Restaurante Finca Santa Luzia — Restaurant in Sant Joan d'Alacant

Mixed feelings about this place as we visited twice and the experience was very different.

The first time we visited in september and were seated outside in the garden. The service was great, the garden is amazing and the food absolutely fantastic. It has everything you’d expect from an al fresco dining experience.

The second time, we visited in november and were seated inside as the garden was closed as temperatures have cooled down. However with heaters you could use the garden I believe. Inside, the atmosphere is not nice at all. The lights are way too bright and do not accommodate a cozy intimate evening as the garden did. Just switch off the lights, put candles on the tables and play some nice music. For some reason the service was way less personal and friendly like it was in september. The food remained very good though and would be the reason why I’d give this place another shot.

In summary, I would only visit in and around the summer when they open the garden for dinner and would never come back to have my...

Mi pareja y yo decidimos ir a celebrar su cumpleaños a la finca Santa Lucía ya que aún no la conocíamos y a mi personalmente me gusta torre de rejas. El trato de los camareros súper deficiente, no puedes llamarlos porque te ignoran, para que nos tomasen nota tras estar esperando 10 minutos a que alguno nos mirase tuve que estar levantando la mano hasta que porfin logre que uno de ellos me viese y viniera, poder pedir una segunda bebida se hace muy complicado ya que no te miran ni cuando pasan por el lado y se ve claramente que la cerveza está retirada y vacía, logre una vez más que nos mirasen y poder pedirla, la tercera ya ni nos molestamos porque iban de un lado a otro sin mirar por lo que mi pareja se quedó sin poder beber desde más de la mitad del arroz, tras terminar el arroz estuvimos 20 minutos de reloj apoyados con los brazos cruzados en la mesa sin que ningún camarero se acercase y más cuando nos dejamos bastante de arroz(estaba muy bueno, fue porque ya estábamos llenos pero podía no haber sido el caso) la única persona amable y que se dignó q preguntar qué tal fue la recepcionista al traer la cuenta y la cual consideramos muy amable pero he de decir que el trato por el resto de camareros deja mucho que desear pero con nosotros ya que he de decir que no se porque a nosotros no nos hacían ni caso ni estaban pendientes de si queríamos más bebida o ya simplemente mirarnos y fijarse que los estamos mirando porque necesitamos algo, nos sentó muy mal ya que como he dicho vimos cómo con otras mesas no tenían este trato y no entendemos si es porque éramos una pareja joven o que pero nuestro dinero vale igual que el del resto de comensales que estaban allí comiendo y al que si que le ofrecían un buen servicio con esto no digo que nos hablasen o tratasen mal simplemente nos sentaron en una mesa y nos ignoraron por completo, obviamente no volveremos ni lo recomendáremos por eso este motivo Añadir también que no lo hice en el comentario que deje en tripadvisor que no nos decidimos a tomar el postre en este lugar debido al trato y también que somos una pareja que siempre dejamos bote tras pagar la cuenta ya que creemos que siempre es agradable recibir una gratificación por tu trabajo pero obviamente no dejamos nada ya que considerábamos que no habían realizado correctamente su trabajo ni nos merecíamos...

Fuimos 5 personas por una ocasión especial y no pudo estar mejor la comida. Como entrante pedimos el dúo de ensaladillas (rusa y de merluza, riquísimas ambas), croquetas de jamón ibérico, quesos, morcilla y manitas y quisquilla, y buenísimas todas. También está muy rico el pan artesano acompañado de aceite. Como platos pedimos el arroz de papada de cerdo con verduras (lo único que no nos convenció), rabo de toro (muy rico, pero muy potente el sabor a vino en la salsa), paletilla de cabrito a baja temperatura con patatas panaderas (espectacular, súper sabroso) y solomillo de Angus con pimientos confitados (espectacular también, con mucho sabor). Como postres pedimos la tarta de queso cremosa (riquísima) y la nube de chocolate (tarta de la abuela, muy rica también). Es verdad que tiene un precio elevado, pero dada la calidad de la comida merece la pena. —————————————————————————— Hemos vuelto en otra ocasión y nuevamente un gran acierto. Para empezar pedimos pan artesano (imprescindible, blandito y crujiente a la vez), marinera con anchoa del Cantábrico (rica, pero no repetiríamos), ensaladilla de merluza (buenísima, un imprescindible, sabe realmente a lo que promete) y croquetas de jamón ibérico y de quesos con mayonesa trufada (no hubo acuerdo de cuáles están mejor ya que ambas nos encantaron a todos). Seguimos con una pinsa de tomate, jamón de pato, pera, burrata y rúcula (muy rica, pero muy escasa de jamón y elevada de precio para su tamaño), steak tartar de vaca madurada (buenísimo) y tartar de atún rojo con cebolla tierna y miel de trufa (aún mejor que el de vaca). Finalmente pedimos carrillada de ternera con parmentier y chutney de mango (nos gustó, pero el mango casi no se aprecia) y solomillo de vaca con pimientos del piquillo confitados y patatas (el punto de la carne perfecto y los pimientos buenísimos, además de notarse mucho el sabor del solomillo). En esta ocasión no pudimos pedir postre, pero todos los que hemos probado otras veces han sido un acierto. Seguiremos volviendo sin...