El puente romano de Ourense conocido como Ponte Vella o Puente Mayor, sobre el río Miño, fue construido en siglo I d. C. Según la tradición, data de la época de Trajano. De aquel primer puente solo quedan, algunos sillares almohadillados de las bases.
Durante el siglo XII el arco principal del puente cedió dando lugar a una serie de interminables reparaciones y derrumbes que no finalizaron hasta que en el siglo XVII la reforma final dirigida por Melchor de Velasco dio al puente su aspecto actual indiscutiblemente medieval a pesar de que se mantengan elementos romanos originales como son los arcos de inicio del mismo.
La primera reconstrucción conocida (1228-1229) fue patrocinada por el obispo Don Lorenzo y apoyo del rey Fernando III. Es ahora cuando se le da el perfil actual con el arco apuntado y las rampas en ascenso.
Se conservan 7 arcos de los 11 primitivos. En el 1º de la margen izquierda aun se pueden apreciar la construcción romana. Mide 370 metros de largo, con arco central de 43 metros de ancho por 39 de alto, lo clasifican como el mayor de todo el Imperio Romano. Fue declarado monumento histórico por Decreto de la Jefatura del Estado de 6 de abril de 1961. Hoy en día y tras su peatonalización en 1989 es uno de los tres símbolos principales de la ciudad junto con Las Burgas y la Catedral de...
Read moreWell preserved, attractive Roman bridge although it's prone to flooding in winter!. There are commanding views of the city and River Miño from here. There's a nice park under it where you can take some nice photos. Pilgrims on the Camino de Santiago Camino Sanabrés or Ruta de la Plata)cross the bridge on leaving the city. Ourense is a good place to start the Camino too as it's over 100 kms...
Read moreDe los múltiples puentes que cruzan el Miño a su paso por la ciudad de Ourense el más antiguo es el Puente Romano, aunque también se le conoce como el Puente Viejo o Puente Mayor, ya que fue construido en el siglo I formando parte de la vía XVIII romana. En el siglo XIII tuvo que ser reconstruido debido a la caída de su arco central, dando al puente un nuevo perfil de estilo medieval con sus arcos apuntados; pero una mala cimentación provocó que se tuvieran que realizar interminables reparaciones hasta llegados el siglo XVII, cuando Melchor de Velasco dio con la solución definitiva para su consolidación. El puente tiene una longitud de 370 metros y 38 de altura en su arco central, manteniendo 7 de sus 11 arcos originales. Es uno de los emblemas de la ciudad apareciendo incluso en su escudo (aunque con una torre, siendo ésta derribada en el año 1839) y en 1961 fue declarado...
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