Roda Gigante de Balneário Camboriú

Fuimos con mi pareja y nuestras dos hijas para conocer la famosa rueda de la que tanto se habla. Sin embargo, no la encontramos espectacular ni nada por el estilo. Subimos en la noche y la vista era bastante regular, tal vez de día sea mejor, pero de noche no había mucho que apreciar realmente. Pensé que sería más impresionante. En cuanto al recorrido, estuvo bien, aunque un poco lento. Tuvimos tiempo para sacarnos fotos en diferentes poses adentro, lo cual nos gustó mucho para el recuerdo.

Es importante mencionar que había llovido un poco durante el día, por lo que los vidrios estaban empañados. Ahora que no estaba lloviendo, el aire acondicionado del interior había provocado que los vidrios no estuvieran tan claros para apreciar bien la vista exterior. Eso nos decepcionó, ya que la vista estaba borrosa.

En cuanto a la atención al comprar las entradas, fue muy rápida y la persona fue extremadamente amable. Quiero destacarla porque incluso le regaló a mi hija, que es autista, un cordón de girasoles con fondo verde. Pensé que era solo para llevar la credencial que tiene, pero unos días después alguien me mencionó el significado. Encontré muy lindo que nos lo diera. Hemos estado en varios lugares y nunca nos habían informado sobre esto. Agradezco mucho a esa persona y quería destacarlo.