Cueva Miñambres — Restaurant in Valdevimbre

Fuimos a cenar 4 personas un viernes a las 22h , destacar que todas las cuevas de Valdevimbre estaban abarrotadas por lo que nos fuimos a Miñambres, no habia en el parking más que los coches de los empleados, nadie cenando dentro, entramos y decimos que queriamos cenar, nos sientan y nos dan la carta, decidimos pedir unos entrantes y de segundo 2 paletillas de cordero y 2 solomillos, la morcilla estaba acida y cruda, alli quedó, las paletillas sabian a todo menos a cordero y sabian raras, los solomillos estaban grisaceos y sabian raro tambien, ya no quisimos ni postres ni cafe ni nada, pagamos 176€ y nos quejamos de la comida malisima, un camarero joven de unos 25 años se disculpó, ahora viene lo peor, al día siguiente por la mañana me encuentro muy mal, sudores en frío y empiezo a devolver y una diarrea y un dolor de tripa terrible, a la hora empieza mi mujer igual que yo, inmediatamente llamamos por telefono a la otra pareja que nos acompaño y estaban exactamente igual, tuvimos que ir a urgencias y nos pusieron inyecciones y nos recetaron sueros y medicamentos, nos dijeron que era una intoxicación en toda regla, nos recomendaron denunciar a la cueva Miñambres, uno de mis acompañantes se puso en contacto con un amigo que es guardia civil de seprona y la sorpresa que nos llevamos es que hace poco tiempo , en una inspeccion ,les pillaron comida en mal estado , lo que no entiendo es como aun sigue abierto al publico ya que es un peligro jugarse la vida en esta cueva y encima pagando por ello, lamentable, deberian encerrar al dueño en la carcel por que estoy seguro que a mas gente les habra pasado lo mismo que a nosotros.Nunca más volveremos ni recomiendo que nadie se...

Tienen un gran problema con la cocina y su organización. Aceptan más reservas de las que pueden gestionar y eso se traduce en un ambiente lleno de gritos(sin importar que los clientes los escuchen)y de hostilidad entre los camareros. Tras casi dos horas de comida, rogando que nos trajeran los entrantes, aunque fuera de uno en uno,salimos de allí con sólo éstos servidos, pues cuando reclamamos las paletillas que habíamos pedido de segundo (después de ser muy muy pacientes) el camarero nos dice que no tienen y que otro camarero se las ha "quitado"...obviamente no íbamos a esperar otra hora para que nos trajeran otro segundo. Las croquetas congeladas por el centro. Las devolvimos y después de pasar por el microondas volvieron a la mesa. La tortilla guisada saladísima y la tabla de embutidos y la ensalada bien, pero es que no hay mucho margen de error en esos platos, la verdad. Por lo que pudimos oír por los gritos en cocina ,lo de las croquetas y la tortilla fue una tónica habitual en el servicio. Los postres (para intentar llenar el estómago con algo) son para denunciar también....la torrija era pan seco con mucho sirope de chocolate(normal porque si no no hay manera de tragar eso), la leche frita insípida y la tarta de la abuela mala(y mira que es complicado hacer esa tarta mala....). No tuvieron el detalle ni de regalarnos dos cafés de puchero que pedimos( aunque es verdad que poco arreglo iba a suponer eso)....en fin una experiencia bastante negativa y cero recomendable. Hay otras cuevas con mucha mejor cocina y servicio en Valdevimbre a las que ir si quieres pasar un rato agradable...

La comida estaba buena, pero se lleva 2 estrellas por varios detalles que nos dejaron con mal cuerpo. Por una parte, preguntamos por un entrante de puerros y nos dijo la mujer que parecía la encargada que venían 4, así que pedimos 2 porque éramos 6 para comer, y cuando nos trajeron los puerros venían 3 en cada plato. Su justificación fue que eran más grandes, pero en uno de los platos uno era diminuto y los otros dos medianos. Menos mal que no tenían gente, sino igual nos ponen 2 puerros en cada plato. Luego quisimos pedir tortilla de patatas, pero la mujer no paraba de decirnos que tardaba más de media hora en hacérnosla, como si eso fuera un inconveniente, y con un tono un poco desagradable, la verdad, así que no la pedimos por no discutir con ella. Finalmente preguntamos por la guarnición que acompañaba la paletilla, que era la especialidad del día, y nos dijo que venía acompañada de patatas. Cuál fue nuestra sorpresa que cuando llegaron las paletillas, venían con media patata asada cada una. Muy triste la verdad. Cuando pedimos el café, pedimos 6 cafés, y nos advirtieron que era de puchero, lo que no nos dijeron es que nos iban a poner una tetera pequeña de infusión con café y otra con leche de ese mismo tamaño para los 6. Y como colofón final los aseos, el de mujeres estaba sucio y no había papel en ninguno de los dos cuartos que había. Y como digo, no tenían gente para comer, y camareros eran unos cuantos, pero por lo visto lo de reponer papel y mantener el baño un poco decente no es su tarea. No repetiremos, y tampoco lo...