No suelo ser participe de polemicas o comentarios pero siendo testigo de lo que ayer acontecio me veo en la obligacion moral de reflejar mi experiencia siendo espectador directo de lo sucedido en relacion al comentario de patricia sierra. Nos encontrabamos cenando en una de las mesas de al lado y un chico amabilisimo y simpatico con una gran sonrisa en la cara atendio a estas personas con su mejor voluntad y todo lo rapido que pudo aun teniendo el local absolutamente lleno. No fue vacilon y mucho menos irrespetuoso, tan solo cercano y confianzudo intentando dar un trato mas cercano y familiar a los clientes ( sin darse cuenta con sus 17 añicos que hay gente que no esta dispuesta a recibir una gran sonrisa siendo atendido en vez de malas caras y desden); esta señora reclamo la actitud del chaval a la propietaria de una manera absolutamente soez y altiva provocando la reaccion tanto de la dueña como de las mesas aledañas; si bien es cierto se les insto a abandonar el local ( lo minimo); tan solo decir q fuimos varios los testigos que ademas participamos en la discusion defendiendo al chaval evidentemente por la injusta reaccion de estos clientes; sigue asi chavalico, no te dejes mellar por gente asi que por desgracia encontraras mucha a lo largo del camino, gente sin mas ganas que las de quejarse hasta del mismo aire que respiran. Añadir por ultimo que en ningun momento la dueña profirio insultos ni descalificaciones y reitero fuimos varios los testigos que corroboramos tanto su actitud como la del camarero, aunque si es cierto que fruto de los nervios la discusion se elevo de tono por ambas partes de igual manera. En fin aqui dejo mi testimonio en honor a la verdad de los hechos , y recomendado este restaurante al q sin duda alguna volvere todas las veces que me sea posible para disfrutar tanto de su cocina como de su equipo de trabajadores