Puerta Uno Bar — Restaurant in Autonomous City of Buenos Aires

Buen lugar con excelente coctelería, aunque con una carta algo acotada. Pedí un Gin and Basil Smash (Gin, albahaca, almíbar simple, jugo de limón.) acompañándolo con Rabas, buen cocktail para acompañar pescados y mariscos por su carácter cítrico, El sabor estaba perfectamente balanceado y se distinguían todos sus ingredientes; interesante (y práctica imagino) idea de traer el shaker (coctelera) a la mesa con el colador Hawthorne y el de malla para terminar de armar el trago en la mesa, desconozco el tiempo que pasó entre que se preparó el trago en la barra y se sirvió pero no se notó dilución de más ni pérdida de frío. Luego pedí el pisco Antidote (Pisco, Jugo de gengibre cold press, vermouth Carpano, Jugo de limón, jugo de pomelo, bitter angostura, ahumado con canela.) para acompañar un tofee roller de postre. Mala elección mía ya que el trago también tiene un carácter que no iba bien con el perfil del postre, tendría que probarlo nuevamente porque no puedo aseverar que el sabor no haya estado tapado o modificado por el postre que pedí. El ambiente es agradable, con buena decoración e iluminación, los ambientes están bien dispuestos y hay opciones para todos los gustos (barra, mesas altas, mesas bajas, sillas, sillones), un punto a criticar es la música electrónica genérica que le resta personalidad al lugar y por momentos se vuelve demasiado repetitiva y molesta. La atención es cordial y atenta aunque se nota el escaso personal y en cuanto el bar comenzó a tener más cantidad de gente, decayó un montón la velocidad. No es un lugar barato pero los precios son perfectamente normales para la calidad de coctelería...

El ambiente espectacular: la oscuridad con las velas, los sillones re cómodos, amplio espacio por mesa, y buena música.

Los tragos súper originales: si te gusta muy dulce te recomiendo Love Potion y Cotton mouth.

La comida (que pudimos probar) muy buena: chicken fingers de pollo empanados en cereal, y papas rotas con alioli. Lo crocante estaba crocante y lo tierno, tierno. Todo muy correcto.

La atención, el punto SÚPER débil: reservamos a las 9. Se nos presentó un camarero buena onda, y nos tomó el primer pedido de 2 tragos y 2 entradas. A partir de ahí nos atendieron 4 personas durante toda la noche, trayendo mal los pedidos de comidas, dejándonos la tarjeta de crédito con el ticket de otra mesa... Cero comunicados entre ellos. Las papas que eran rotas con alioli las trajeron fritas con cheddar, y terminaron tardando media hora en remendar el error. Como la gota que rebalsó el vaso, para cuando terminamos las papas (que tardaron por su culpa) quisimos pedir un plato para compartir, nos dicen "ah no, la cocina cerró a las 10, ya no sale ningún plato". Si yo me siento a las 9 y: la cocina cierra a las 10 me traes un plato mal y me lo remendas con demora de media hora Me lo tenés que avisar apenas me siento o incluso cuando apenas te hago el primer pedido. La excusa fue que "mucha gente reserva a las 9", lo cual obviamente no alcanza para que no puedan hacer el comentario a todos los comensales.

Menos mal que el ambiente y la calidad de la comida y bebida salva la mala atención que recibimos esa noche. Volvería solo para asegurarme de que fue una sola vez aislada, y no que...

La entrada tiene una puerta negra y sin iluminación. La zona de esa cuadra es oscura, eso no me gustó mucho. Me gusto la comida, soy vegano y tuve una opción muy rica para elegir. El ambiente era tranquilo con música de fondo sin molestar. Es un lugar tranquilo para ir en pareja o con un grupo de amigos. Para la parte que reservamos, que se ubica en el fondo del lugar, separados del centro del lugar y de la gente, la mesa era baja con sillón largo para que se sienten 3 personas cómodas, luego hay 2 o 3 silloncitos en cuadrados y una mesa chiquita, la cual dependiendo los gustos y costumbres de cada uno puede parecer bastante pequeña.nosotros éramos ocho personas y los platos estaban pegados. La mesa a mi gusto no estaba bien iluminadasi bien es algo romantico. Las otras mesas que están en el centro eran normales de altura. El baño está bien cuidado. Hay que tener cuidado con los escalones que no se ven en porque son chicos y no están muy bien iluminados de todas maneras los mozos lo señalaban. Hay variedad de tragos para pedir además de lo tradicional. Luego habia un espacio reservado espejado por fuera, mucho más íntimo porque se cierran las puertas y quedas separado del común de los clientes. Y no sé si es para una pareja sola o si hay espacio para otra más. No sé si todos podemos tener acceso a ese lugar, pienso que sí, consulten. Espero...