Restaurante Playa Mont — Restaurant in Tazacorte

It is an open air restaurant near the beach. Arrived around 3 pm. At the entrance we were directed to the bar to register for a table. The place was quite full although maps listed it as less busy than usual. Time waiting for service was fair considering the number of customers. We ordered the Spanish Tortilla as an appetizer, bread, fish and seafood plate for two (sorry forgot to photo), Canarian potatoes, mojo rojo, and ali-olio. The food was good. The fish wasn't deboned or descaled. Due to the concentration necessary to eat the fish, the rest of the meal was no longer warm. After the meal we had a cappuchino which was more like hot chocolate and a barranquito. All in all wth two cokes and bottle of water, the bill came to 70 Euros. Menus are available in English, German and of course Spanish. Restrooms were clean....

We stayed on the island not far away from Tazacorte and made of this restaurant our usual place for having lunch. It was extremely clean, the food was very good and the prices were very reasonable. The staff was very polite and the service was very good. We went to two other restaurants, but they could not compare to this one, even if they had similarly good reviews. We enjoyed very much the fish platter for two. The fish was very fresh and delicious. We also liked very much the small calamaris a la plancha. Padron peppers were also delicious. I highly recommend...

El restaurante es muy bonito y la ubicación es perfecta, junto a la playa en una esquina privilegiada.

Los precios son algo elevados, sólo por el simple hecho de que te cobran hasta las salsas y mojos que suelen acompañar gratuitamente a los platos.

El camarero que nos atendió fue muy amable en todo momento. Le dijimos que, a excepción del queso frito y las papas arrugadas que nos gustaría tenerlo al principio como un entrante, el resto lo trajera todo junto para que todos nosotros (4 personas) comiéramos a la vez.

Así se cumple, y cuando nos traen (entre él y otro camarero) todos los platos, a excepción del pescado que pidió mi madre. Pensamos que están a punto de traerlo y comenzamos a comer. El pescado se retrasa tanto que vamos por la mitad del plato y mi madre sin comer.

Pasa por nuestra mesa el segundo sonriente camarero que entró en escena al traernos los platos. Le preguntamos por el pescado y fue a ver en cocina cómo iba la preparación y por qué tardaban tanto. Regresó y nos dijo que el pescado estaba en la freidora. Mi madre, en tono DE HUMOR, le sonríe y le responde que pensábamos que lo estaban pescando, que seguro que era fresco fresco. Ese camarero se transforma en otra persona y empieza a GRITARLE a mi madre que "su madre hacía lo que buenamente podía dentro de la cocina, que hiciéramos el favor". Nos quedamos en shock, y mi madre le respondió que era un broma y que se lo tomara con calma.

No puedes gritarle a un cliente de esa manera, tengas o no tengas la razón, sin venir a cuento y menos aún cuando todos tratamos la situación como una broma. Si a ese camarero le preocupa su madre en la cocina, a mí me preocupa que no se le falte el respeto a la mía. Con no...