Me dirijo para manifestar una queja en relación con el trato recibido recientemente en su establecimiento, el cual solemos frecuentar con regularidad para merendar o cenar.
El día de hoy, mientras mis amigos me esperaban en una mesa con una consumición ya servida, fueron increpados de manera intimidatoria por parte del personal, exigiendo que todos los miembros del grupo realizaran un pedido en un plazo de cinco minutos o, de lo contrario, serían expulsados del local. Cabe señalar que, en ese momento, el local contaba con tan solo tres mesas ocupadas y el resto permanecía vacío.
Al llegar yo al lugar, y sin haber tenido aún la oportunidad de pedir, se nos instó a abandonar el establecimiento de inmediato. Ante esta situación, y en ejercicio de nuestros derechos como clientes, solicitamos una hoja de reclamaciones, a lo que el personal respondió de forma amenazante, advirtiéndonos que si procedíamos a presentar dicha reclamación, se nos aplicaría el derecho de admisión de forma permanente. Esta advertencia supone una coacción inadmisible y vulnera lo establecido en la Ley 11/2009 de Cataluña, en relación con la aplicación arbitraria del derecho de admisión.
Quisiera aprovechar esta comunicación para expresar también nuestro malestar por la falta de higiene y calidad del servicio en numerosas ocasiones anteriores: mesas sucias durante horas, restos de comida de otros clientes, cubiertos que no se proporcionan por estar sucios y, en diversas ocasiones, alimentos que llegan fríos a la mesa. A pesar de estos hechos, nunca habíamos emitido queja alguna, demostrando siempre nuestra buena voluntad como clientes habituales.
Es profundamente lamentable que, precisamente el día que decidimos expresar nuestro descontento, se nos amenace con impedirnos el acceso al establecimiento. Considero esta actitud absolutamente inapropiada, impropia de un negocio de atención al público y contraria a los derechos de los consumidores.
Solicito una respuesta formal por parte de la gerencia, así como una revisión de las prácticas del personal a fin de evitar que hechos como este se repitan...
Read moreHemos pedido dos o tres veces por JustEat y la experiencia con este restaurante ha sido nefasta. Hace un par de pedidos nos llegó la pizza TARDE Y QUEMADA. Cuando llamamos para decirlo nos dijeron que nos traerían una nueva y que teníamos que devolver la quemada (supongo que para comprobar lo que decíamos). Tardamos otros 45min en que nos llegara la segunda pizza, la cual vino con el comentario del repartidor diciendo que la pizza se había quemado porque la habíamos pedido de masa fina. No dábamos crédito y evidentemente ninguna disculpa, simplemente la recomendación de que si no queríamos que volviera a pasar, pidiéramos la masa normal. Con todo esto no pusimos reseña y comimos casi a las 17h. Cuál ha sido nuestra sorpresa que hoy, dando otra oportunidad, hemos vuelto a pedir por JustEat, el cual nos proporciona un tiempo estimado del pedido. Cuando se habían pasado 30min del tiempo estimado hemos llamado al restaurante. En primer lugar nos han negado que hubiera tal pedido, al cual yo le he respondido que el pedidos estaba confirmado. Cuando se ha dignado a comprobarlo me ha dicho que, evidentemente, el pedido se había confirmado pero que allí nadie se había encargado de hacerlo, por lo que me ofrecía empezar a hacerlo en ese momento. Obvio no quería volver a comer a las 17h y le he dicho que ya no quería el pedido y que estaban muy descontenta con el servicio. Ni siquiera he recibido una disculpa. Me ha dicho que cancelara desde la APP y me ha colgado. Ni volveremos a pedir en este restaurante ni volveremos a ir...
Read morePongo una estrella porque no puedo poner cero. Mis amigos y yo solemos acudir con frecuencia a este establecimiento, ya sea para merendar o cenar. Hoy, estábamos sentados con una consumición en la mesa. Sin embargo, un empleado nos ha advertido de forma amenazante que, si no hacíamos un pedido completo todos en un plazo de cinco minutos, seríamos expulsados. Efectivamente nos echaron. Cabe destacar que, en ese momento, solo había tres mesas ocupadas y el resto del local estaba vacío.
Más tarde regresamos para solicitar una hoja de reclamaciones, y nos respondieron con una actitud hostil, amenazándonos con aplicar el derecho de admisión de forma permanente si presentábamos la queja, lo cual es ilegal según la Ley 11/2009 de Cataluña.
Quisiera añadir que, en todas las ocasiones anteriores en las que hemos venido, hemos encontrado las mesas sucias, con restos de comida durante horas. Tras hacer el pedido, nunca limpian la mesa. En más de una ocasión, ni siquiera nos han traído cubiertos porque, según decían, todos estaban sucios. Además, la comida suele llegar fría. Incluso utilizan productos caducados y en mal estado sin ninguna preocupación por la salud de sus clientes.
A pesar de todo esto, nunca habíamos presentado una queja hasta hoy. Y precisamente ahora que lo hemos hecho, nos amenazan con vetarnos la entrada al local. Me parece una actitud completamente inaceptable.
Si decido no volver es porque yo quiera, no porque me amenacen con no volver a entrar por...
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