queríamos para comer y yo le dije que habíamos reservado la mesa con dicha comida que nos habían sugerido (no había muchas mesas ocupadas en ese momento) y tuvo que ausentarse para hablar con otro compañero de ello, entonces más adelante cuando nos estrega el encargo de caldo de marisco vemos que tenia más bichos (langostinos, gambas cangrejos) que el propio caldo y arroz, estaba bueno lo poco que había pero teniendo en cuenta que por persona nos cobro 20€ por las proporciones que ofrecían... y lo peor es que tenían caldo de marisco porque venía en el menú que costaba casi 16€ por persona que eso lo descubrimos cuando se empezó a llenar el local y los camareros lo dijeron a esos clientes, cuando a nosotros no nos lo menciono en ningún momento ni antes ni después de la reserva, mucho sentido no tiene cobrar un encargo 4 € mas cuando el menu estaba más barato y más cantidad por tener un segundo plato y un postre, no lo recomiendo y no volveremos por la falta de comunicación del servicio a los clientes e incluso al mismo equipo y la amabilidad careció de ausencia, espero que mejoren en todos los aspectos y que la gente que vea mis reseñas lo tomen en cuenta que si hay un menú bueno les sale más barato que un encargo y si hacéis un encargo le preguntéis que si de verdad hay ingredientes suficientes para...

Estuvimos en Semana Santa, un día de diario, comiendo y tuvimos una muy buena experiencia. Buena calidad y buenos precios. Este verano repetimos destino y quisimos comer de nuevo aquí. Llamamos por teléfono un rato antes y nos colgaron después de decirnos que estaba todo completo. Nos acercamos igualmente por si hubiera algún sitio en la terraza, y cuando llegamos había 3 o 4 mesas vacías. Eran las 15:30h. Preguntamos al único camarero que había si nos podíamos sentar en una de las mesas que había vacías. Nos dijo que sí y finalmente nos sentamos en una mesa que se estaba quedando libre justo en ese momento, bajo las sombrillas. Estuvimos 20minutos esperando a que nos atendiesen (recoger la mesa de los comensales anteriores), pero no nos quejamos porque sólo había una persona atendiendo a las mesas y habíamos llegado un poco tarde. El camarero se nos acercó y, mientras recogía, nos dijo de muy mala manera que nos habíamos sentado sin permiso. No le respondimos nada porque quizá sólo nos dio permiso para sentarnos en las mesas al sol y no en esta que justo se quedó vacía. A los 5 minutos volvió y nos repitió que nos iba a atender como pudiera y cuando pudiera porque nos habíamos sentado donde nos había dado la gana. MUY grosero. Nos levantamos y nos piramos de allí, después de que nos hiciera perder 30minutos de nuestro tiempo. Para próximas ocasiones le recomiendo a este restaurante que le enseñe a sus camareros que lo correcto, si no quieres atender a alguien, es avisar de que la cocina está cerrada. Simple, sincero y cortés. No volveremos más ni lo recomendaremos. Por los comentarios veo que mucha gente hace referencia al mismo camarero. Lo...

La comida muy buena y rápidos en servirla . Bajo la puntuación por el trato del camarero de la terraza ( el resto de camareros muy bien ) . Se agobia enseguida , contesta mal , y eso que tuvimos muchísima paciencia . El primer día súper bien ( con otra camarera ), repetimos porque nos gusto la experiencia , a la hora de comer preguntamos para comer fuera , nos dicen que sí pero que se lo digamos al camarero de fuera este nos dice que no , volvemos a entrar nos dicen que sí , y salimos y ya empieza malas caras , y todo pegas . Al final nos pone una mesa y se disculpa bueno OK … al día siguiente repetimos para la cena … y lo que vimos … nos sentamos y no nos limpia la mesa de los anteriores comensales …. Nos trae la comida sin el servicio … se lo pedimos , primera mala cara , le recordamos que cuando pueda nos limpie la mesa ( que no había hecho y ya teníamos todo ) y nos dice que no puede … y se pone a criticarnos con la mesa de al lado diciendo que no teníamos empatía , tuvimos suficiente paciencia ya que le tuvimos que estar recordando todo siempre con el por favor en la boca . La mesa de al lado le recuerda algo y les pone sonrisa se gira y sale poniéndolos a parir …. Un compañero tuvo que decirle que se relaje . Yo creo que sino te gusta la profesión cambie de sector , pero la gente venimos a pasar un rato tranquilo no a comer o cenar con tensión y malas caras . Mi recomendación entrar a comer o cenar puesto que está muy rico pero si podéis dentro y si venís con mascota como fue nuestro caso , en las mesas pegadas a la puerta en el exterior ya que él no es...