La muralla romana de Zaragoza es una pared defensiva construida en la Colonia Caesar Augusta, en la provincia Hispania Citerior Tarraconensis perteneciente al Imperio romano, actualmente denominada Zaragoza, capital de la comunidad autónoma de Aragón (España).
Construida bajo el mandato de Tiberio en el siglo I y reformada hasta el siglo III, la muralla romana de Zaragoza llegó a tener una longitud de unos 3000 metros y unos 120 torreones defensivos. Se han conservado dos tramos: el más largo, de unos 80 metros de longitud, en el extremo noroeste de lo que era la ciudad romana de Caesaraugusta, al lado del Torreón de La Zuda, y otro en el lado nordeste, que actualmente forma parte del Convento del Santo Sepulcro.
Su trazado, estudiado por Francisco Íñiguez Almech, debió de ser regular, con una altura de unos diez metros y cuatro de anchura. A intervalos de entre catorce y dieciséis metros se situaban torres ultrasemicirculares, con un diámetro comprendido entre 8 y 13 metros.La muralla de la fundación romana encerró y condicionó el trazado urbano durante muchos siglos, pues fueron reaprovechadas por visigodos y musulmanes.
La edición de 2008 de la Guía Histórico Artística de Zaragoza dirigida por Guillermo Fatás, señala (pág. 678) que recientes investigaciones indican que la muralla conservada fue construida en la segunda mitad del siglo III d. C. y ejecutada con una técnica constructiva uniforme: un cuerpo interior de hormigón romano revestido con sillares al exterior de 7 m de espesor excepto el tramo oriental, que estaría construido en aparejo de sillares y contaría con 6...
Read moreLa muralla conservada data de los siglos II y III. Con un perímetro de unos 3.000m y con 120 torreones. El amurallamiento de la ciudad se mantuvo como eficaz defensa durante el periodo visigodo y musulmán. Sus muros tenían una altura de 10m y un considerable grosor, que alcanzaba en muchas zonas los 7m, siendo la parte exterior de sillares de alabastro y caliza, y la interior de opus caementicium. Sus torres son semicirculares y tienen un diámetro en torno a los 8 m, alcanzando los 13 m. en una de las torres que flanqueaban la puerta occidental. La muralla romana protegía perímetro y discurría por la calle Echegaray y Caballero, todo el trazado del Coso y la avenida de César Augusto. La ciudad se abría por cuatro puertas, situadas en el extremo de sus ejes, la septentrional en la embocadura del Puente de Piedras, la oriental junto a la iglesia de la Magdalena, la meridional ligeramente al este del Teatro Principal y la occidental al final de la calle Manifestación. Se han hallado restos de la muralla en 36 puntos del recorrido. Algunos han sido destruidos, otros se encuentran enterrados debajo de las calles y 12 pueden ser visitados. Los dos más espectaculares se encuentran a la vista, son el tramo de San Juan de los Panetes, en la avenida de César Augusto y el de las Canonesas del Santo Sepulcro, en el paseo de Echegaray y Caballero. También destacamos los aparecidos en la esquina de Paseo Echegaray - C/ Coso, los restos junto a la torre de la Zuda y los restos localizados en...
Read moreConstruida entre el siglo I y el siglo III de nuestra Era, bajo el mandato de Tiberio, la muralla romana de Zaragoza llegó a tener una longitud de unos 3.000 metros y unos 120 torreones defensivos. Se han conservado dos tramos: el más largo, de unos 80 metros de longitud, en el extremo noroeste de lo que era la ciudad romana de Caesaraugusta, al lado del Torreón de La Zuda, y otro en el lado nordeste, que actualmente forma parte del Convento del Santo Sepulcro.
Su trazado, estudiado por Francisco Íñiguez Almech, debió de ser regular, con una altura de unos diez metros y cuatro de anchura. A intervalos de entre catorce y dieciséis metros se situaban torreones ultrasemicirculares, con un diámetro comprendido entre 8 y 13 metros.[1] La muralla de la fundación romana encierra y condiciona el trazado urbano durante muchos siglos, pues fueron aprovechadas por visigodos y musulmanes.
La edición de 2008 de la Guía Histórico Artística de Zaragoza dirigida por Guillermo Fatás, señala (pág. 678) que recientes investigaciones indican que la muralla conservada fue construida en la segunda mitad del siglo III d. C. y ejecutada con una técnica constructiva uniforme: un cuerpo interior de hormigón romano revestido con sillares al exterior de 7 m de espesor excepto el tramo oriental, que estaría construido en aparejo de sillares y contaría con 6...
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