Sidreria Los Trabancos — Restaurant in Valladolid

Anoche teníamos una reserva para cenar en este restaurante después de una función de lo cual avisamos cuando hicimos la reserva y nos indicaron que no habría problema en llegar un poco mas tarde, la función acabo mas tarde de lo esperado y al salir nos pusimos en contacto con el número en el que realizamos la reserva para preguntarles si aun podíamos ir ya que acabábamos de salir, la persona que nos atendió muy amable nos digo que si que no había problema le indicamos que estábamos casi al lado que tardábamos 5 minutos, así fue nos presentamos en el restaurante y un camarero estaba en la puerta nos acercamos y le dimos las buenas noches y le indicamos que teníamos una reserva, sin dejarnos continuar hablando nos interrumpió y de muy malas maneras nos dijo que llegábamos tarde y que ya no nos podía atender, le intentamos explicar que lo sabíamos y por eso habíamos llamado y siguió igual sin dejarnos explicarnos, cuando ya le explicamos que habíamos hablado con alguien por teléfono y que nos habían dicho que no había problema nos dijo que no sabia con quien habíamos hablado, al principio incluso haciéndonos ver que con ellos era imposible que hubiéramos hablado, pero que no nos podía atender, le dijimos que no nos precia normal que tras hablar con alguien nos acercásemos y nos tratasen así nos dijo que habría sido su jefe que no esta ahí y que no saben ni como están, que no nos iba a atender, después de decirle que habría sido él, intento recular pero de muy malas formas y medio amenazando nos indico que podríamos sentarnos a cenar si queriamos “pero que tendría que ser rápido y mal” y que teníamos 10 minutos, le dijimos que con amenazas menos, que nos íbamos pero que se lo haríamos llegar a la persona encargada del trato recibido. La persona que nos atendió por teléfono muy amable pero tendrían que tener mas comunicación entre ellos, y por supuesto no tener a gente mal educada y borde trabajando con ellos que no dejan ni que el cliente explique una situación interrumpiendo todo el rato sin dejar hablar y amenazando con el servicio. Esta claro que ni siquiera intentaremos ir otra vez. El trato de el camarero ahí presente horroroso….

Y por lo que se puede apreciar en su respuesta “llevo esperando su reseña desde ayer” ademas de maleducado presencialmente, mentiros y prepotente, nos dijo claramente que la cocina cerraría en 10 minutos y teníamos ese tiempo para...

Anoche fuimos un grupo de 10 personas a cenar con una reserva, pedimos el menú sidrería de 25€ y a mayores pedimos la “barra libre” de sidra que son 3€ más según teníamos entendido y según nos confirmó el camarero.

Hay que ser justos y la verdad es que la comida es abundante y, bajo nuestro punto de vista, buena.

La primera cosa que molestó a uno de nosotros es que se viese obligado a pagar los 3€ de la “barra libre” de sidra como todos los demás a pesar de no poder beber alcohol, no le dimos mayor importancia porque podíamos aceptar ese gasto extra entre los demás a pesar de parecernos ilógico. Al llegar al postre no nos quedaba nada para beber y quisimos pedir dos botellas de sidra, el camarero al pedírselas nos dijo que teniendo el postre en camino no podía traernos más sidra a pesar de haber pagado el extra de la “barra libre”. Aquí es donde, sin ser tampoco algo gravísimo, uno se para a pensar en qué te venden como “barra libre”. Bajo nuestro punto de vista esta oferta consiste en poder beber lo que se pida mientras se esté comiendo, podemos estar equivocados pero a nuestros ojos consiste en eso. Aún así, en nuestra opinión, no bebimos una cantidad exacerbada de sidra como para negarnos un par de botellas al final de la cena.

El resultado: una mesa de 10 comensales saliendo a un total de algo más de 300€ con un mal sabor de boca por el trato recibido después de esos dos “feos” que recibimos por valor de unos 10€, algo que lejos de parecernos lógico, nos parece más bien absurdo. Cada uno puede sacar sus propias conclusiones pero desde luego que para nosotros, a pesar de la calidad/cantidad de la comida, van a ser negativas por esos detalles que de no haber existido habrían hecho de la cena algo para repetir sin lugar a duda.

¿Son más valiosos esos 10€ de “ahorro” para el local que 10 impresiones negativas del...

NO RECOMENDABLE. Leer tranquilamente. Teníamos reserva con días de antelación y nos pone en sillas de plástico de chiringuito incómodas, sobre césped artificial lleno de restos de hojas y polvo. Pedimos menú cachopo engañoso en el precio total lo cual es de 44€ dos personas en terraza no 22 como pone en la carta. A la hora de pedir la bebida ( botella de sidra) le pedimos al camarero que si nos podía traer un escanciador eléctrico a lo que responde "que no les permiten sacarlos a la terraza por qué los roban" dando por hecho y sin conocer a la clientela que lo robaríamos. Nos ofrece un "barrilete" de malas formas que es un escanciador eléctrico como el que habíamos solicitado en un principio. Que posteriormente al finalizar la comida tardó en recogerlo e insistimos en que lo retirará para que no lo "robáemos". No sorprende que roben los escanciador es por el pasotismo y mal hacer de camarero. La comida deja mucho que desear en general, la ensalada de la casa en vez de refrescar una comida contundente hace lo contrario ya que es muy dulce. Fresas, frambuesas y grosellas en almíbar junto con sirope dulce lo cual empalaga más. NO LA TERMINAMOS. El cachopo de 1kg aceitoso y muy pasado. Ni comparación con los verdaderos asturianos. Los chopitos bien, sin tirar cohetes. Patatas al Cabrales pasables. Y las vieiras deberían de avisar que están rellenas de bacalao. Todo esto unido a las voces del camarero (delgado y con moño) cuando se dirigía a nosotros para explicarnos las cosas y la suciedad vista en la cocina al ir al baño fue el resultado de una mala elección para ir a comer en familia. NO...