En el parque de Belén rondan las historias del tranvía, el teatro Mariscal, la fábrica de cigarrillos Cruz, la lavanderas de la quebrada Altavista y las citas de los novios en las heladerías y estaderos que alegraban ese sector del occidente de Medellín.
El miembro de la Academia Antioqueña de Historia Germán Suárez Escudero opinó que Belén fue el epicentro de la conquista del Valle de Aburrá, porque en el sector de San Bernardo (calle 25 con carrera 77, donde funcionó el Preventorio de Medellín) había un poblado indígena al que llegó, en agosto de 1541, el conquistador Jorge Robledo, quien estuvo en el lugar durante 15 días, tras hacer amistad con los aborígenes.
Luego, en 1550, este sitio le sirvió de hospedaje al también conquistador español Hernando de Cepeda y Ahumada, hermano de Santa Teresa de Jesús, la Doctora de Ávila, quien fue enviado desde Popayán por su suegro, Sebastián de Belalcázar. En ese lugar, Céspedes construyó la primera capilla de lo que posteriormente sería el poblado de Guayabal (otros historiadores lo llaman Otrabanda) y el templo recibió ese nombre.
Agregó que para la época de la Independencia, la zona de la plaza de Belén pertenecía a una familia de apellido Pérez, y el sector se llamó “llano de los Pérez”. Estos construyeron allí una capilla consagrada a San Juan de Dios. En 1814 esta capilla es mejorada y erigida en parroquia de Nuestra Señora de Belén por el vicario superintendente de la Arquidiócesis de Popayán, Lucio de Villa. Su primer párroco fue Juan María Céspedes (1814-1815), sucedido por el sacerdote Pedro José Pérez.
Concluyó Suárez que Belén, hasta finales del siglo XIX, perteneció a la ciudad de Anápolis, ubicada en el sector de Robledo, que fue arrasada en su totalidad por la quebrada La Iguaná, el 23 de abril de 1880, la cual tuvo casa consistorial a la que perteneció el templo de Belén.
Indicó que entonces el centro de Belén estaba urbanizado hasta lo que hoy es la carrera 80 y no existía La Palma.
Dijo que para ese año se llegaba al parque de Belén por la calle 30A o por el tranvía, que tenía una estaciones en la calle 30 con la 76, y la última quedaba en el sector de lo que hoy es Los Molinos. El tranvía pasó por allí de 1922 a 1951.
Recordó que en los años 50 había varias casas de material de dos pisos y quedaban unas pocas de tapia.
En la esquina de la carrera 76 con la calle 30A fue construido, a mediados de los 50, el teatro Mariscal, que desapareció a finales de los 70 para darle paso a un banco, contó.
Jorge Restrepo, otro habitante del centro de Belén, desde 1961, agregó que hasta 1998, en la carrera 76 con la calle 29, se observaban, en la quebrada Altavista, las famosas lavanderas de Belén.
El médico y escritor Emilio Restrepo, autor de Las Crónicas de Belén, se lamentó de que la vida social nocturna del parque de Belén no hubiera logrado pasar al Siglo XXI.
“Desde comienzos de los 90 empezaron a desaparecer y dar paso a bancos, oficinas, panaderías y almacenes, los bailaderos Soraya y Palmaseca y las heladerías, sitio de encuentro de los novios de Medellín, El Portal, Los Sauces, La Tampa y Morival.
También se perdieron el kiosco del parque y la caseta de tax Belén.
Otro ícono de Belén en los mediados del siglo XX fue la fábrica de cigarrillos Cruz 114 y Victoria, ubicada en la calle 30A con la carrera 73. Los cigarrillos con filtro la sacaron del mercado.
El conductor Francisco Álvarez destacó que en esta empresa trabajaban muchos jóvenes del centro de Belén.
Álvarez anotó que su padre, Alfredo Álvarez, fue uno de los primeros transportadores de Belén con buses de escalera modelos 39, 46 y 50. Las chivas eran identificadas por nombres como Mosquerola, Bismarck, Cordonazo y Sebastopol.
