Arrocería Marisquería Restaurante Casa Santi — Restaurant in Roquetas de Mar

NO VUELVO A IR NI AUNQUE ME REGALEN LA COMIDA / I WOULD NEVER COME BACK EVEN IF THEY GAVE ME THE FOOD FOR FREE / JE N’Y RETOURNERAI JAMAIS, MÊME SI ON ME DONNAIT LA NOURRITURE GRATUITEMENT

El trato super basto de parte del trabajador que está en la entrada (al parecer el dueño). Le pedíamos la comida y no paraba de decir “eso no es comer” o “así no funciona” entre otras cosas, pero por su cara bonita debíamos pedir lo que él quería. Sin contar que no paraba de meterse conmigo solo por pedirle lo que nosotros queríamos comer y porque no era lo que él quería. Quiero decirte algo que sé que lo leerás, entiendo que quieras vender pero ESA NO ES LA FORMA, atosigando a los clientes y haciéndolos sentir incómodos, eso solo convierte tu restaurante en una m… de restaurante. También los trabajadores preguntando una y otra vez si queremos pan con Ali Oli (como 5 veces) no entendéis el NO GRACIAS? Por otro lado, el arroz negro fatal, eso era tinta con arroz, arroz para 3 personas con tinta para 7! Y super salado (creo que se quedaron sin sal en la cocina de tanto echarle al arroz) En fin, un lugar más para que se quede en el olvido.

Lo dejo en otros idiomas para que los turistas también lo entiendan 😘

The treatment from the worker at the entrance (apparently the owner) was extremely rude. We were ordering food and he kept repeating things like “that’s not eating” or “that’s not how it works,” among other comments — basically forcing us to order what he wanted. On top of that, he wouldn’t stop picking on me just because we wanted to order what we felt like eating and not what he wanted.

Let me tell you something, since I know you’ll read this: I understand you want to sell, but THIS IS NOT THE WAY. Harassing customers and making them feel uncomfortable only turns your restaurant into a crappy restaurant.

And the staff kept insisting, over and over again, if we wanted bread with aioli (about 5 times). Don’t you understand what “NO, THANK YOU” means?

As for the black rice, it was awful — just ink with rice. Rice for 3 people with enough ink for 7! And way too salty (I think you ran out of salt in the kitchen after dumping it all in the rice).

In short, just another place to forget.

Le service du travailleur à l’entrée (apparemment le patron) a été extrêmement grossier. Nous commandions et il n’arrêtait pas de répéter des phrases comme « ça, ce n’est pas manger » ou « ça ne marche pas comme ça », entre autres — en gros, il voulait absolument qu’on commande ce qu’il avait décidé. En plus, il n’arrêtait pas de s’en prendre à moi juste parce que nous voulions commander ce dont nous avions envie et non ce qu’il voulait.

Je veux te dire quelque chose, puisque je sais que tu liras ceci : je comprends que tu veuilles vendre, mais CE N’EST PAS LA FAÇON. Harceler les clients et les mettre mal à l’aise ne fait que transformer ton restaurant en un restaurant de m…

Et le personnel insistait encore et encore pour savoir si nous voulions du pain avec de l’aïoli (environ 5 fois). Vous ne comprenez pas ce que veut dire « NON, MERCI » ?

Quant au riz noir, c’était une catastrophe — juste de l’encre avec du riz. Du riz pour 3 personnes avec assez d’encre pour 7 ! Et beaucoup trop salé (je crois que vous avez vidé toute la réserve de sel de la cuisine dans ce plat).

Bref, encore un...

Antes de todo quiero opinar, que no me quejo por la comida ni por el servicio sino por el trato, ya que por lo que veo para este restaurante hay clientes de primera y de segunda.

Como he comentado, la comida y el servicio no es malo, son bastante simpáticos los camerer@s y atentos.

Nuestra mala puntuación es debido a que preguntamos para cenar, en la terraza, ya que íbamos con un perro, el cual se porta muy bien cuando vamos a comer, ya que lo hemos educado así y está bastante acostumbrado.

La sorpresa fue cuando nos dijo uno de los camareros, entendemos que el más "jefe", que no habría problema, pero que nos ponía en otra terraza, ya que en esta terraza había una familia con un niño de unos 9-10 años el cual tiene pánico a los perros.

Nosotros, accedimos con algo de molestias, ya que entendimos que era un problema personal del crío y que no tenía por qué afectar a los demás, pero por buena fe accedimos.

Nos pusieron en el pasillo entre los dos restaurantes delante de una portería de una casa, donde por suerte no pasaron muchos vecinos, pero perfectamente se podrían haber quejado y con razón cosa que no paso, o al menos que sepamos.

Estando alejados de la zona de mesas, solos y con menos luz, no estábamos mal, pero me molestó el gesto de desplazarnos a otra zona donde estábamos como "repudiados".

La cena pasó y cuando pedimos la cuenta el camarero "jefe" nos pidió disculpas, el cual dije que si esta familia tenía el niño con miedo a los perros, que se pusieran en la zona de la terraza "cerrada" donde yo no puedo entrar con perros.

El cual nos contestó y lo pondré textualmente: - El cliente nos ha pedido estar en la terraza de fuera para poder fumar y que no haya ningún perro, ya que su hijo le tiene miedo.

Yo comprendo que en una sociedad hay que tener paciencia y nosotros accedimos a estar en otro sitio para no causar problemas a un niño, pero esa respuesta es totalmente inaceptable... aparte que no se puede fumar en las terrazas exteriores.

El camarero viendo que metió la pata se fue argumentando que tenía que atender una mesa cuando yo le recriminaba que no es una actitud justa para los demás clientes.

Entendemos que la situación en la hostelería es delicada y puede que esa familia fuera asidua o gastara una gran cantidad de dinero, no lo sé, pero creo que tenemos que partir de la base de la educación y el respeto, y este restaurante no lo hizo ni para mí, ni mis familiares que...

Un desastre desde el minuto 1. Lo primero por las formas del dueño (supuestamente ) en cuánto a trato y profesionalidad se refiere. Quisimos pedir un arroz y vimos en la carta que los fines de semana hay que encargarlo, pues nos dijo que no, aunque era lunes. Seguidamente al ir a pedir (no teníamos mucho hambre), nos dice de malas maneras que si solo eso, que eso no es comer. Comentario desafortunado antes de empezar a comer. Las almejas que pedimos supuestamente a la marinera, un desastre, notabas la arena al comerlas. Luego el atún encebollado, lo único que se salvó pero sin más, iba acompañado de patatas fritas. No trajeron pan, hasta bien empezado a comer que obtuvimos que pedir (la bebida y el pan lo primero que se sirve , de 1° de hostelería). Tras acabar de comer, y esperar 15 minutos a que nos tomaran los postres, los camareros seguían desmontando mesas en vez de atender a las tenían comiendo ( de 1° de hostelería ). Y lo más bochornoso de la comida, que nunca había visto. El dueño se pasó mesa por mesa vendiendo lotería de navidad con 3 euros de recargo!! , y le dijimos que no queríamos y nos dijo : Pues así nunca os va a tocar, a seguir trabajando toda la vida!jajjaja, flipante, la jeta del paisano porque no le compramos la lotería. En fin sitio...