Bonifacio Bistró — Restaurant in Autonomous City of Buenos Aires

Podría poner tres estrellas si este lugar fuera económico pero no lo es. Cuando llegamos teniendo reserva, tuvimos que esperar, y encima la señora que se encargaba de la recepción fue totalmente antipática y cero diligente. Pensamos en irnos pero por el horario y la zona iba a ser imposible encontrar otro lugar. Nos quedamos pensando que si tenía buena puntuación sería por algo. Nos equivocamos mal. Quizás si tan sólo hubiesen tratado de atenerse a respetar una regla básica (no gourmet): que la pasta se sirve caliente y se asegura de que así llegue a la mesa, todo hubiera sido menos frustrante (ya que era el plato principal). Fuimos para festejar el día de los enamorados con mi novio y nos sentimos realmente defraudados. Ambos pedimos los raviolones de salmón con la salsa de frutos de mar y fue la peor decisión. El plato vino helado, con poca crema y con casi nulos camarones; a mi pareja al menos le pusieron algunos mientras en el mío brillaban por su ausencia. Tuve que bucear en la poca profundidad cremosa para descubrir alguno perdido debajo de un raviol. Luego, cuando pude divisar a la chica, desesperada por antender a la gente, y sin dar abasto (es decir pocos mozos para muchas mesas) le dije que el plato estaba frío y que siendo una persona de un comer normal, la cantidad del plato resultaba absurda (no con estas palabras pero se lo dije), de todas formas ya lo habiamos comido para ese momento. De postre pedimos la copa Baileys y no tenía casi Baileys, solo dulce de leche básico de esos que seguro compran tachos de plástico y las nueces prometidas en la carta inexistentes (ni se los mencioné, ya estaba molesta, puesto que en todos lados que estén pido ese tipo de copas y me encantan). Lo único aceptable fue el crumble de manzana tibio con helado (de proporciones bastante austeras). Si uno pagase dos pesos, o fuera a un restaurante de barrio, con precios de barrio, esto sería simplemente parte del contrato implícito. Pero lamentablemente no es el caso. El lugar no es barato, tiene aires de ser un lugar distinguido, pero la calidad y presentación de los platos, así como la atención rápida y mínima, como el murmullo insoportable de «los habitués» del lugar que son muchos (recordemos que no hay tantss opciones en la zona y todos van) hacen que se vuelva un lugar donde todo es «maquillaje». Es decir «pinta de lugar fino» pero en definitiva restaurante barrial que lo único que tiene de caro es su carta y lo.único de conveniente su cercanía (para quienes vivimos por acá) Las dos estrellas van por la actitud última de la chica que nos atendió, que hacia el final de la noche, cuando podía ser amable por estar liberada, se ofreció a tomarnos fotos al ver un intento fallido. Su buena predisposición hace que no sea menos aún mi calificación. Pero, en resumen, este restaurante no lo vale. El cuchitril, otro restaurante de este barrio, aunque con carta más reducida, es infinitamente superior en todos los aspectos. Así que si andan por Bonifacio vayan al Cuchitril antes que a este lugar. Como consejo a los propietarios: no sean miserables y contraten más gente, al menos días festivos, pongan más atención a sus platos, así como también ajusten el valor del servicio. (Que si uno ve lo que se paga por servicio de mesa todavía cierra menos) y por favor, cambien o eduquen a la mujer de la entrada. (Y si la mujer es dueña, que se mantenga al margen o tome un curso de...

Fui con mi pareja para mi cumpleaños a cenar. Me hicieron pasar el peor cumpleaños. Llegamos y nos preguntaron si queríamos buñuelos (que por cierto estaban fríos y re aceitosos) y nos trajeron pan duro. Nos enteramos después que los buñuelos nos lo cobraron sin avisarnos que los cobraban y nosotros pensábamos que era servicio de mesa. Pedimos dos platos de 5000 pesos c/u y eran simplemente una carne con papas al horno y fríos. Pedimos agua y parece que nos trataron mal por no pedir vino como los demás. Al final pedimos la cuenta a eso de las 10:30 pm y se la pedimos 4 o 5 veces y la cuenta no llegaba. Terminaron trayéndonos la cuenta a las 12:15 am. Y yo ya estaba en pleno cumpleaños pasándola muy mal. Cuando nos traen la cuenta pago en efectivo y nos dicen que faltan 1000 pesos y nos parecía raro porque habíamos contado bien. Nos dicen que hicieron un descuento con débito pero nosotros nunca dijimos que pagábamos con débito y nos trajeron después otra cuenta. Y cuando agregamos los mil nos vuelven a decir que faltan mil más y de mala manera. Les terminamos pagando y nos fuimos con mucha rabia para no volver jamás. Realmente no lo recomiendo y no soy a la primera persona que le pasa que la comida es un desastre y la atención un desastre. No se como pueden decir que es 4 estrellas. La única razón debe ser porque parece que lo es pero los platos son insulsos y hay mejores lugares relación precio/...

No se si tuvimos mucha mala suerte, o cual fue el problema, pero la experiencia en este lugar fue bastante negativa. Primero habíamos hecho reserva por WhatsApp y al llegar en el horario indicado, no había ninguna reserva tomada, no pasó nada pq estaba bastante vacío el lugar así que nos armaron una mesa con mucha voluntad. Pedimos unas aguas sin gas… y no tenían porque había fallado el distribuidor… yo no lo entiendo, ni entiendo cómo funciona el negocio gastronómico, pero yo hubiera salido corriendo a comprar aguas a cualquier supermercado siendo algo q tiene tanto margen! En fin… pedimos los platos, dos de ellos lomo… uno viene bien y el otro re pasado, seco… al pedir que lo cambien.. traen otra vez el plato pero en vez de lomo era otro corte de carne… parecía todo muy arreglado a las apuradas. El mesero siempre correcto y bien predispuesto, pero la experiencia en general no fue nada digno de querer repetir el lugar. Los platos estaban bien, pero nada...