Comentó que él manejó el Mosquerola y viajaba desde el sitio donde hoy son los Barrios de Jesús, por carreteras muy malas hacia El Rincón, Cerro Manzanillo...
Read moreActualizada (en mis fotos podrás ver incluso un "histórico" contemporáneo de los cambios que ha tenido el parque)
El parque de Belén es el punto referente de Belén como sector (compuesto de muchos barrios) a través de su historia, pasó de ser un lugar completamente residencial hace 30 años atrás a convertirse en un punto neurálgico con una gran actividad comercial y donde se realizan actividades como ferias de artesanías (san alejos) y eventos comunitarios con música entre otros.
El parque ha sido remodelado en el 2019 y entregado en su remodelación previo al inicio de la temporada de alumbrados decembrina, mejorando los accesos, casetas para ventas, mejorando las zonas verdes, la estructura, nuevos asientos y mesas, haciéndolo un lugar más abierto y apto para disfrutar de el y menos disponible para ser usado para el consumo de estupefacientes y alcohol como venía siendo su dinámica antes de la remodelación.
En este se encuentran la mayoría de las entidades bancarias existentes, tiene un comercio muy variado que llega hasta las horas de la noche, hasta se puede encontrar una tienda de alimentos (Salsamentaria Brixx) abierta hasta las 12 de la noche cualquier día del año (festivos e incluso lo hacen 24, 25 y 31 de diciembre) por la 76 y frente a la avenida Bolivariana, así mismo, un restaurante de chuzos en la misma cuadra y puestos de comida.
Hace años se planteó por parte de una administración convertir la 76 e un tipo de corredor turístico y el parque como punto focal aprovechando la remodelación que tuvo la 76 y permitir el mejoramiento del sector y aumentar la seguridad de este, nunca sucedió naturalmente. Cerca al parque se encuentra la estación del Metroplus y es punto de trasbordo de otros barrios como el de Belén Rincón, cuyos puntos se encuentran sobre la avenida 30 con la 76, a una cuadra.
En este se puede encontrar una de las escuelas más antiguas de Medellín, la Rosalía Suarez, su Iglesia es una de las parroquias de la ciudad y es muy visitada como parte de las tradiciones de la Semana Santa y es punto referente de la comunidad en muchos aspectos, también se puede encontrar un árbol que es único en su especia en la ciudad de Medellín, el Bala de cañon o Cocuelo que cuando florece ofrece unas flores cuya apariencia parecen plástico y tienen un olor característico, no obstante, este árbol muy raramente produce los cocos (como residente en más de 30 años no he visto que los produzca) propios de esta especie así que no hay mucho peligro que te caiga uno.
Es foco electoral puesto que la población del sector es muy activa en esta materia y el parque ha sido epicentro de diferentes concentraciones a lo largo del tiempo, también lo es de diferentes actividades lúdicas, tanto en diciembre como en otros meses del año; también fue uno de los puntos donde se realizaban tablados en la feria de las flores, llegando a ser uno de los más famosos y el cual se hacia el último viernes de la feria, pero por las mismas razones que fueron removidos muchos de los tablados de la ciudad, este dejó de realizarse en el parque.
Como tal el parque a pesar de toda su problemática y que en muchos casos el comercio es más que indiferente hacia el mismo y sus residentes se movilizan casi que únicamente cuando se llegan a ver puntos altos de problemáticas sociales, es un muy buen lugar, tanto como punto de encuentro o como lugar para encontrar aquello que se necesita.
Actualmente cuenta con WiFi gratis provisto por...
Read moreBeautiful little square, with an amazing church. We walked from the Laureles- Calle 70 area, and were pleasantly surprised, not having an previous perception of Belen. Town was nice and laid back, more of a working class area, but pretty and people as in most of the Medellin area, very welcoming! Worth a trip to spend a little time in the park and getting something to eat at the many restaurants or street vendors...
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