Restaurante Carmen Playa — Restaurant in San Javier

Me encantará que hagan ustedes el ridículo yendo a la policia con mis opiniones, aquí o en cualquier red, personales, inofensivas, lícitas, correctas y sin ningún insulto. La policía está para cosas serias, no para egos ofendiditos.

Había leído sobre el restaurante y fue una decepción total. Te recomiendan los platos más caros y casi te fuerzan a pedir lo que ellos quieren. Raciones mínimas y sabores nada sorprendentes. Se salvan el gazpacho de nísperos (te ponen cuatro cucharadas literales) y la berenjena con miso y queso. Nos recomendaron un paté de pimiento muy amargo que no nos gustó nada y una cherna con una salsa de espárragos muy láctea, que sólo sabía a nata. El pescado quemado y escaso. Íbamos a probar el sando de solomillo y membrillo, y, por su cuenta y sin pedirlo, le añadieron foie. 33€ cada sándwich, que para mi gusto no los vale. Pasamos mucha vergüenza porque habíamos elegido nosotros el restaurante pero los amigos que nos acompañaban se empeñaron en pagar. 175€ por comer poco y mal 4 personas. Y quien dude de mi palabra, que vaya y compruebe. Un restaurante que morirá de éxito porque no busca dar bien de comer a sus clientes sino forrarse a costa de ellos. No volvería ni invitada. Respuesta al propietario: Sería beneficioso para el restaurante aceptar las críticas de los clientes a los que no nos gusta la comida aunque "traigáis el carbón de Japón" o paseéis el pan de masa madre 1 hora en coche, o pensamos que lo que ofrecéis no vale lo que pagamos. La humildad es fundamental para mejorar, y el buen trato al cliente, tan importante como lo que se da de comer. Es lamentable ver las respuestas maleducadas, soberbias y llenas de rabia a cada crítica negativa. Puntualizar que no hay más que ver las fotos que hice de los platos para comprobar que la cantidad del gazpacho era ridícula y la cherna estaba quemada. Y es imposible que una salsa con un 5% de nata sólo sepa a leche. El sando de solomillo estaba muy bueno. Dije que pedimos el normal, sin foie, y nos pusísteis el de 33€ porque os dió la gana. Eso es ir a hacer caja, y es muy desagradable tener que estar pendiente de que no te metan extras que no has pedido pero te cobran. Y en cuanto al precio, 45€ por persona estaría muy bien si hubiésemos comido, pero compartimos un pescado de 200gr. y un sandwich para cuatro personas, con 3 gazpachos, 1 gilda, un paté de pimiento y 2 trozos de berenjena. Sin postre. 1 botella de vino y 3 cafés. Un aperitivo por 175€. Vivimos en Madrid y comemos MUY BIEN por ese precio en restaurantes muy buenos y llevados por personas serias que no desprecian, insultan o se ríen de quienes les permiten vivir de su negocio. Espero que nuestro dinero os sirva para vivir un poco mejor aunque seáis tan desagradecidos. Decir por último que por comentar cada plato con fotos, seriamente y con educación, según MI CRITERIO en Instagram, me bloquearon para que nadie pueda ver mis opiniones. No me cabe duda de que, si pudieran, lo harían aquí. Como no pueden, se dedican a desprestigiar y a humillar. Se retratan con sus respuestas a las reseñas negativas. Una pena, porque son muy jóvenes y no están dispuestos a aprender. Respuesta al propietario: Invitar a opinar sobre su restaurante porque ustedes me bloquean y censuran NO ES ACOSAR. Y en mis palabras no hay ningún insulto. Dediquense a trabajar o a leer para no cometer tantas faltas de ortografia y no pierdan el tiempo. Sus capturas tienen poco recorrido.... Son mis opiniones en un pais con libertad de expresión. Yo también tengo capturas de sus, éstos sí, insultos y amenazas a sus clientes. ¿Qué tal decir que van a poner malas reseñas en la empresa de surf de un cliente al que simplemente no le ha gustado su comida?. Tal vez yo sí me anime con pruebas a denunciar ante la oficina del consumidor sus intimidaciones a mí y a otros clientes. La expresión "morir de éxito" siginifica que te va tan bien que termina por irte mal... No tengo la culpa de su ignorancia sobre términos corrientes del lenguaje que ustedes tergiversan...

Mixed feelings! Great food (outstanding dishes I’d dare to say), but really slow kitchen (waiting 20-30 min from one to another, being specially remarkable the last one, which was the most delicious, but the longest waiting period above 50 min. Consequently, this was lowering our level of satisfaction gradually..) After all, it was sad to have that experience (especially because the food was excellent), so very politely, I asked to the owner to better understand if they had had any issue with staff attendance that night which explained the slow service… and the reaction was so defensive, a bit rude I’d say, and that’s actually what it’s really sad, offer a great food but not having the right attitude to receive feedback and learn from it. Looking at other bad reviews, I kind of understand why there are very few of them… the level of aggressiveness in the answers is even scary, so I fear there many more users who probably faced a disappointing experience but they don’t dare to publish it here (or even they have been forced to delete it so they avoid further problems..). This never must be the way, it should be always reported, and that’s actually the reason why I’m leaving this long but useful review for...

En unos cuantos años Carmen Playa, un pequeño espacio de Santiago de la Rivera, donde apenas comen sentados en su interior 18 personas en mesa, y unas cuantas más en barra, con la terraza que sí tiene cabida para más personal, se ha consolidado como una de las propuestas gastronómicas más activas, disfrutonas y mejor concebidas de la costa murciana. Una carta corta que puede manejar con soltura el gran cocinero Javier Zapata que no necesita de grandes aspavientos para mostrar que las ideas no sólo estén en el entorno, sino que lo externo puede ayudar a que el entorno brille. En la carta del 20/22 de Junio pude comprobar que lo externo, currys, cebiches, alimentan mejillones franceses de notable calidad, una ostra acebichada, una viera con panceta, o un clásico reciente, como el bogavante con huevos fritos mallorquín al que suma un suculento curry que lleva a la boca a un disfrute largo y fresco. Uno de los puntos más fuertes de Carmen Playa es la dinámica carta de vinos, con productos intachables, servidos en copas al servicio del vino, que no hacen sino alargar el placer de sus generosos, champagnes o vinos. Importante carta que sabe donde mirar y con alegrías por copas sueltas, que siempre suponen al comensal viajes minúsculos pero de profundidad. Se percibe en sala, de la mano de Carmen, hermana del cocinero, una continuidad que van consiguiendo que el espacio sea menos rígido y más acomodaticio a las situaciones que pueden producirse es el pequeño y acogedor local. El cliente viene a disfrutar y desde los propietarios hasta el personal, cada vez más calificado y con grandes conocimientos sobre el mundo del vino y de lo que nos vamos a encontrar en los platos, lo que consigue que las visitas a Carmen Playa sean siempre agradables y educativas. Buen pan para con una corteza estupenda y de amplia miga densa mojar en las estupendas salsas que acompañan algunos platos. Interesante selección de quesos para poder acabar la comida. Muy inteligente sus tres aperitivos mientras esperamos que se complete la mesa, o mientras se elige que se comerá. Cada vez más afinados, Carmen Playa es una propuesta lúcida, desenfadada. Un espacio donde la calidad del producto se paga. Y que saben que no tienen límites. Siempre es un placer regresar a su mesa y compartir unas...